NotMid 11/04/2022
USA en Español
Varios puertos de entrada entre Texas y México sufrieron grandes retrasos en los últimos días, después que el Departamento de Seguridad Pública de Texas inició inspecciones como parte del plan de seguridad fronteriza del gobernador Greg Abbott.
Los oficiales del Departamento de Seguridad Pública de Texas llevaron a cabo “inspecciones mejoradas de la seguridad de los vehículos comerciales” desde el 6 de abril en siete puertos de entrada: Brownsville, Los Indios, Pharr, Laredo, Eagle Pass, Del Río y El Paso. Texas tiene 28 puertos de entrada terrestres con México.
En el puente internacional de Pharr-Reynosa se registraron importantes retrasos, que significaron un tiempo de espera de hasta 4 horas, según los datos en tiempo real recogidos en el sitio web de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). Los puentes de Laredo y Brownsville experimentaron lo mismo. El tiempo de espera se registra desde que un vehículo pasa el peaje mexicano hasta que pasa la aduana estadounidense.
Las inspecciones del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) se están realizando en las carreteras estatales justo después de los puertos de entrada, lo que retrasa la cola hacia México.
Al final del día 9 de abril, el DPS había inspeccionado 2390 vehículos comerciales, de los cuales 552 fueron puestos fuera de servicio “por violaciones graves de seguridad que incluyen frenos defectuosos, neumáticos defectuosos y luces defectuosas”, según el teniente Christopher Olivarez, portavoz del DPS para el sur de Texas.
“También 73 conductores de vehículos comerciales fueron puestos fuera de servicio. El número total de violaciones detectadas hasta ahora es de 8244”.
El Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) no ha dicho cuánto tiempo piensa continuar con las inspecciones. México es el principal socio comercial de Texas, con 88,500 millones de dólares en bienes que fluyen en ambos sentidos a través de la frontera entre Texas y México anualmente, según Global Edge.
“Es como un duelo mexicano”, dijo Todd Bensman, miembro de seguridad nacional en el Centro de Estudios de Inmigración.
“No creo que haya ninguna duda de que esto está causando pesar y va a causar más problemas. Así que nadie sabe qué va a pasar”, dijo Bensman a The Epoch Times.
Se sugieren tres posibles resultados. Uno, Abbott cederá y detendrá las inspecciones; dos, el gobierno de Joe Biden demandará al gobierno de Texas para detener las inspecciones; o tres, México decidirá reforzar sus propias fronteras ante los inmigrantes ilegales, algo muy parecido a cuando tomó medidas en 2019 cuando Trump amenazó con imponer aranceles.
Lidiar con la inmigración ilegal es “una propuesta costosa y que requiere mucho tiempo para los mexicanos. Normalmente no les interesa hacerlo”, dijo Bensman.
“De una forma u otra, si [Texas] sigue con esto una semana más, los presidentes de estos dos países no tendrán más remedio que involucrarse”.
Comenzar a realizar las inspecciones al DPS fueron ordenadas por Abbott en una carta dirigida al director de la agencia, el coronel Steven McCraw, el 6 de abril.
“Como usted ha explicado, los cárteles que hacen contrabando ilícito y de personas a través de nuestra frontera sur no se preocupan por el estado de los vehículos que envían a Texas más de lo que se preocupan por quién tiene una sobredosis del mortal fentanilo a bordo”, escribió Abbott.
“En respuesta a esta amenaza, que se prevé que crezca en los próximos meses, por la presente ordeno al (…) DPS llevar a cabo inspecciones de seguridad mejoradas de los vehículos a medida que cruzan los puertos internacionales de entrada a Texas”.
Abbott hizo el anuncio varios días después de que la administración Biden dijera que tiene la intención de poner fin a las expulsiones por el Título 42 relacionadas con la pandemia en la zona fronteriza el 23 de mayo.
“Las políticas de fronteras abiertas de la Administración Biden han allanado el camino para que los peligrosos cárteles y las drogas mortales entren en Estados Unidos y esta crisis solo empeorará si se pone fin a las expulsiones del Título 42”, dijo el gobernador Abbott en una declaración.
Los agentes de la Patrulla Fronteriza se están preparando para procesar hasta 18,000 inmigrantes ilegales al día a lo largo de la frontera suroeste una vez que termine la aplicación del Título 42.
En los últimos seis meses, un millón de inmigrantes ilegales de 157 países han sido detenidos en la frontera sur, según el jefe de la Patrulla Fronteriza, Raúl Ortiz.
LGE