NotMid 08/0772025
DEPORTES
NEW JERSEY – El Chelsea se impuso con autoridad al Fluminense con un contundente 2-0 y se convirtió en el primer finalista del Mundial de Clubes 2025. Dos golazos de João Pedro sentenciaron el encuentro, y ahora el equipo inglés espera al ganador del cruce entre PSG y Real Madrid para la gran final del próximo domingo 13 de julio.
Victoria convincente a pesar del calor
A pesar del intenso calor en el MetLife Stadium de Nueva Jersey, que obligó a ambos equipos a dosificar las cargas físicas, el Chelsea se llevó una merecida victoria. El Fluminense, aunque luchó y compitió con gran esfuerzo, no pudo contrarrestar la evidente diferencia de jerarquía técnica del representante europeo, una disparidad que, a diferencia de otros partidos del torneo, se hizo muy patente en esta semifinal.
VER Resumen del partido
La victoria del Chelsea no solo se basó en la calidad individual de sus jugadores, sino también en ese toque de fortuna indispensable en estas instancias clave.
João Pedro, la figura con doblete decisivo
Los dos goles del partido fueron obra de João Pedro, ambos en momentos cruciales que aportaron serenidad a su equipo. A los 18 minutos del primer tiempo, el brasileño definió con enorme categoría desde fuera del área. El segundo llegó a los 12 de la segunda etapa, con otro remate imparable. Por respeto a su exclub, João Pedro no celebró ninguno de sus tantos, pero sin duda fue la gran figura del encuentro.
Con el marcador a su favor, el Chelsea pudo jugar con mucha más calma. Si bien ambos equipos sabían que las condiciones climáticas no permitían un juego “normal”, el resultado obligó al “Flu” a salir de su campo y modificar su plan inicial.

Fluminense compitió, pero la diferencia fue abismal
A pesar de la derrota, el equipo carioca dio la cara, demostrando la misma competitividad que había mostrado ante Borussia Dortmund e Inter. En varias ocasiones, estuvo muy cerca de hacer daño. Un VAR polémico les anuló un penal al final de la primera mitad, y Eve falló un mano a mano claro antes del 2-0. Con un poco más de contundencia, la historia del partido podría haber sido diferente.
La razón de la victoria del Chelsea no tiene mucho misterio: simplemente tienen mejores jugadores que Fluminense. Es un equipo directo, que maneja el balón con el único fin de encontrar espacios en campo rival, sin distracciones, incluso cuando ya ganaba y necesitaba conservar energía.

El Chelsea llega en gran forma a la final
La orquesta del Chelsea es dirigida por Enzo Fernández y Moisés Caicedo, quienes manejan los tiempos del partido. Delante, Pedro Neto, Cole Palmer y Christopher Nkunku aceleran el juego y hallan los espacios que esta tarde un implacable João Pedro supo aprovechar. En el segundo tiempo, la diferencia entre ambos equipos quedó más que evidente. Ni siquiera el tremendo esfuerzo del Fluminense logró acortar la distancia, y el Chelsea terminó el partido sin mayores complicaciones.
El conjunto londinense llega a la final en un excelente nivel. No tuvo que desgastar demasiadas energías, ya que dominó la pelota en la segunda mitad y no sufrió en defensa. Ahora, les espera el desafío más grande del Mundial en el último partido.

Agencias