Pese a que la coalición de izquierdas Frente Amplio (FA) ganó, el porcentaje de votos obtenido por la suma de los partidos de la coalición les permite pensar en una victoria en el balotaje del 24-N
NotMid 28/10/2024
IberoAmérica
La izquierda vio frenadas sus expectativas en las elecciones uruguayas de este domingo, que dejaron buenas noticias para la coalición de centro derecha liberal de Luis Lacalle Pou.
Pese a que la coalición de izquierdas Frente Amplio (FA) ganó las presidenciales, el porcentaje de votos obtenido por la suma de los partidos de la coalición de gobierno les permite pensar en una victoria en el balotaje del 24 de noviembre.
“La coalición es el proyecto político más votado en nuestro país”, celebró Álvaro Delgado, el candidato del Partido Nacional, del presidente Lacalle Pou. Su rival, Yamandú Orsi, optó por destacar que el Frente Amplio fue el ganador de las elecciones.
Escrutados el 83,38% de los votos, Orsi obtuvo el 42,93%, seguido de Delgado (27,55%), Andrés Ojeda, candidato del Partido Colorado y parte de la coalición oficialista (16,37%), al igual que Guido Manini Rìos (2,41%) y Pablo Mieres (1,73%).
Gustavo Salle, del partido antisistema de izquierdas Identidad Soberana, obtuvo el 2,66% y celebró el resultado vistiendo una camiseta con la siguiente leyenda: “Meteos vuestra Agenda 2030 por el culo”.
La suma de los votos de Delgado, ex secretario general de la presidencia de Lacalle Pou, y Ojeda es mayor de lo esperado. El Partido Nacional y el Partido Colorado son dos formaciones políticas que se remontan a la constitución misma de la nación uruguaya.
Ojeda tuvo el mérito de haber devuelto su partido, que gobernó tres períodos desde la recuperación de la democracia en 1985, a la primera línea política. Sus votos y su apoyo serán imprescindibles para Delgado si aspira a derrotar a Orsi.
El ambiente en el “bunker” del Frente Amplio no era precisamente alegre, todo lo contrario a lo sucedido en el de la coalición gubernamental, con la eufórica presencia de todos sus candidatos.
Daniel Martínez, el candidato del Frente Amplio derrotado cinco años atrás por Lacalle Pou, cree, pese a los números, que Orsi será el próximo presidente.
“Estamos mucho mejor que en la elección anterior. El balotaje, aunque no soy adivino, estoy convencido de que lo ganamos”, dijo el ex alcalde de Montevideo a “El Observador”.
El Frente Amplio gobernó Uruguay entre 2005 y 2020, con dos gobiernos del ya fallecido Tabaré Vázquez y uno de José Mujica.
Lacalle Pou, que ganó por una mínima diferencia el balotaje de 2019, goza de una aprobación cercana al 50%, pero la Constitución uruguaya no permite la reelección inmediata. Para intentar regresar al poder, Lacalle Pou, hijo de presidente, deberá esperar a las elecciones de 2029.
Más allá de lo que suceda en la elección presidencial, la jornada de este domingo dejó una alegría para la coalición gubernamental: el proyecto de la principal central obrera del país y del Partido Comunista para reformar el sistema previsional fue rechazado con contundencia, con un 63% de votos negativos. La autorización para realizar allanamientos en horas nocturnas fue rechazada en plebiscito por un 60% de los votos.
Las elecciones de este domingo definieron también la conformación de la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores, en una votación reñida y equilibrada entre ambas coaliciones.
Mujica, símbolo político del Frente Amplio, fue a votar en silla de ruedas -está siendo tratado de un cáncer muy agresivo- y se lamentó de que los candidatos estén muy “preocupados mucho en lo que se va a gastar y no cómo se va a generar”
“Nadie habló de cómo hacemos para producir un poco más, de las divisas”, señaló el ex presidente, al que le llamó la atención el dinero que gastó Ojeda en la campaña: “Me impresionó”.
Tras votar, Lacalle Pou se comprometió a “no empezar cosas con las que no esté de acuerdo el próximo gobierno”, que asumirá el poder el 1 de marzo de 2025.
Agencias