Koldo, Ábalos y Cerdán, nombres y apellidos sonoros, con la suficiente personalidad para quedar bien en el género de la novela negra
NotMid 14/06/2025
OPINIÓN
LUCÍA MÉNDEZ
«Dos caras, como algunas personas, tiene la Iglesia de San Sebastián…», así comienza Misericordia, la novela más hermosa de Benito Pérez Galdós. Sobre la pobreza, la vulnerabilidad, la ingratitud, el pecado y la culpa en una capital llena de miserias y vacía de personas misericordiosas.
Dos caras no bastan para definir al trío de personalidades que se paseaban por las alturas del PSOE, del Gobierno y del Parlamento con un número de rostros completamente desproporcionado. Más de dos y de tres y de cuatro caras tenían, y siguen teniendo, Koldo, Ábalos y Cerdán, nombres y apellidos sonoros, con la suficiente personalidad para quedar bien en el género de la novela negra, en el subgénero de informe de la UCO o en la facundia de ser diputados y ministros de día, y jugadores de partida clandestina al caer la noche.
La de cemento armado es otra cara de la moneda de este trío. Todos los periodistas hemos sido testigos de sus idas y venidas por el poder ejecutivo y legislativo. Koldo, por ejemplo, nunca rompió a hablar con nadie cuando era el escolta del ministro Ábalos y sólo de mirarlo ya nos daba miedo. Nunca tuvo cara de buenos amigos. El asesor ha roto a hablar y ríete tú de lo que su cara escondía. Una grabadora asesina que ha dejado en porretas a Cerdán y a su ex jefe. Este marrón no se lo quiere comer solito.
Qué decir de Santos Cerdán, un hombre afable, sólido, serio, como de una pieza, escondido detrás de un silencio que tenía pinta de ser interesante. El arcano de las negociaciones con Puigdemont. Nunca se alteró lo más mínimo cuando los periodistas le metían el micro en la boca por los pasillos del Congreso. ¿Está tranquilo? Míreme a la cara, no tengo nada que temer, soy un hombre honrado. La cara de la honestidad se soltó en el escenario del 41º Congreso Federal, celebrado hace pocos meses en Sevilla. «Hay una industria del odio generando fango, ruido y bilis sin parar con el objetivo de generar caos. Lo sabe bien el presidente del Gobierno. Nunca antes hubo en democracia un ataque similar contra un presidente legítimo. Van a por nosotros porque representamos todo lo que desprecian, lo que odian: la justicia social, la equidad, la lucha por la igualdad de oportunidades, por la igualdad de género».
Santos Cerdán casi nos convence a todos. Después de las grabaciones de Koldo, es como para gritarle: «Olé tus huevos». Expresión que explica, aclara e ilumina muchas de las cosas que están pasando en España.