La aparición en el país de dos hijos repudiados del rey por primera vez en 27 años desata rumores sobre la sucesión al trono
NotMid 16/08/2023
ASIA
Tailandia es ahora mismo un reino budista en punto muerto. Pero el estancamiento que arrastra un país donde no hay manera de que ningún partido forme gobierno tras las elecciones del pasado mayo, no ha hecho sombra en los últimos días a los chascarrillos populares por la visita sorpresa de dos de los hijos repudiados del rey.
El príncipe Vacharaesorn Vivacharawongse fue el primero en aparecer por su país natal por primera vez en 27 años. Dejó su nido de Nueva York y se plantó en una Tailandia distraída con la crisis política. Era inevitable que, de inmediato, se desataran rumores sobre la sucesión al trono. Este abogado de 42 años es uno de los cinco hijos que el monarca Maha Vajiralongkorn tuvo con su segunda esposa, Sujiranee, una ex actriz de quien se divorció en 1996 y que fue denigrada y acusada públicamente de adulterio. Tuvo que expatriarse junto a sus vástagos a Estados Unidos.
¿Se trata de la rehabilitación oficial de Vacharaesorn? Es la pregunta que se hicieron los tailandeses tras ver aparecer por casa al hijo que fue desterrado junto a su madre y tres de sus hermanos. Mejor suerte tuvo su hermana Sirivanavari, reclamada por su padre para vivir con él en Bangkok y a la que la prensa rosa tailandesa ha querido convertir en todo un icono de la moda.
La sorpresa en Tailandia fue aún mayor cuando pocos días después de difundirse imágenes de la llegada de Vacharaesorn se plantó en el país también su hermano Chakriwat Vivacharawongse (40 años). Los dos visitaron juntos varios lugares de la capital, como el Hospital Siriraj, donde presentaron sus respetos a las imágenes de sus difuntos abuelo y bisabuelo.
DUDAS SOBRE LA SUCESIÓN
En Palacio nadie se ha pronunciado sobre la visita del los dos hijos pródigos. Pero sus fotos haciendo turismo por Bangkok han despertado un viejo debate sobre quién ocupará el trono tras el excéntrico Vajiralongkorn (71 años), tres veces divorciado y con siete hijos, que aún no ha nombrado sucesor oficial.
Todo apuntaba a que podría sucederle la mayor, la princesa Bajrakitiyabha, la única hija del primer matrimonio del monarca con su prima hermana, Soamsawali, de quien se divorció en 1991. El problema es que Bajrakitiyabha (44 años) lleva en coma desde diciembre. La opinión mayoritaria es que se encuentra en muerte cerebral y que nunca se recuperará.
El paseo de Vacharaesorn y Chakriwat -que son el segundo y el tercero de los vástagos del rey- por su tierra ha sido la gran noticia en el país. Pero las suyas no van a ser las únicas mediáticas visitas que reciba este país en verano. Estaba previsto que Thaksin Shinawatra, el ex primer ministro que lleva más de 15 años en un exilio autoimpuesto, huyendo de varios cargos penales que le persiguen, regresara el viernes a Bangkok. Lo había anunciado él mismo. En cambio, a última hora, dijo que debía posponer el viaje un par de semanas por una cita médica.
El multimillonario Thaksin es un ex magnate de las comunicaciones de 74 años que ganó dos elecciones y fue depuesto del poder en el golpe militar de 2006. Vive en Dubái y, a pesar de que ha sido condenado por corrupción a penas que suman hasta 10 años, él alega que se todo se trata de una persecución política.
Si finalmente vuelve a Bangkok, a Thaksin le espera en la capital su hija Paetongtarn Shinawatra, una de las promesas de la política nacional. A sus 36 años fue la candidata en las pasadas elecciones por el Partido Pheu Thai, que quedó en segundo lugar. Precisamente, esta semana, su partido anunció que, para desatascar la situación política, está uniendo su fuerza con el conservador Partido Bhumjaithai, famoso por su fuerte apuesta por legalizar la marihuana.
Para lograrlo – lo de formar gobierno -, han hecho un llamamiento a los demás partidos para que se unan a su alianza después de que la Asamblea Nacional bloqueara hasta dos veces los intentos para liderar el país del partido ganador de los comicios, Move Forward, que recibió más de 14 millones de votos y está capitaneado por el progresista Pita Limjaroenrat, empresario de 42 años.
Este partido, que hizo campaña para reformar las leyes de lesa majestad – que criminalizan las injurias a la corona con hasta 15 años de prisión -, reunió una coalición de hasta ocho formaciones – entre ellas estaba Pheu Thai – con 312 escaños en la Cámara de Representantes de 500 miembros. Sin embargo, siguiendo el dictado de una Constitución promulgada a su antojo por el Ejército, la confirmación de un nuevo primer ministro requiere un voto mayoritario tanto por la Cámara electa, como por un Senado con 250 miembros y que está dominado por los militares, que fueron los que impidieron que Pita se convirtiera en primer ministro.
Agencias