El asesinato del activista conservador Charlie Kirk enciende la mecha / Se suma a los de dos congresistas de Minnesota en junio y el intento de magnicidio de Trump
NotMid 14/09/2025
USA en español
El asesinato del activista conservador Charlie Kirk ha puesto en evidencia la profunda fractura que sufre la sociedad estadounidense. Según el gobernador de Utah, Spencer Cox, la nación está destrozada, inmersa en una espiral de odio y violencia política que se manifiesta en ataques contra figuras públicas de ambos bandos. Este trágico evento se suma a una alarmante lista de incidentes recientes, incluyendo asesinatos de políticos, agresiones a congresistas y atentados contra la vida de líderes como Donald Trump.
Estudios del FBI y del Departamento de Seguridad Nacional muestran un aumento de más del 300% en incidentes de terrorismo doméstico entre 2013 y 2021. Las amenazas contra funcionarios públicos se han multiplicado, y la polarización, alimentada por las redes sociales, ha llevado a la normalización de la violencia. La situación es tan grave que, aunque la mayoría de los ciudadanos no apoya el asesinato político, muchos creen que sus oponentes sí lo hacen, creando una atmósfera de desconfianza y miedo.

Expertos como el politólogo Robert Pape señalan que Estados Unidos ha entrado en una “era del populismo violento”. El problema, afirma, no se limita a grupos extremistas, sino que emana de ciudadanos comunes, muchos de clase media, que justifican la violencia política. Este fenómeno es resultado de un choque cultural y del debilitamiento de las instituciones democráticas, lo que amenaza con desatar un conflicto mortal. El artículo concluye con una advertencia: si la sociedad no condena la violencia, esta continuará creciendo, poniendo en peligro el futuro de la república.
Agencias
