El secretario del Tesoro, Scott Bessent, perfila medidas contra el sector energético ruso que podrían anunciarse esta misma semana si Moscú rechaza negociar.
NotMid 17/12/2025
USA en español
La administración estadounidense está lista para apretar el nudo económico sobre el Kremlin. Según ha informado Bloomberg News, Washington prepara una nueva batería de sanciones dirigidas al corazón financiero de Rusia: el sector energético. El objetivo es claro: forzar a Vladímir Putin a sentarse en la mesa de negociaciones para poner fin a la guerra en Ucrania.
Los objetivos de Washington
Las nuevas medidas no se limitan a las exportaciones convencionales, sino que apuntan a la infraestructura de evasión que Moscú ha construido en los últimos años:
- La “flota fantasma”: Se estudia el bloqueo de los petroleros que operan bajo radares internacionales para transportar crudo ruso evadiendo las sanciones previas.
- Intermediarios financieros: Las sanciones alcanzarían a los comerciantes y facilitadores que permiten que las transacciones de Moscú sigan fluyendo en los mercados globales.
Diplomacia de choque
La estrategia fue discutida a principios de esta semana por el nuevo secretario del Tesoro, Scott Bessent, en una reunión clave con embajadores europeos. La coordinación con los aliados es vital para asegurar que el golpe al suministro energético no desestabilice los precios mundiales de la energía, pero que sí asfixie la maquinaria de guerra de Putin.
De momento, tanto la Casa Blanca como el Departamento de Estado han mantenido silencio oficial, aunque las fuentes indican que el anuncio podría producirse de forma inminente, posiblemente antes de que termine la semana.
Agencias
