¿Es que ni las palabras ni los hechos significan nada? Yo creo que sí
NotMid 09/06/2025
OPINIÓN
FEDERICO JIMÉNEZ LOSANTOS
Cuando la izquierda cojea, siempre aparece algún político o medio de derechas pidiendo “moderación” al PP. Pero ni siquiera los ataques a Aznar por no imitar al genuflexo Gallardón ante PRISA y el PSOE, alcanzaron la violencia de los vertidos contra Ayuso y contra los que despectivamente llaman “muy cafeteros”, que aplaudimos su público rechazo al desprecio ritual a la lengua española, pinganillo mediante. Un reparo condescendiente es que, aunque en el fin tenía razón, la perdía por el medio. Ya nos contarán qué medio es el adecuado si nunca se emplea. En realidad, es porque creen que ellos, los ofensores, se ofenderán. Alguna vez debería tocarles, pero hay que evitarlo, huy, huy. Y si te hablan en eusquera sabiendo que dijiste la víspera que, de hacerlo, te irías de la sala. ¿no debió frenarse Pradales? ¿Debió faltar a su palabra y quedarse? ¡Ya está bien de humillaciones! Pero la crítica más sorprendente es la de un sutil columnista que la acusa de encarnar un “sanchismo de derechas”. No diré que lo que llama Boadella “la doma” nacionalista ha alcanzado sus últimos objetivos civiles, aunque lo parece. Veamos ese contenido que dicen compartido.
Lo que distingue al sanchismo es su asalto a las instituciones y muy en especial la Justicia. ¿Ha asaltado Ayuso la independencia judicial o ha acusado a los jueces de lawfare? ¿Ha urdido chantajes a fiscales, jueces o la UCO para ocultar la corrupción? ¿Ha usado la fiscalía general del Estado contra un rival político, o ha padecido ese abuso típicamente sanchista? ¿Defiende subir los impuestos y limitar la libertad de horarios comerciales? ¿Contrapone la sanidad, la enseñanza y la universidad públicas a las privadas? ¿Defiende la amnistía a los golpistas de 2017, y el “cupo catalán”? ¿Quiere reimplantar el impuesto a herencias y Patrimonio? ¿Quiere poner más impuestos al turismo y la hostelería? ¿Está contra el propietario de pisos y a favor del okupa? ¿Ha creado tan poca vivienda pública como Sánchez? ¿Defiende que la comunidad de Madrid tenga preferencia en la recepción de fondos, ya que es la que más aporta al común? ¿Defiende la Ley de Memoria Histórica, la de Violencia de Género, la del Sí es sí o la Ley Trans, o crea alternativas a todas ellas? En resumen: ¿es sanchista la gran enemiga de Sánchez y de toda su política? ¿Es que ni las palabras ni los hechos significan nada? Yo creo que sí.