El último encuentro tuvo lugar en agosto de 2020 en el Hotel Sofía de Barcelona, dos años después de que el club azulgrana rompiera lazos con el ex número dos arbitral
NotMid 30/06/2023
DEPORTES
Como usted no conoce la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), yo le puedo abrir las puertas”. José María Enríquez Negreira citó a Josep Maria Bartomeu en 2014 en una cafetería de Barcelona próxima a sus oficinas para trasladarle este mensaje poco después de llegar a la presidencia del Barça. Según ha podido acreditar EL MUNDO, ésta fue la primera de las tres reuniones en persona que mantuvo el ex número dos de los árbitros con el ex presidente azulgrana a lo largo de todo su mandato y que quedaron registradas en la agenda que el dirigente azulgrana tenía en el club.
Bartomeu acudió a la primera llamada de Negreira, al que hasta ese momento no había tratado, y le trasladó que ya conocía a la mayor parte de los directivos de la RFEF. No en vano, ya había formado parte de la directiva del club como vicepresidente deportivo desde 2010 y había mantenido numerosas reuniones en el órgano de gobierno del fútbol español.
El dirigente arbitral, que llevaba ya años cobrando del FC Barcelona por asesorías arbitrales que la Fiscalía considera ficticias y una mera coartada para contratarle con el objetivo de los árbitros beneficiaran al club, le replicó que se encargaría de montarle una reunión en persona con el entonces presidente del fútbol español, Ángel María Villar.
“Como soy un árbitro catalán, te puedo ayudar”, le insistió al máximo mandatario azulgrana pocas semanas después de que éste tomara posesión de su cargo el 23 de enero de 2014 tras la dimisión de Sandro Rosell por el escándalo de los contratos ficticios de la familia Neymar, desvelado por este periódico. Bartomeu no tuvo en cuenta la propuesta y la reunión con Villar en la RFEF con Negreira como intermediario nunca tuvo lugar.
SEGUNDA REUNIÓN EN 2016
Tras esta primera toma de contacto, Bartomeu, que al igual que Rosell están siendo investigados por el Juzgado de Instrucción número uno de Barcelona en el marco del ‘caso Negreira’ después de ser denunciados por la Fiscalía, volvió a mantener un reunión presencial con la familia Negreira dos años después. Fue entonces cuando el hijo de quien fuera la mano derecha de Victoriano Sánchez Arminio en el Comité Técnico de Árbitros (CTA) le emplazó a ver en persona sus oficinas.
Cabe recordar que Javier Enríquez Romero facturaba en ese momento al FC Barcelona a través de un alto cargo de la entidad, el fallecido Josep Contreras, por la realización de informes sobre los colegiados que arbitraban al primer y segundo equipo del Barça. De manera conjunta, tanto Negreira padre como su hijo percibieron directa o indirectamente del club más de 8 millones de euros.
Negreira Jr. planteó a Bartomeu que quería enseñarle los sistemas informáticos que utilizaba y la tecnología de vídeos que empleaba para sus análisis. Bartomeu acudió a la cita en compañía de varios colaboradores suyos en el club y cuando Javier Enríquez terminó su exposición, apareció por sorpresa su padre, que no había sido convocado a la reunión.
José María Enríquez Negreira explicó entonces a los presentes que había acudido para saludar personalmente al presidente del Barça y emplazó a éste a mantener una reunión privada en una de las salas de las oficinas de su hijo.
Bartomeu accedió y Negreira, ya a solas con el máximo dirigente azulgrana, se dispuso a aconsejar en qué directivos podía confiar dentro de la RFEF y en cuáles no. Aprovechó para facilitarle datos personales de unos y otros para demostrar que disponía de buena información federativa y volvió a reiterarle su predisposición a hacerle de puente con el órgano de gobierno del fútbol español. Hasta ahora Negreira Jr. se ha desvinculado por completo de las actividades de su padre, motivo por el cual la Fiscalía no lo denunció inicialmente. Sin embargo, y a petición de LaLiga, la juez ha acordado finalmente otorgarle la condición de investigado en la causa.
Este encuentro coincide con la declaración prestada por la ex secretaria de Negreira ante la Policía. Concepción Díaz aseguró haber visto a Bartomeu en las oficinas de los Negreira al menos en una ocasión aunque restó importancia al contenido del encuentro y aseguró que habían estado “hablando de fútbol”.
ÚLTIMO ENCUENTRO EN 2020
El último de los encuentros entre ambos tuvo lugar, según aseguran a este periódico fuentes próximas a los mismos, en agosto de 2020, cuando la relación de Negreira con el club ya se había extinguido por completo. De hecho, Bartomeu prescindió de los servicios del dirigente arbitral en 2018. La decisión se adoptó poco antes de que Negreira dejara de ser el número dos de los árbitros españoles y se acabó materializando meses después.
De hecho, y tal y como reveló en exclusiva EL MUNDO, Negreira remitió dos burofaxes amenazantes al presidente tras serle rechazadas sus facturas en los que le advertía de que destaparía “todas las irregularidades” de las que había tenido conocimiento de primera mano mientras estuvo contratado por el Barça y provocaría un gran escándalo si no mantenían los pagos a sus empresas. El club mantuvo su decisión de cortar con él a pesar del chantaje y no volvió a tener noticias de Negreira hasta pasados dos años.
El ya ex número dos de los árbitros emplazó entonces a Bartomeu en el Hotel Sofía de Barcelona y, de nuevo, el presidente azulgrana acudió en compañía de un colaborador suyo en el club. En aquel encuentro, un Negreira contrariado por la decisión de Bartomeu de prescindir de sus servicios después de casi dos décadas, le hizo un sorprendente planteamiento que ya le había hecho llegar por diferentes vías. “Si me vuelves a contratar, os puedo ayudar con el VAR. Conmigo os hubiera ido mejor”. Esta propuesta la llevó a cabo al finalizar la temporada 2019/2020, en la que el Real Madrid se había proclamado campeón de Liga tras un final en el que hubo polémicas decisiones del videoarbitraje que favorecieron a los blancos.
Bartomeu no sólo decidió no volver a contratar a las empresas de Negreira sino que en correos internos del club, publicados por este periódico, el máximo ejecutivo de la entidad, Óscar Grau, llegó a tildar de “caradura” al histórico dirigente arbitral tras comprobar su actitud al romper la relación mercantil con él.
Los tres encuentros registrados en la agenda de Bartomeu contrastan con la declaración de Negreira ante la Agencia Tributaria, que dijo haberse reunido con los ex presidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu “unas seis veces al año”. Por su parte, el propio Bartomeu aseveró en su declaración ante el Ministerio Público que lo había visto “alguna vez en la RFEF y algún día supongo que en el campo de fútbol”, sin entrar en más detalles. Esta afirmación fue puesta en tela de juicio por la Policía, que sostiene que existió una “relación personal” entre ambos confirmada por la ex secretaria de quien fuera vicepresidente arbitral durante el periodo en el que estuvo contratado por el FC Barcelona.
ElMundo