El técnico vuelve a Chamartín, donde jugó de blanco por última vez el 18 de agosto de 2014. “El rol ahora será diferente, pero mi relación con el estadio fue buena y espero mantener eso”
NotMid 19/08/2025
DEPORTES
El 19 de agosto de 2025 marca una fecha significativa para el madridismo. Once años y un día después de su último partido como futbolista en el Bernabéu, Xabi Alonso regresa al coliseo blanco, esta vez para estrenarse como el nuevo entrenador del Real Madrid. Su reaparición en el banquillo, vestido con polo y pantalón largo, cierra un ciclo de aprendizaje y abre una nueva era llena de expectativas para el club.
La decisión de Alonso de abandonar el Madrid en 2014, justo después de ganar la Décima, no fue una rabieta ni un impulso del momento. Como él mismo admitió, buscaba nuevos “estímulos” y la oportunidad de formarse bajo la batuta de Pep Guardiola en el Bayern de Múnich. En los 4.019 días que han transcurrido, Alonso ha cultivado su visión táctica, absorbiendo las lecciones de sus mentores —José Mourinho, Carlo Ancelotti y Guardiola— y fusionando lo mejor de cada uno. Su carrera en los banquillos, que comenzó en las inferiores del Madrid y maduró en la Real Sociedad y el Bayer Leverkusen, lo ha preparado para el desafío más grande de su carrera.
Su filosofía de juego, basada en las palabras clave “presión”, “intensidad” y “distancias”, ha sido el eje de su trabajo desde que llegó a Valdebebas. Alonso ha dejado claro a la plantilla que para que el sistema funcione, todos los jugadores deben “funcionar como equipo”, con un énfasis particular en el esfuerzo defensivo de los delanteros. La pretemporada en Estados Unidos y las intensas sesiones de vídeo han sido el “regreso a la escuela” que muchos esperaban, donde el equipo ha ido asimilando la compleja, pero efectiva, idea táctica de su nuevo técnico.
Con la plantilla aún incompleta por la ausencia de jugadores clave como Bellingham o Rüdiger, el debut de Alonso en el Bernabéu contra Osasuna plantea un desafío inmediato. Aunque en el Leverkusen utilizaba un esquema con tres centrales, se espera que para este partido opte por una defensa de cuatro, con posibles debuts de nuevas incorporaciones. La alineación será un primer indicio de su planteamiento, una obra que se irá perfeccionando a medida que recupere a todos sus efectivos.
El “arquitecto de la Décima” ha vuelto a casa. Su inteligencia en el campo, su liderazgo silencioso y su pasión por el fútbol son ahora las herramientas con las que busca construir un nuevo equipo campeón en el Bernabéu. El rol es diferente, pero la esperanza de la afición es la misma: volver a ver al Real Madrid en la cima de Europa.
Agencias