NotMid 10/04/2025
OPINIÓN
RAÚL DEL POZO
La humillación de EEUU a Europa es una novela de celos. Ahora su secretario del Tesoro dice que lo que ha hecho Pedro Sánchez con China «es como cortarte tú mismo el cuello». La nación norteamericana es el mejor resultado de una Europa ilustrada, pero ahora piensa más en Asia y ha dicho adiós al Viejo Continente con tosquedad y malos modos. Nos ven como a unos pedantes.
El escritor y poeta RalphWaldo Emerson escribió: «Aquí una vez se plantaron los granjeros asediados, y dispararon el tiro que se oyó en el mundo entero». Pero en Europa pasó inadvertido. Los americanos piensan que los europeos no se enteraron de la Declaración de Independencia. Y contestaron al desdén diciendo que América no tiene castillos en ruina ni tantos quesos, pero que acoge a los que claman por la libertad. ¿Por qué el amigo americano, que ha salvado dos veces a Europa de la barbarie, se niega a seguir siendo el ejército de salvación y nos ha tomado manía?
Donald Trump piensa que la UE vive a costa de la defensa y de la economía de EEUU, y está en contra del «lío tremendo de la UE» y de la infravaloración del dólar contra el euro. Le pone furioso lo de la contaminación y el cambio climático. que ve como pedanterías, y ha jurado que no se gastará un dólar más en la defensa del continente europeo. Pero, para ello, ha provocado una guerra mundial del comercio.
El presidente estadounidense quiere revisar 70 años de consenso. Piensa que los europeos son desagradecidos y van por la vida de maestrillos sabelotodos. Se encuentra más cerca del Pacífico que del Atlántico. Se han enfriado los vínculos emocionales. Y la época del romanticismo en las relaciones ya es pasado. Se escribió que el nuevo continente solo era el eco del viejo y que el Capitolio se construyó inspirándose en la catedral de San Pedro de Roma. Sin embargo, los americanos siempre desconfiaron de las palabras de los políticos europeos; se burlaron de su arrogancia.
Dice José Carlos Díez que Trump corta el grifo y no se gastará más en Defensa en Europa. Y Europa, por su parte, se lanza a la locura de subir el gasto militar y comprar cualquier cosa sin un plan definido. ¿Resultado? Cuatro golfos corruptos alrededor de los presidentes que se enriquecerán a costa de los contribuyentes.
En los tiempos de la Guerra Fría, EEUU invirtió muchos recursos en un programa secreto de propaganda en Europa. Su misión consistía en apartar sutilmente a la intelectualidad de su prolongada fascinación por la URSS. Ahora, en cambio, se ponen del lado de Rusia. Están locos.