El proto malversador del CIS no ha leído el auto del juez Puente
NotMid 04/07/2025
OPINIÓN
Han llevado tan lejos la prevaricación, han perpetrado tales delitos, han robado tanto y mienten tantísimo que el desenlace de la guerra entre la banda de Sánchez y la Justicia tiene que acabar con una de las dos partes en la cárcel: o los jueces meten a los del Peugeot o los del Peugeot, Bolaños mediante, meten a los jueces y fiscales insobornables. Y no sólo a los tres mosquepedros (Ábalos, Koldo, Cerdán) y Pedro Sánchez D’Artacán, que siempre va con ellos, sino a los máximos responsables de prevaricación continuada en la Fiscalía (Alvarone), el TC (Pumpido) y el CIS (Tezanos).
En el ámbito gubernamental, todos hacen ya la guerra por su cuenta, pero el más descarado a la hora de malversar fondos públicos es Tezanos, que, a este paso, acabará en Soto del Real, a la sombra del que, Marlaska mediante, bien podría convertirse en el Chapo Cerdán, atendido por un centón de abogados, del Salellas faltón al Teijelo de la fontanera Díez.
Tezanos, como El Abuelo Cebolleta del TBO, cuenta sus batallitas a quien no huye a tiempo, y como, amén de la gota, va perdiendo memoria, repite el argumentario monclovita caducado. Lo último ha sido atribuir a un posible montaje el encarcelamiento de Cerdán, porque hay jueces que ejem, y que ya veremos si encuentran el dinero que están buscando, pero, que, por ahora, nada. Obviamente, el protomalversador del CIS no ha leído el auto del juez Puente ni, acostumbrado a falsear cifras, ha visto los 537 millones de euros en adjudicaciones irregulares de obra pública. A lo mejor a Tezanos siete años engañándonos con nuestro dinero le parecen pocos. En todo caso, para defender a esta cáfila de ladrones hay que mirar la fecha de consumo preferente. Si Sánchez, Alegría, Montero y hasta Tenacillas han condenado, sin duda alguna, a los mosquepedros, ¿qué hace defendiéndolos? La campaña contra los jueces, desde que Sánchez avisó a Ábalos de que la UCO investigaba a Koldo, está desactivada, por tantos sobres y sobrinas.
Al margen de su pérdida de facultades intelectuales, escasas siempre, es intolerable que un tío que derrocha cuantiosísimos fondos insulte a un juez del Tribunal Supremo y a la Fiscalía Anticorrupción, achacándoles un montaje en los mismos términos que Salellas, o el propio Cerdán. Difamador, malversador y, encima, llevándole la contraria al Gobierno. Como cabeza de turco, puede denunciarlo Bolaños. Y hala, a la cárcel, mientras haya sitio.