Trump logra reactivar la negociación en la primera fase de su plan de tregua
NotMid 05/10/2025
MUNDO
En un giro tan dramático como impredecible, impulsado por el presidente estadounidense, Donald Trump, israelíes y gazatíes están más cerca de un acuerdo que podría lograr un cese al fuego en la devastada Franja de Gaza y asegurar la liberación de los rehenes secuestrados.
Tras la ambigua respuesta de Hamás a su plan, Trump decidió interpretarla como positiva y presionó públicamente para detener los ataques. En consecuencia, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ordenó la suspensión de la operación terrestre prevista para tomar el control de la Ciudad de Gaza. En lugar de enviar soldados, Israel enviará negociadores a El Cairo. Aunque no hay un alto el fuego oficial y completo, las tropas han pasado a una “situación operativa de defensa”, que les permite responder a amenazas inminentes.
El Plan y los Obstáculos de la Negociación
Bajo la mediación de Egipto, Qatar y, sobre todo, Estados Unidos, las partes negociarán indirectamente un primer y crucial intercambio:
- Liberación de 48 rehenes (20 vivos) en manos de Hamás.
- A cambio, 250 presos palestinos (cumpliendo cadena perpetua por terrorismo) y más de 1.700 gazatíes detenidos desde el 7 de octubre.
Las verdaderas discrepancias se esperan en la segunda fase, que definirá el futuro de la Franja: el calendario y tamaño de la retirada militar israelí y la exigencia de la entrega de armas por parte de Hamás. Netanyahu ha sido claro: el objetivo se logrará “por la vía diplomática en base al Plan Trump o por la vía militar”.
La Apuesta Personal de la Administración Trump
Trump ha enviado a El Cairo a su emisario especial, Steve Witkoff, y a su asesor Jared Kushner. La presencia de su yerno, uno de los arquitectos de los Acuerdos de Abraham, subraya la seriedad del momento. Las familias de los rehenes, que se congregaron con 120.000 israelíes en Tel Aviv, ven en esto la última esperanza. El plan establece la entrega de los rehenes en las primeras 72 horas de calma.
El inquilino de la Casa Blanca, al recibir la respuesta ambigua de Hamás, decidió ignorar las reservas del grupo yihadista para blindar su iniciativa. Horas después de su ultimátum y su exigencia de “detener de inmediato el bombardeo”, Netanyahu ordenó el cese de la ofensiva en la Ciudad de Gaza.
Tensión en el Gabinete de Netanyahu
Netanyahu reaccionó inicialmente señalando que Israel se preparaba para implementar “de inmediato la primera fase del plan de Trump”. Posteriormente, ante las cámaras, expresó su esperanza de que los secuestrados vuelvan en los próximos días, durante la festividad de Sucot. “Estamos a punto de un gran logro. Aún no es definitivo”, declaró, presumiendo que la ofensiva previa fue clave para doblegar la postura de Hamás.
Sin embargo, la decisión ha provocado la ira de los socios ultranacionalistas de la coalición. Los líderes Itamar Ben Gvir y Bezalel Smotrich, aunque de momento no abandonan el Gobierno, se oponen radicalmente al plan. Smotrich criticó duramente la pausa:
“Detener la ofensiva en Gaza y llevar a cabo negociaciones por primera vez no bajo fuego es un grave error y receta segura para que Hamás gane tiempo y erosione cada vez más la posición israelí… en cuanto a eliminar a Hamás y desmilitarizar Gaza”.
Ante las resistencias, Trump exigió a Hamás actuar con rapidez: “De lo contrario, todo se perderá. No toleraré demoras“.
El Dilema de Hamás y la Esperanza de Gaza
Hamás se encuentra en un dilema existencial bajo una enorme presión interna (una población gazatí agotada) y externa (el ultimátum de Trump y las exigencias de sus mediadores árabes). Aunque Yihad Islámica haya anunciado que la respuesta de Hamás expresa la postura de la “resistencia palestina”, días antes había criticado que el plan servía los intereses de Israel.
A pesar de la reducción del fuego, la jornada no fue pacífica, con al menos 21 palestinos muertos reportados por las autoridades gazatíes. No obstante, en Gaza hay un clamor por la tregua: “Gracias a dios, Hamás aceptó el acuerdo y espero que siga este camino y que Trump cese la guerra”, afirmaba un residente.
Desde Israel, el mensaje es un ruego desesperado: “Netanyahu, el pueblo de Israel quiere este acuerdo. No nos quites el aire, no arruines la esperanza de traer a casa a los secuestrados,” clamó Einav Zangauker, la madre de un rehén. La esperanza es que el segundo aniversario del ataque del 7 de octubre sea el momento de la vuelta a casa.
Agencias