El Pentágono confirmó el envío del USS Gerald R. Ford para reforzar las operaciones contra el narcotráfico en el área del Comando Sur. La maniobra, ordenada por una directiva presidencial, busca “desmantelar organizaciones criminales transnacionales”
NotMid 24/10/2025
USA en español
El USS Gerald R. Ford, el mayor buque de guerra de la flota estadounidense, se une a un contingente militar reforzado en el Mar Caribe con la misión explícita de desmantelar redes de narcotráfico y “narcoterrorismo” en la región, en un momento de escalada de tensiones con el régimen de Nicolás Maduro.
WASHINGTON D.C. – El Pentágono ha elevado drásticamente la presión militar en el Caribe. Este viernes se anunció el despliegue del grupo de ataque del portaaviones USS Gerald R. Ford, el navío más grande de la Armada de Estados Unidos, para intensificar el combate al narcotráfico en América Latina.
La medida, ejecutada bajo una directiva presidencial, busca “desmantelar las Organizaciones Criminales Transnacionales (TCOs) y contrarrestar el narcoterrorismo en defensa de la Patria”, según confirmó Sean Parnell, portavoz del Pentágono, en un comunicado publicado en redes sociales.
Choque de Fuerzas y Acusaciones Cruzadas
Este despliegue se produce en medio de una intensa escalada retórica y militar con Venezuela. El gobierno de Donald Trump acusa abiertamente a Nicolás Maduro de liderar un cártel de drogas, una acusación que Caracas niega rotundamente.
La presencia reforzada, coordinada por el Comando Sur (USSOUTHCOM), tiene como objetivo “detectar, monitorear e interrumpir a actores y actividades ilícitas que ponen en riesgo la seguridad y la prosperidad del territorio nacional”, explicó Parnell.
El grupo de ataque del Ford se suma a un contingente ya robusto en el Caribe, que incluye tres buques anfibios, aviones de combate F-35B, aeronaves P-8 y drones MQ-9, operando desde una base en Puerto Rico.

La Ofensiva es Terrestre y Marítima
La dureza de la ofensiva se ha manifestado en las últimas semanas con la destrucción de al menos diez embarcaciones de presuntos narcotraficantes en el Caribe y el Pacífico, con un saldo de muertos cerca de las costas de Venezuela y Colombia.
Este mismo viernes, Pete Hegseth, el secretario de Defensa, elevó el tono de la amenaza tras confirmar el hundimiento de otra lancha operada supuestamente por la banda venezolana conocida como el Tren de Aragua.
“Si eres un narcoterrorista que trafica drogas en nuestro hemisferio, te trataremos igual que a Al Qaeda. De día o de noche, rastrearemos tus redes y nos aseguraremos de neutralizarlas,” escribió Hegseth en X.
La tensión se disparó aún más el jueves cuando el presidente Trump anunció que su administración planea expandir la campaña militar contra el narcotráfico a operaciones terrestres, aunque sin precisar la ubicación. “La tierra será lo siguiente”, declaró Trump, quien además insistió: “Vamos a matar a las personas que traen drogas a nuestro país”

Respuesta de Venezuela: Ejercicios Militares y Despliegue Costero
Desde Caracas, el régimen de Maduro respondió al desafío militar. El jueves, el dictador venezolano anunció el despliegue de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), cuerpos policiales y milicianos en un ejercicio militar de 72 horas a lo largo de las costas del país.
Vladimir Padrino López, ministro de Defensa venezolano, subrayó la importancia de la preparación estatal frente al despliegue naval estadounidense. “Ellos pueden desplegar no sé cuántas unidades afiliadas a la CIA en operaciones encubiertas… y cualquier intento fracasará”, afirmó.
El aumento de la tensión también ha estado marcado por exhibiciones de fuerza aérea. El despliegue del Gerald Ford fue precedido el jueves por el sobrevuelo de un bombardero B-1B cerca de la costa venezolana, sumándose a la presencia de bombarderos B-52 reportada la semana anterior por el comando militar estadounidense.
A nivel regional, el gobierno de Brasil, a través de su asesor de política exterior Celso Amorim, ya ha expresado su rechazo a cualquier intervención militar en Venezuela, advirtiendo que podría “fomentar el resentimiento y la radicalización política en todo el continente.”
Agencias
