En esta entrega llevaremos el dia a dia de la investidura, todo un mes de espera, vacaciones de verano incluidas, hasta que el Rey decida a quién llamará primero para intentar la investidura de un gobierno que será muy complicada de formalizar
NotMid 29/07/2023
ESPAÑA (Elecciones Generales)
Almunia, en un grupo de Trabajo Unión Europea.Chema Moya / EFE
Lambán y Almunia agrandan la brecha en el PSOE sobre la amnistía: “No cabe en la Constitución” y “no se dan las condiciones”
Sus voces críticas se suman a los reproches que Felipe González o Alfonso Guerra han hecho a una posible Ley de Amnistía
NotMid 08/09/2023
En una semana marcada por el desvelo de la disidencia que ministros del actual Gobierno hicieron y dirigentes socialistas han hecho sobre una posible Ley de Amnistía, se genera un campo de confusión.
Mientras los miembros presentes en el Ejecutivo de Pedro Sánchez evitan reiterar sus pretéritas palabras, por otro lado emergen, de nuevo, esos barones en activo que desprecian la idea de beneficiar a Carles Puigdemont. El último ha sido el ex presidente aragonés Javier Lambán, ahora senador, que este viernes ha rechazado la legislación que el ex president propone como moneda de cambio para investir a Sánchez porque “no cabe en la Constitución”. “Abriría una vía de agua en la nave constitucional que podría llevarla directamente a pique”.
Como alto cargo también discrepante con la estrategia nacional, el castellanomanchego Emiliano García-Page declaró el pasado lunes -antes de la comparecencia en Bruselas de Puigdemont- que la creación legislativa “vulnera el principio de igualdad ante la ley” y “choca con la Constitución”. A lo que apostilló diciendo que “más que una amnistía, es una autoamnistía”. En este sentido, las voces críticas de Page y Lambán resuenan con gran amplitud pues son, y han sido, piezas políticas que han aportado muchos votos al PSOE y al propio Pedro Sánchez.
Pero uno de los testimonios que puede ahondar más en la brecha socialista es el del ex secretario general entre 1997 y 2000 y ex comisario europeo, Joaquín Almunia. En una entrevista concedida a Radio Euskadi, ha expresado su convicción de que “de momento” no hay condiciones para una amnistía “desde el punto de vista político del interés general de la sociedad”.
Almunia ha asegurado que deberá ser el Tribunal Constitucional el que decida, “en su día”, si aquello que el líder independentista reclama para apoyar la investidura de Sánchez, cabe o no en la Constitución. “No tengo conocimiento anticipado de lo que vaya a decidir el Tribunal Constitucional si el tema se le somete alguna vez. Hay opiniones a favor, hay opiniones en contra de la cabida dentro de la Constitución de una amnistía”, ha añadido.
A su juicio, ese “no es el problema político” sino si “desde el punto de vista del interés general hay condiciones, dadas las circunstancias actuales, dado lo que escuchado hace pocos días por parte de Puigdemont, desde Bruselas, hay condiciones para una amnistía desde el punto de vista político del interés general de la sociedad”. “Y yo creo que, de momento, por lo que se ve, se escucha y se oye, no hay condiciones para una amnistía”, ha indicado.
El también ex ministro socialista ha emplazado “a ver qué pasa en las próximas semanas y meses”, “pero en este momento, yo no lo veo”, ha reiterado. En su opinión, “lo importante es pensar de cara al futuro, de cara a esta legislatura que está empezando, si la situación en Cataluña va a seguir mejorando como lo ha hecho la legislatura anterior, la que acabó el pasado 24 de julio”.
“Y qué hay que hacer por parte de todos los implicados, por parte de las autoridades públicas, pero también por parte de quienes fueron protagonistas de lo que sucedió en Cataluña con las leyes de desconexión y todo aquello, si hay condiciones para la situación siga mejorando; y eso creo que es lo que nos debe importar, desde el punto de vista político a estas alturas”, ha precisado.
LAMBÁN Y ALMUNIA SE SUMAN A LOS SOCIALISTAS DISIDENTES
Las discrepancias de Lambán, Page y Almunia se suman así a las de socialistas históricos que se han pronunciado en contra de una posible texto legal que beneficie a los dirigentes del 1-O. Fue este martes en Onda Cero, justo antes de la alocuión de Puigdemont, cuando el ex presidente del Gobierno Felipe González advirtió a Ferraz sobre ello. “La Constitución no es un chicle que se adapta al deseo particular de cada cual”.
En esta línea fueron las críticas del ex ministro Ramón Jáuregui, que el miércoles declaró la propuesta del ex president como “inconstitucional”. El político vasco se opuso de este modo a cualquier “trágala” ante los nacionalistas.
Un día más tarde, el ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra declaró en la Cope que esta “no cabe en absoluto” en la Carta Magna, además de avisar sobre la gravedad que conllevaría efectuarla. “No lo hagan ustedes porque es muy grave”.
Uno de los últimos los dirigentes que se han mostrado en contra de esta maniobra legal ha sido Jesús Eguiguren, ex secretario general del PSE. El que fuera parlamentario vasco entre 1983 y 2012 ha reprobado este viernes en El Correo la amnistía que exige el líder independentista.
Feijóo advierte al Constitucional: si acepta la amnistía se convertiría en un tribunal “sospechoso”
Asegura que si el magistrado y exministro socialista Juan Carlos Campo avala ahora la amnistía, se mancharía las togas en contra de la Constitución
NotMid 07/09/2023
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado que el tribunal al que se podría recurrir una ley de amnistía, el Tribunal Constitucional, sería “sospechoso” si se “manchase las togas en contra de la Constitución” y rompe el Estado de derecho. “¿El mismo partido que votó el 155, el PSOE, ahora va a aceptar un 155 y estar intervenido por los independentistas en el Gobierno?”, ha lanzado el candidato popular en una entrevista en Espejo Público.
Lo ha dicho en el contexto de unas palabras del exministro socialista Juan Carlos Campo en 2021 en las que aceptaba los indultos a los independentistas, pero rechazaba la amnistía. Ahora, como miembro del Tribunal Constitucional, Feijóo se pregunta qué va a hacer, porque si se mancha la toga “en contra de la Constitución” el Alto Tribunal se convertiría en “sospechoso”.
De esta forma, Feijóo ha vuelto a subir el tono contra las condiciones Junts aseverando que la amnistía es inconstitucional e ilegal, así como el referéndum. También ha insistido en sus palabras de ayer en las que afirmaba que conceder una amnistía es aceptar que España es una dictadura. Este jueves ha alegado que si se hubiese concedido una amnistía después del “ataque a la integridad territorial” de 2017, hubiese sido aceptar que España era una dictadura “hace seis o siete años”.
También argumenta que si Sánchez hubiese llevado la amnistía en su programa electoral, el resultado del 23J hubiese sido “muy distinto”, con el PP como ganador pero con “más diferencia”: “Sánchez nos engaña de forma continuada y constante, monta un gobierno en base a un engaño de hace 60 días”, ha argumentado el candidato del PP, que en menos de 20 días se someterá a su sesión de investidura.
En este sentido, ha insistido en que prefiere “no ser presidente” y “proteger el constitucionalismo” a aceptar unas condiciones para lograr el apoyo de los 4 diputados que necesita para superar su investidura.
La propuesta “territorial” de Feijóo
Feijóo pidió este miércoles una reunión al PSOE para ver el “encaje” que podría tener el problema territorial en Cataluña, aunque luego su equipo matizó sus palabras restándoles importancia y alegando que sus intenciones no habían cambiado. El PP asegura que todo viene plasmado en el documento que Feijóo le entregó a Sánchez el pasado 30 de agosto durante su reunión en el Congreso, en el que enumera seis pactos de Estado, entre ellos uno territorial. Sin embargo, en dicho documento no aparece en ningún momento una mención explícita al problema territorial en Cataluña: se limita a hablar del Senado y de la financiación autonómica.
Feijóo ha detallado este jueves que su propuesta pasa por un pacto territorial que “reoriente al Senado” y basado en la “igualdad y el bienestar de los españoles”. Ha especificado que la misma consistiría en que los presidentes autonómicos “puedan ir al Senado a debatir las leyes”, y que la Cámara Alta pase de ser “de segunda lectura” a “territorial”, pero todo dentro de la Constitución, ha subrayado.
A su juicio, esto también contentaría a todos los presidentes autonómicos, también a los independentistas, a los que les ha escuchado decir que el Senado debe de “reorientarse”. “Los españoles han votado igualdad, Constitución y acuerdos, y estoy intentando buscar acuerdos”, ha fijado el líder del PP.
Con todo, ha sentenciado que habrá elecciones anticipadas si a Carles Puigdemont no le parece suficiente la amnistía o los 20.000 millones más al año de financiación autonómica para Cataluña.
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, y el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo.Ramón de la Rocha / EFE
Feijóo reclama otra reunión al PSOE para pactar “el encaje territorial de Cataluña” sin amnistía dentro de la ley
Asegura que la amnistía igualaría a España “a una dictadura” y acabaría con 500 años de nación
NotMid 06/09/2023
Alberto Núñez Feijóo insiste en que España no está condenada a “decidir entre aceptar el chantaje” de Carles Puigdemont “o nuevas elecciones”, sino que hay una tercera vía: un pacto de Estado entre PP y PSOE para mejorar el “encaje” de Cataluña en España, pero dentro de la Constitución. O sea, un nuevo “abrazo” entre españoles, dentro de la ley.
“Tenemos que buscar un encaje del problema territorial de Cataluña, pero eso será con un pacto de Estado o no será. Se hará de acuerdo con la ley o no se hará, se hará dentro de la Constitución o no se hará”, ha subrayado el líder popular en una rueda de prensa tras su reunión, en Tenerife, con el secretario general de Coalición Canaria y presidente de esa autonomía, Fernando Clavijo
Para ello, Feijóo ha reclamado “intentar otro contacto” con el PSOE, tras su reunión de la semana pasada con Pedro Sánchez, en la que ambos constataron sus diferencias insalvables. “Mi mano sigue tendida al PSOE. Ahora, si cabe, con más intensidad, para que España no caiga en la anomalía democrática de que una persona buscada por la Justicia decida el futuro” de los españoles, ha subrayado Feijóo.
Para el presidente del PP, si Sánchez cede a las exigencias maximalistas de Puigdemont, estaría en juego la democracia y hasta el propio concepto de nación española. “No puedo aceptar una España donde el principio de igualdad quiebre, una España donde la ley no se cumpla. No puedo aceptar que una parte de los españoles que han incumplido la ley tenga patente de corso para seguir delinquiendo”, ha enfatizado.
Pero no se ha quedado ahí. Feijóo cree que España ya no sería una democracia plena si se amnistía todo el procés. “No puedo aceptar que la democracia española sea igual que una dictadura y que por lo tanto quepa la amnistía por los delitos cometidos que atentan contra la democracia”, ha dicho. “No puedo aceptar que España no se mantenga como una nación después de 500 años de existencia. Y no puedo aceptar financiar al independentismo”, ha rematado.
Para el líder del partido más votado, la amnistía supondría también un fraude electoral: “Todos nos presentamos a la elecciones con el compromiso de no hacer amnistía, no iba en el programa”, ha afeado al PSOE (todavía no ha confirmado si la llevará a cabo o no). “Lo que ha cambiado es que Pedro Sánchez perdió las elecciones y está dispuesto a cualquier cosa después de haberlas perdido”, ha criticado, antes de pedirle que “recapacite” para evitar “la quiebra del estado de Derecho”.
Tras esto, Clavijo se ha mostrado partidario de un gran pacto de Estado: “Por supuesto que vamos a estar en los grandes acuerdos”.
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.JAVI MARTÍNEZ
Sánchez ve factible su investidura pese a la “petición de máximos” de Puigdemont
En Moncloa ponen el acento en que el líder independentista “está dispuesto a hablar” y ven como buena señal que dé prioridad a la amnistía y no al referéndum
NotMid 06/09/2023
En La Moncloa y en Ferraz escucharon con atención la intervención de Carles Puigdemont. Concluida ésta, se encogieron de hombros e intercambiaron gestos de complacencia. El líder de Junts y prófugo de la Justicia había puesto sus cartas sobre la mesa de la negociación pública, con un tono duro y desafiante. «Todo dentro de la normalidad», exponen fuentes conocedoras de las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez. En el complejo presidencial mantienen la misma «determinación» hoy que ayer respecto a la posibilidad y viabilidad de lograr la investidura.
Pese a que de nuevo se crucen en su camino, y en el de España, «líneas rojas» para los independentistas como la autodeterminación, la amnistía o la figura de un mediador, ven viable retener el gobierno. «Parte de posiciones de máximos, es lógico», exponen fuentes del Gobierno sobre Puigdemont. En el equipo de Sánchez prefieren poner el acento en otra vertiente: «Está dispuesto a hablar» y, creen, eso es lo importante. También que haya dado prioridad a la amnistía y no al referéndum, esto segundo un asunto sobre el que en La Moncloa rechazan ceder.
El análisis que hacen es que Puigdemont ayer estaba hablando para los suyos y enmarcan su discurso también en la competencia que mantiene con ERC. Queda una semana para la Diada y en La Moncloa asumen que estos días habrá una escalada y exaltación de la dialéctica independentista. «Nosotros a lo nuestro».
El planteamiento de Sánchez es que el acuerdo que permita su investidura «se puede, se debe y se va a alcanzar», y de ahí que ningún ministro ni cargo socialista se moje ni sea explícito cuando se le pregunta expresamente por el encaje de la amnistía en el marco constitucional. Balón para adelante, que la negociación siga sin desairar públicamente a sus potenciales socios. Pero el Gobierno ya trabaja en buscar un encaje, «fórmulas», sobre la amnistía, persiguiendo un alivio penal a los implicados en el procés.
«Las medidas que se adoptan por el Gobierno siempre están dentro del marco constitucional. Eso es lo que nos conduce y determina. Estudiamos todos los alcances con el objetivo de garantizar la convivencia en nuestra sociedad. No se puede alcanzar la convivencia fuera del marco constitucional», dejó patente ayer Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior, tras la reunión del Consejo de Ministros.
Para La Moncloa, las posibilidades antes y después de que hablara Puigdemont son las mismas. «Las cuentas son las que son», admiten desde el equipo de Sánchez, en alusión a que necesitarán el apoyo de Junts o al menos su abstención si al final consiguen atraer el voto de la diputada de Coalición Canaria -algo que no descartan en el PSOE-, que votará a favor de la de Feijóo.
El planteamiento de Sánchez es «pasar página en Cataluña, mientras que el de Puigdemont supone volver a un tablero político que recuerda al de 2017 o 2019. Otra vez exigencias de referéndum y de mediador, un asunto que causó zozobra en el Gobierno y en el PSOE hace cuatro años. De hecho, en febrero de 2019, el Ejecutivo llegó a aceptar esta exigencia de introducir un «relator», «facilitador», «mediador» o «notario», según quien definiese la figura. Los territorios estallaron y líderes como Emiliano García-Page -el único socialista que hoy presenta una mayoría absoluta- exigió la convocatoria de la Comisión Territorial para tratar el asunto.
“ATAQUE A LA CONSTITUCIÓN”
El presidente castellanomanchego, que precisamente se encontraba ayer en Bruselas, antes de escuchar a Puigdemont expresó su posición de que si éste «mantiene un ataque a la Constitución en el hecho de buscar la separación de Cataluña », lo que ocurrirá es que «va a chocar con una respuesta frontal en España, espero que de todos los partidos, también del PSOE».
En los territorios, a día de hoy, hay prudencia sobre la negociación que pueda darse con Junts y las «fórmulas» que se busque sobre la amnistía, confiando en que Sánchez cumpla su palabra de actuar dentro del marco constitucional. El líder de los socialistas madrileños, Juan Lobato, considera legítimo «hablar y el diálogo», pero «no por encima de la Constitución». «No mover ni un milímetro» de la Constitución las negociaciones. Por su parte, Juan Espadas, líder de los socialistas andaluces, apeló a la Constitución como «único marco» en el que circunscribir el diálogo.
Frente a las críticas de la oposición y la incomodidad y malestar que puede suscitar en sectores de su partido y electorado una negociación sobre la amnistía, en el PSOE se escudan en los resultados obtenidos el 23-J, donde el PSC, su federación catalana, fue la fuerza más votada con 19 diputados, sumando más que ERC (7) y Junts (7) juntos. Entienden que el electorado legitima su apuesta por la «convivencia». «Recuperar la política, con medidas valientes e incluso arriesgadas», dicen los socialistas, evocando los indultos.
«Tenemos una herramienta que es el diálogo, un marco que es la Constitución», dijo Isabel Rodríguez. «El objetivo es continuar por la senda de la convivencia»
Imagen de archivo del Tribunal Constitucional. (Europa Press)
El Constitucional admite a trámite el recurso del PSOE por los votos nulos del 23-J en Madrid
El tribunal de garantías tiene previsto resolver sobre el fondo del recurso la semana que viene
NotMid 05/09/2023
El Tribunal Constitucional (TC) ha acordado admitir a trámite el recurso que presentó el PSOE contra la decisión del Tribunal Supremo (TS) de desestimar su petición de revisar unos 30.000 votos nulos de las elecciones generales del pasado 23 de julio en la provincia de Madrid y de anular la proclamación del dirigente del PP Carlos García Adanero como diputado electo.
Según ha informado la corte de garantías este martes, la Sala Segunda (de mayoría progresista) ha adoptado la decisión por cuatro votos a favor y dos en contra (los de los magistrados Enrique Arnaldo y César Tolosa). Fuentes jurídicas han explicado a Europa Press que el Constitucional tiene previsto resolver sobre el fondo del recurso la semana que viene, por lo que el asunto será añadido próximamente al orden del día.
Los socialistas denuncian que la proclamación como diputado electo de García Adanero habría “cercenado” la posibilidad de proclamar al socialista Javier Rodríguez Palacios, número 11 en las listas de Madrid. Cabe recordar que, de conseguir un escaño más, el PSOE tendría más fácil una hipotética investidura de Pedro Sánchez porque ya no necesitaría del voto a favor de Junts, sino que le bastaría con una abstención.
Los magistrados evaluarán los argumentos del PSOE, que alegó que la negativa del Supremo había vulnerado el derecho fundamental al sufragio pasivo al “realizar una interpretación restrictiva” de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG), “respecto a la realización del escrutinio general y la posibilidad de la apertura de todos los votos nulos consignados”.
Los argumentos del PSOE
El partido aseguró también que se había vulnerado el derecho fundamental de acceso en condiciones de igualdad a los cargos públicos electivos, “al producirse una situación de hecho diferenciada entre representantes cuyo ámbito de elección es el local y aquellos cuyo ámbito de elección es provincial o mayor”.
En este sentido, la formación insistió en sus 25 folios, a los que tuvo acceso Europa Press, que “no hay en la LOREG ningún precepto que prohíba expresamente reclamar la revisión de los votos nulos que, de hecho, están en poder de la Junta Electoral en el acto de escrutinio general como parte del sobre número uno remitido por cada mesa electoral”.
En el marco de su recurso, el PSOE hizo referencia a la doctrina del propio Constitucional y recalcó que la sentencia del Supremo evita “como dice” una sentencia del TC de 2015 “conocer de la manera más exacta la verdadera voluntad de los electores manifestada en el proceso electoral”.
En este sentido, el partido afeó que el Supremo adoptara su decisión “en función únicamente del número de votos necesarios” y recordó que el Constitucional ya aceptó en 2015 que se revisara el voto nulo en Badajoz, donde los votos necesarios para alterar la composición del Parlamento era de “unos 900″ respecto a 7.118 votos nulos, frente a los 1.200 necesarios en Madrid respecto a unos 30.000 votos nulos.
Al hilo, el PSOE incidió en que “el reducido voto necesario para que el PSOE pueda obtener su 11º diputado por la circunscripción de Madrid respecto al voto nulo declarado en las actas de las mesas electorales impide considerar que se esté haciendo un ejercicio abusivo del derecho”.
La formación acudió ante el tribunal de garantías después de que el Supremo considerara que “la mera diferencia numérica en los resultados que se aducen en este caso (1.200 votos) no es base suficiente para la revisión”. Los magistrados de la Sala de Vacaciones consideraron que no se habían aportado “datos aritméticos o cálculos estadísticos solventes que permitan verificar, tan siquiera hipotéticamente, la relevancia de la revisión de voto en el resultado final y en la atribución del escaño controvertido”.
El Supremo, en contra del criterio de la Fiscalía, dijo que no cabía aceptar el argumento esgrimido por el PSOE y recalcó que no podía aceptarse que en este caso “el mero ajuste del resultado” exigiese la “fiscalización o comprobación de la actuación de cada Mesa en el cometido de sus funciones”
Catalan separatist leader Carles Puigdemont speaks during a press conference in Brussels, Belgium September 5, 2023. REUTERS/Yves Herman
Carles Puigdemont avisa que “hoy no hay condiciones para un acuerdo” y exige amnistía y autodeterminación
El líder de Junts ha sido claro desde Bruselas: es el momento de un “acuerdo histórico” que “no es contrario a la Constitución”. Pide “voluntad política” para una negociación que todavía no ha empezado
NotMid 05/09/2023
El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha hablado con total claridad este martes para fijar las condiciones indispensables para que Junts apoye la investidura de un presidente en España (se presupone que la de Pedro Sánchez): amnistía para “abandonar la vía judicial contra el independentismo” y derecho de autodeterminación. Puigdemont ha comparecido desde Bruselas y asegura que es el momento para llegar a “un acuerdo histórico” que no es “contrario a la Constitución”. Se trata solo, según Puigdemont, de “tener voluntad política”. El líder de Junts ha aclarado además que no hay ninguna negociación abierta, pero que la habrá en los próximos días.
En una sala abarrotada, con miembros de la CUP y Esquerra presentes, Puigdemont inició su conferencia solicitando “olvidar la confrontación” y denunciando los “ataques” que el independentismo ha sufrido tanto por parte del PSOE como del PP. Enumeró entonces un primer agravio: dejar a Xavier Trias fuera de la Alcaldía de Barcelona a pesar de haber ganado las elecciones municipales el pasado mes de mayo. Junts es, según Puigdemont, una formación a la que se le ha “arrinconado, menospreciado y atacado sin descanso por parte de los dos grandes partidos españoles”.
El expresidente catalán, prófugo de la Justicia española, reconoció, no obstante, que está dispuesto a olvidar que “Cataluña ha sido tradicionalmente una nación atacada” y empezar una nueva etapa porque los siete diputados de Junts obtenidos tras las generales de julio son indispensables para la gobernabilidad de España. “O hay elecciones o un pacto con nosotros”, matizó, a no ser, señaló Puigdemont, que algunos diputados socialistas abandonen la disciplina del PSOE y apoyen a Feijóo, una posibilidad que también deslizó el líder catalán.
Lo que está claro, aseguró Puigdemont, es que “hoy en día no se dan las condiciones” para que Junts se siente a negociar con PSOE y PP. Y eso a pesar de los gestos que se han ido produciendo por parte del Ejecutivo de coalición en funciones en los últimos días para allanar el camino a esa negociación: que Junts y Esquerra tengan grupo propio en el Congreso de los Diputados; la solicitud por parte del Gobierno español al Consejo de la Unión Europea para que se reforme el reglamento lingüístico y que el catalán (junto al euskera y el gallego) se convierta en lengua oficial y de trabajo en el ámbito comunitario; y la reunión que se produjo este lunes entre Yolanda Díaz y Carles Puigdemont, legitimando al líder catalán como interlocutor válido.
Reconocimiento de la legitimidad democrática del independentismo y los independentistas. Abandono de “la vía judicial”. Una amnistía inmediata que cubra todo lo ocurrido a nivel político desde 2014 en la comunidad autónoma y la creación de un mecanismo de mediación y supervisión, probablemente internacional, que sirva para obligar a sus interlocutores a mantener sus promesas, incluyendo la de un futuro referéndum legal sobre la autodeterminación Esas son las exigencias previas, las “condiciones que no existen y se deben crear”, para que Junts per Catalunya se siente a la mesa a negociar la investidura de los aspirantes a ser los próximos presidentes de España.
Así lo ha explicado este martes el eurodiputado Carles Puigdemont desde Bruselas en una esperada conferencia en un hotel a dos pasos de las instituciones europeas y menos de 24 horas después de haberse reunido con la vicepresidenta segunda en funciones del Gobierno, Yolanda Díaz. Hacía años que una comparecencia del ex presidente catalán no generaba tantas expectativas. La sala del acto no era muy grande, y estaba llena de sus simpatizantes, pero la presencia de medios de comunicación, algunos de ellos internacionales, mostraba la atención con la que toda España mira cada una de sus palabras ahora.
Yolanda Díaz se reúne con Puigdemont en Bruselas en busca de “una relación estable” para “explorar soluciones democráticas al conflicto político”
La vicepresidenta, que avisó anoche a Moncloa “a hechos consumados”, se ha reunido con el prófugo en el Parlamento Europeo
NotMid 04/09/2023
Yolanda Díaz ha viajado hasta Bruselas para reunirse por sorpresa este lunes con Carles Puigdemont, prófugo de la Justicia, en un polémico encuentro con el líder de Junts del que ya se ha desmarcado el PSOE. “Va en nombre de Sumar y no representa al PSOE”, dicen fuentes de Moncloa.
La visita de la vicepresidenta segunda, adelantada por El Debate, es la primera oficial que hace un miembro del Gobierno de España desde que Puigdemont huyera del país para eludir la acción de la Justicia. La reunión no ha celebrado en su casa de Waterloo, sino en el Parlamento Europeo, donde sigue siendo eurodiputado. El encuentro ha arrancado sin declaraciones previas de sus participantes.
La reunión ha comenzado a las 12.00 horas en una de las estancias de la Eurocámara, donde han posado juntos ante los medios gráficos. Con Díaz está también en nombre de Sumar Jaume Asens, la persona elegida por la coalición para dialogar con el independentismo (Junts y ERC) para negociar la investidura, y por parte del equipo del ex presidente catalán está el eurodiputado Antoni Comín, otro de los consellers huidos.
“DESBLOQUEAR EL CONFLICTO POLÍTICO”
El encuentro se ha prolongado durante tres horas. Fuentes de ambos lados ya anticipaban que sería “largo”. Al final de la charla, y de nuevo sin declaraciones a los medios, Díaz se ha limitado a mostrarse “optimista” y ha aventurado que habrá “más encuentros”. Por lo pronto, la vicepresidenta regresará el jueves a la capital comunitaria, en el marco de la visita de varios ministros al Parlamento Europeo para dar cuenta de la marcha y agenda de la Presidencia española de la UE.
Al término de la reunión, Sumar y Junts han destacado en un comunicado conjunto que la cita ha discurrido con “normalidad” y en un “tono cordial”. “La reunión ha sido fructífera y permite establecer una relación normalizada y estable entre ambas formaciones políticas”.
Desde Sumar dicen tener una “profunda convicción” de que la política “debe hacerse desde el diálogo y los principios democráticos. “En este sentido, estamos de acuerdo en explorar todas las soluciones democráticas para desbloquear el conflicto político”, afirman. Palabras que se expresan en un momento en el que la amnistía y algún tipo de referéndum están en boca de los actores políticos implicados.
“Compartimos la profunda convicción de que lo problemas políticos deben volver a los cauces políticos, para encontrar soluciones basadas en el diálogo. La democracia consiste en el diálogo entre posiciones diferentes”, insisten desde la formación de la vicepresidenta segunda.
En Bruselas, Díaz he evitado dibujar cualquier detalle en torno a la ley de amnistía o el referéndum de independencia. Todo ello se conocerá el martes. En el marco de la apertura de las jornadas interparlamentarias anuales de Junts per Catalunya, Puigdemont ha convocado una rueda de prensa en la que desgranará sus condiciones, calendario y líneas rojas de Junts para dar su sí a una hipotética investidura de Sánchez. “El actual contexto político sitúa a la formación en el centro del escenario político”, asegura desde un comunicado. Bruselas se convierte así de nuevo y por accidente en el centro neurálgico de la política española.
Hace un mes, PSOE y Sumar dieron su primer guiño a los independentistas trasladando de forma oficial a la UE la petición para que el gallego, el euskera y el catalán se conviertan en lenguas oficiales del bloque comunitario. El debate se abordará por primera vez el 19 de septiembre en el Consejo de Asuntos Generales, un caramelo envenenado que tiene pocos visos de prosperar en el corto plazo.
“NO HAY NADA ACORDADO”
Es la primera vez que un miembro del Ejecutivo se ve con el ex presidente catalán dando, de forma pública, el pistoletazo de salida a las complejas negociaciones hacia la formación de Gobierno. La jornada deja ya una reunión y una fotografía inéditas con el prófugo de la Justicia, exiliado en Bruselas desde el referéndum ilegal de 2017.
Fuentes socialistas del Gobierno se han apresurado a desmarcarse del viaje y han recalcado que Díaz no se reúne con Puigdemont en nombre del Ejecutivo, sino en el de Sumar y que en ningún caso lo que pueda abordar o proponer ahí representa al PSOE.
Estas fuentes explican que Sumar avisó ayer a última hora de la noche “a hechos consumados” que se iba a producir este encuentro Díaz-Puigdemont. “No hay nada acordado”, destacan. “No tenemos nada que ver con eso”.
En este sentido, desde estas fuentes socialistas del Gobierno se reafirma que ellos están siguiendo su propia “vía” de diálogo con los partidos independentistas para encarar la investidura.
Sumar, por su parte, tiene abiertos sus propios canales de comunicación con Junts y ERC, en los que Asens está teniendo un papel protagonista. De hecho, además de dialogar al “máximo nivel” con dirigentes de las dos formaciones catalanas, el ex líder de los comunes en el Congreso está coordinando un equipo de veinte juristas para estudiar la fórmula legal con la que encajar una “amnistía” para todas las personas que se encuentran en causas relacionadas con el 1-O y el desafío independentista. Incluidos los huidos.
Sumar reconoce que es un trabajo “complejo” porque existen situaciones de lo más diversas, no obstante, lleva semanas defendiendo que es perfectamente “constitucional” hacer esa amnistía y que lo permite la Ley de Enjuiciamiento Criminal. En todo caso, todavía no han concretado detalles, más allá de deslizar que podría tramitarse como una proposición de ley en el Congreso. De todo esto y los votos de Junts en la investidura de Pedro Sánchez se hablará, entre otros temas, en ese encuentro.
SUMAR DEFIENDE SU “TRANSPARENCIA”
Desde Sumar se defienden de las críticas por ir a Bruselas asegurando que ellos son actúan con “transparencia” y lo cuentan. “Somos demócratas, y por ello respetamos a la ciudadanía y desarrollamos las conversaciones con total transparencia, así como los interlocutores de cada formación”, señalan fuentes oficiales.
En este sentido, reconocen que este viaje es “un paso más” en una “apuesta decidida por abrir un nuevo tiempo de soluciones basadas en el diálogo y la democracia”. “Lo dijimos desde que nacimos, durante toda la campaña y lo reafirmamos ahora: somos quienes estamos pensando en soluciones para la próxima década. Por eso ésta tiene que ser una legislatura de avance social y plurinacional. Y nosotros estamos manos a la obra”, dicen. Inciden así en que en España “el avance social y el territorial siempre han ido de la mano” y que en esta legislatura “así debe volver a ser”.
Sobre la cita de este lunes, el portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, ha dicho que es tiempo de “abrir una nueva etapa de diálogo” y que lo hacen negociando “con transparencia y respeto a la ciudadanía”. De igual modo, la portavoz de en el Congreso, Marta Lois, la ha justificado en que desde la coalición “siempre” se ha apostado por “el diálogo, el acuerdo y la democracia como vías para solucionar los problemas políticos”. “Esta legislatura debemos avanzar en la agenda social y en la agenda territorial”, ha destacado en un mensaje en X, antes Twitter.
En esa red social también se ha pronunciado el diputado de Sumar Íñigo Errejón: “Orgullosos de este paso decidido y responsable para abrir la puerta a una nueva época de soluciones. Que los conflictos políticos vuelvan a los cauces exclusivos de la política, el diálogo y la democracia”.
Desde el PP han arremetido contra la reunión. La secretaria general, Cuca Gamarra, ha puesto el foco en que una persona tan destacada del Gobierno vaya a reunirse con un huido de la Justicia. “Una vicepresidenta lo es 24 horas al día y 7 días a la semana, más cuando va a negociar su propio futuro en el Gobierno”, ha dicho. Por eso ha ironizado con la labor en la que ejerce ese rol. “¿Es vicepresidenta a tiempo parcial? ¿Fija discontinua, quizás?”. Gamarra ha pedido que “dejen de tomar el pelo a los españoles” y se ha preguntado “a qué están dispuestos para seguir en el poder”.
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha acusado a su vez a la izquierda de estar “rindiendo al Gobierno de España ante un auténtico criminal” al estar “sentado con un prófugo de la Justicia”. “Eso es algo de extrema gravedad. Eso no pasa en ningún lugar del mundo o al menos en ningún lugar del mundo que sea serio, en el que se respete la legalidad y la dignidad de sus ciudadanos”, ha subrayado.
“UN ANTES Y UN DESPUÉS”
“Muchos hemos combatido políticamente en Europa las noticias falsas, el uso ilegal de recursos públicos y los ataques a la democracia de Puigdemont. La foto de la vicepresidenta del gobierno con un prófugo de la justicia es un antes y un después en la imagen de España en la UE. Vergüenza”, ha reaccionado a través de X (antiguo Twitter) Adrián Vázquez, portavoz de Ciudadanos en el Parlamento Europeo.
El PP carga contra la reunión Díaz-Puigdemont: “Rechaza reunirse con Feijóo en Madrid, pero está dispuesta a reunirse con un prófugo en Bruselas”
Borja Sémper asegura que Díaz va a Bruselas en condición de vicepresidenta y no de líder de Sumar, lo que califica de “escándalo”
NotMid 04/09/2023
El portavoz del Partido Popular, Borja Sémper, ha cargado este lunes contra la reunión de la vicepresidenta segunda en funciones y líder de Sumar, Yolanda Díaz, y Carles Puigdemont, en Bruselas: “Díaz rechaza reunirse con Feijóo en Madrid, pero sí está dispuesta a reunirse con un prófugo de la Justicia en Bruselas”, ha señalado tras la reunión de la Comité Ejecutivo del PP en la sede de Génova.
Sémper ha asegurado que la reunión de Díaz con el líder de Junts no es a título particular, sino como parte del Gobierno, porque no puede ser dirigente de Sumar “los días pares” y “vicepresidenta los impares”. Ha dicho que esta situación es dolorosa, además de un “escándalo”, porque es malo para España que se hable de “amnistías a la carta” y es preocupante que se hable con “naturalidad y normalidad” de que un Gobierno se desplace a Bruselas para hablar con un “prófugo”. “No es normal en ninguno de los países de nuestro entorno, solo va camino de convertirse en normal porque a Sánchez le interesa”, ha aseverado.
En el caso del acercamiento del PP a Junts con su reunión en el marco de la investidura, ha asegurado que ellos les van a decir cuáles son los proyectos de Feijóo para España, lo que es diferente a lo que va a hacer Díaz, que va a hablar de unos intereses que, en el caso de ser resueltos, allanarán el camino de la investidura de Pedro Sánchez. “Es es inédito, es un escándalo”, ha señalado.
También ha recordado que, para evitar esto, Feijóo ofreció a Sánchez en su reunión de la semana pasada un pacto para que les permitiese gobernar dos años con la condición de convocar elecciones transcurrido ese tiempo, lo que evitaría a los independentistas: “Era un acuerdo político sustentado en la igualdad y que no tuviera como prioridad los intereses particulares”, ha remarcado el portavoz popular.
Alberto Núñez Feijóo preside la reunión del Comité Ejecutivo del PP en Génova (Fotos: David Mudarra)
Con el rechazo de Sánchez a esta propuesta, el PP dice que constata que Sánchez prefiere conformar un gobierno con un prófugo de la Justicia, que iniciar una legislatura sustentada en grandes acuerdos de reforma. “Existen intereses particulares de Puigdemont y de Sánchez, y de eso están hablando”, ha fijado.
Sémper: “Feijóo podría anunciar mañana que es presidente del Gobierno”
Según el portavoz del PP, Feijóo podría anunciar “mañana mismo” que es presidente del Gobierno: “Podría anunciar que tiene los apoyos suficientes para ser presidente. Ustedes (a los periodistas) saben qué es lo que tendría que hacer Feijóo, que es lo que va a hacer Pedro Sánchez”.
La fórmula que, según el PP, le otorgaría sin mayores dificultades la presidencia del Gobierno al PP es un pacto con Junts que incluyese la amnistía y el referéndum de autodeterminación. “Es lo que va a hacer Pedro Sánchez, pero Feijóo no está dispuesto a ser presidente a cualquier precio”, ha remarcado.
En este sentido, Sémper ha reconocido que la investidura de Feijóo es “hoy igual de difícil que ayer”, pero su responsabilidad es llevarla a cabo para evitar un gobierno “Frankestein reeditado”. “La alternativa sería quedarnos de brazos cruzados en casa”, ha señalado.
Sánchez frena la negociación con Díaz y da prioridad a los soberanistas: “Hay que llegar antes a un pacto con ellos”
Sumar busca acelerar la negociación para sellar con el PSOE un acuerdo programático que marque la hoja de ruta de la coalición
NotMid 03/09/2023
El gran haz de luz público apunta a Alberto Núñez Feijóo, situándolo como protagonista en el escenario tras ser propuesto por el Rey para la investidura. Los focos, sin embargo, se dirigen hacia Pedro Sánchez y los partidos independentistas catalanes y vascos, que avanzan en una negociación que pretendían sin fulgor. Pero en las penumbras también hay movimientos. Donde no llegan los destellos también se mueve el tablero político. Y hay quien quiere girar la lámpara para aportar claridad o, al menos que se les vea. Hace semanas que desde Sumar denuncian pasividad y «falta de ambición» en el PSOE de cara a negociar el programa de gobierno de una nueva coalición. Los socialistas se cobijan en las sombras y consensuan: «Yolanda busca foco, busca un perfil propio. Pero no es creíble».
La ventanilla de Sánchez recibe estos días las peticiones de hasta siete fuerzas -Sumar, Bildu, ERC, Junts, PNV, BNG y CC-, que presentan sus exigencias para que el candidato socialista cuente con sus votos, necesarios para que pueda gobernar. El partido que pilota Díaz quiere acelerar la negociación para sellar con Sánchez un acuerdo programático que marque la hoja de ruta de la coalición. Ser los primeros. Pero sus tiempos, prisas y prioridades no coinciden con las del PSOE, por lo que Díaz y su equipo buscan ejercer presión desde la esfera pública.
Tanto en el PSOE como en el equipo de Sánchez echan el freno de mano, ralentizan los tiempos porque, entienden, lo prioritario no es ahora un pacto con Sumar, que no ven problemático, sino encauzar el diálogo con los nacionalistas, sobre todo con Junts, que tiene la llave maestra. «Nosotros estamos concentrados en lo difícil», dicen fuentes socialistas conocedoras de las conversaciones. «No habrá problema con Sumar, llevamos cuatro años gobernando». Hay un sentir general en la sala de mandos del PSOE, y de La Moncloa: «El acuerdo con Sumar no es prioritario, tendremos que llegar antes a un acuerdo con los demás, con Díaz ya sabemos que vamos a llegar a un acuerdo».
La propia vicepresidenta aireó estas diferencias hace unos días en el marco de un diálogo en Lyon con el fundador de La Francia Insumisa (LFI), Jean-Luc Mélenchon. «Hay gente en el PSOE que piensa que ya hemos protegido demasiado a la ciudadanía», fue su dardo. «Hemos notando una cierta falta de ambición del lado del PSOE. Queremos que se siente a negociar en serio. El PSOE tiene que entender que necesitamos ir a un acuerdo de Gobierno muy ambicioso, concreto y detallado», ha expuesto Ernest Urtasun, portavoz de Sumar.
‘CASO RUBIALES’
Todas las personas consultadas por este diario señalan que la relación entre ambas formaciones es buena. También con Díaz. Pero en el PSOE hay malestar con la vicepresidenta segunda por sus críticas y presión de las últimas semanas, tanto sobre la negociación con los independientes, la negociación de un programa de gobierno o el caso Rubiales, donde incluso el ministro Miquel Iceta conversó con ella para tratar de que rebajara los ataques. Algo que no sucedió. En el Gobierno y el PSOE hay quienes contraponen, incluso, su actitud con la de Irene Montero, más comprensiva y cerrando filas, dicen, con el Ejecutivo del que ambas son parte.
Este viernes, incluso, Iceta en su comparecencia tras el duro revés que sufrió el Gobierno después de la decisión del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) que truncaba la estrategia y propósito del Ejecutivo de querer suspender, ahora sí, a Luis Rubiales, mandó un recado entre líneas a Díaz -que presionó para que se suspendiera a Rubiales sin recurrir al TAD-: «Hay leyes y procedimientos que hay que respetar en todo momento. Incluso algunos decían: ‘cómo que el Gobierno no hace según qué cosas’. Probablemente a la luz de la decisión del TAD algunos entiendan mejor el por qué el Gobierno no hace determinadas cosas. No lo hace porque las leyes no le habilitan para ello». Una prueba más de que la actitud de Díaz ha generado enfado y malestar entre los socialistas.
«Somos conscientes de que ella intenta marcar perfil y distancia en algunos temas, pero los que ha elegido no resultan creíbles. Evidentemente ella va a estar en el Gobierno, así que por mucho que quiera marcar perfil propio lo tiene difícil», razonan altos cargos socialistas. Esa presión que intentan trasladar desde Sumar, en el PSOE se la sacuden, lanzando una advertencia: «Con su puesta en escena puede conseguir el efecto contrario, le puede pasar como a Podemos, que la gente acabe pensando que no tiene ninguna credibilidad».
APUESTA “AMBICIOSA”
No obstante, si bien no están en el foco, los contactos entre el PSOE y Sumar sí están en marcha. «Hemos avanzado. No mucho, pero algo», reconocen fuentes conocedoras de los contactos. Desde la formación de Díaz trasladaron hace semanas a la de Sánchez un documento con sus propuestas y pretensiones. Y aquí es donde difieren los planteamientos. Desde Sumar quieren una apuesta «ambiciosa», «no queremos un Gobierno con pocos compromisos concretos».
En cambio, desde el PSOE admiten que, de formar gobierno, la legislatura será muy complicada. «Las mayorías son distintas», advierten, asumiendo que en el Congreso «no hay una mayoría progresista». Así que lejos de plantear una importante carga legislativa, como sucedió en la legislatura pasada, plantean ir piano piano. Están convencidos de que la diabólica aritmética parlamentaria, donde muchas iniciativas puedan estar al albur del prófugo Carles Puigdemont, impedirá que sea un mandato prolífico y que habrá que ir a lo necesario.
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante el acto en el municipio madrileño de Collado Villalba, con el que arranca el curso político madrileño (EFE/Juan Carlos Hidalgo)
Feijóo asume su derrota con el tope de 172 apoyos tras reducir a un trámite los contactos con Junts y asimilar el ‘no’ del PNV
El líder del PP dice que llegará a la presidencia “con dignidad”, aunque eso le cueste recibir el “no” a su investidura dentro de un mes: “Os puedo asegurar que ese ‘no’ se recibe con absoluta dignidad, confianza y determinación”
NotMid 01/09/2023
Una cosa es dialogar y otra cosa es acordar. Así es como el PP reduce sus contactos con Junts a un mero trámite, que sumado al rechazo firme del PNV, se traduce en unas posibilidades nulas de que Feijóo salga investido presidente del Gobierno a finales de este mes. De esta forma, el PP acepta su destino: unos 172 apoyos insuficientes para que la investidura de su líder salga adelante. “Gobernar implica renunciar a poner la nación al servicio de una persona, eso es lo que ofrecemos a los españoles y, aunque eso nos cueste recibir un ‘no’, os puedo asegurar que ese ‘no’ se recibe con absoluta dignidad, confianza y determinación”, presagió Feijóo este jueves en un acto del partido presidido por Isabel Díaz Ayuso, el PP de Madrid.
“En política lo importante no es el puesto que se tenga, sino lo que defiendes, lo que valores. No es ser presidente del Gobierno después de perder, sino después de ganar, servir a tu país en el lugar que te toque, sea o no razonable. Eso es lo importante, lo importante es defender España”, remarcó Feijóo en su discurso.
Hace escasos días, el PP dio un volantazo a su estrategia política de cara a la investidura con el fin de no quemar todos los cartuchos cuando aún quedaba más de un mes para la sesión en el Congreso. Dirigentes del partido aseguraron que la tradición y la legalidad de la formación de Carles Puigdemont no estaban en duda, por lo que hablarían con ellos dentro del marco constitucional. Esto no gustó a todos los sectores del partido, de hecho, provocó un malestar que el PP catalán hizo público. El presidente del partido autonómico, Alejandro Fernández, dijo abiertamente que Junts era su rival y rechazó el diálogo con la formación. Una posición a la que, desde el principio, Génova le restó importancia y lo redujo a una opinión de tantas.
Y es que no le conviene al PP tirar mucho de ese hilo y, de hecho, ya ha dejado de hacerlo. Ahora dicen que no se plegarán a los privilegios de unos pocos a costa de los restantes y, en ese sentido, Feijóo admite que es probable que esto le arrebate la presidencia, aunque lo cierto es que nunca hubo indicios de que el PP rozase esos 4 apoyos necesarios para llegar a los 176 de la mayoría absoluta. “Hay líneas rojas, y a los que están fuera de la Constitución los vamos a escuchar, pero evidentemente los acuerdos serán imposibles porque pensamos de forma distinta”, admitió este jueves el coordinador general, Elías Bendodo.
Pero el relato es importante, y el del PP ya no va dirigido al 26 y 27 de septiembre, sino a lo que pasará a partir de ese momento. La dignidad, la igualdad entre los españoles y las “prioridades de las familias”, son el nuevo caballo de batalla de Feijóo en la siguiente pantalla a la investidura: la oposición o la repetición electoral. Por eso, no quiere adquirir “deudas” en estos momentos, sino centrarse en los 8 millones de españoles que le han votado y en el resto de ciudadanos que comparten “los valores constitucionales”.
“No vamos a llegar (a la presidencia) por atajos a costa de la igualdad de los españoles, sino a través de principios que compartimos la mayoría de los españoles”, sentenció Feijóo. También hizo alusión a los territorios, asegurando que defenderá los intereses de los madrileños, de los gallegos, de los andaluces, de los vascos o de los catalanes, que quieren “progresar y no romper” y que quieren que se les tenga en consideración a todos y “no a los independentistas”. De esta forma, desechó cualquier posibilidad de pactar con los partidos nacionalistas e independentistas, que en el caso de sentarse con el PP para negociar su investidura, la lógica dice que pondrían sobre la mesa sus intereses territoriales.
Así, el PP constata que los acuerdos con Junts son “imposibles” y, aunque se sienten con ellos, serán rechazados si el planteamiento es el esperado. “La igualdad es la bandera del PP ahora y siempre”, fijó el presidente del partido.
El PP aprovecha el ‘no’ a su propuesta para cargar contra Sánchez
Feijóo también ha aprovechado el rechazo de Pedro Sánchez a su propuesta de gobernar dos años con el compromiso de convocar elecciones pasado ese tiempo. De hecho, el líder del PP ha afirmado que el PSOE ha dejado de ser un partido de Estado, y ha criticado que no asimile que los que han perdido las elecciones son ellos y no el PP.
Con ese rechazo, y tras haber asimilado que no cuenta con el apoyo ni del PNV ni de Junts a su investidura, Feijóo le da una vuelta a su estrategia y utiliza esto como arma arrojadiza. Critica que Sánchez pretenda que el 94% de los españoles dependan de un 6% de independentistas, por lo que la “misión” y la “responsabilidad” del PP será exponer una alternativa al “bloque” y al “desgobierno de la desigualdad”. De cara al futuro, advierte: “Cuando el gobierno es débil, los independentistas son más fuertes que nunca” y, ante ello, hay una alternativa al “chantaje” porque “resistir no es gobernar”
Carles Puigdemont durante el homenaje al músico Pau Casals. Imagen de archivo. (Glòria Sánchez – Europa Press)
Puigdemont niega contactos para negociar la amnistía y anunciará el martes sus exigencias
El expresident de la Generalitat niega que estén activas las negociaciones aunque admite “contactos”
NotMid 31/08/2023
Carles Puigdemont, a través de un mensaje en Twitter, ha negado que esté negociando con el PSOE la amnistía y ha insistido en que Junts, por el momento, “no ha presentado ningún proyecto de amnistía” a ningún partido político. Es más, ha especificado que “no hay ninguna negociación en marcha con nadie”, sin despejar la incógnista sobre si estaría dispuesto a sentarse con Alberto Núñez Feijóo.
Lo cierto es que el expresident de la Generalitat sí confirma que existen conversaciones entre diferentes fuerzas, “como es lógico”, puntualiza. Al mismo tiempo, evita especificar con quién se han registrado esos primeros contactos, aunque sí critica el cambio de estrategia de los partidos con respecto a la anterior legislatura: “Junts per Catalunya vivía sin opciones de participar en ninguna negociación por decisión de todos los actores políticos que ahora piden conversar”, ha escrito por X.
Además, ha anunciado que presentará el próximo martes, día 5 de septiembre, sus demandas para comenzar a negociar un posible apoyo a una futura investidura: “A las 11h, hablaré en la conferencia inaugural de la jornada interparlamentaria que hemos convocado en Bruselas para coordinar las acciones a llevar a cabo en el último tramo de la presidencia española del Consejo de la UE”, acaba el mensaje.
En clara referencia a su electorado y ante la posibilidad de producirse una foto con los populares, Puigdemont se ha lanzado a explicar la diferencia entre el diálogo y la negociación: “Demasiado tiempo se ha querido utilizar el concepto “diálogo” como sinónimo del de “negociación”, ha querido matizar. “El diálogo es previo a toda negociación; puede servir para fijar el marco en que ésta puede discurrir, o puede servir para comprobar que no existe margen de negociación”, ha concluido sobre este asunto.
La ministra portavoz en funciones, Isabel Rodríguez, durante una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. (EFE/Juan Carlos Hidalgo)
El Gobierno admite que se abre a negociar la amnistía: “Contemplamos todos los escenarios que quepan en el marco de la Constitución”
El PSOE ya habla con todos los grupos del Congreso para reformar el reglamento y permitir el uso de las lenguas cooficiales en la Cámara Baja
NotMid 31/08/2023
El Gobierno en funciones ya no solo no descarta la negociación sobre la amnistía de cara a una posible investidura de Pedro Sánchez, sino que admite que este punto “se contempla dentro de todos los escenarios que quepan en el marco de la Constitución”, tal como ha señalado la ministra portavoz en funciones, Isabel Rodríguez.
En una entrevista en Al Rojo Vivo, la dirigente socialista ha insistido en que, “cuando a Sánchez le toque ser el candidato a la investidura tras la investidura fallida de Feijóo”, su partido trabajará por “avanzar para conformar una mayoría de progreso” a través de “la herramienta del diálogo”.
Rodríguez ha hecho estas declaraciones después de que Carles Puigdemont, a través de un mensaje en Twitter, negara que esté negociando con el PSOE la amnistía. De esta manera, la también ministra de Política Territorial en funciones ha recordado que su partido “ha tenido la necesidad de hablar permanentemente con todos los grupos en la anterior legislatura y no hemos dejado de hablar con todos los grupos políticos”.
Y, de cara a la investidura, ha explicado que “formalmente no podemos tener esos encuentros porque es el turno de otro candidato”, en referencia a la investidura de Alberto Núñez Feijóo. El presidente se dirigió a todos los españoles y expresó algo que es lo ha ido haciendo. “Estamos respetando los tiempos”, ha añadido para después mandar “un mensaje de tranquilidad” a todos los españoles en relación al devenir de las conversaciones con las fuerzas independentistas y nacionalistas para reeditar el Gobierno de coalición.
“El PSOE es el partido que mejor ha trabajado por la unidad y la cohesión de los españoles, que ha entendido la pluralidad del España y ha devuelto la convivencia a Cataluña, y con esos avales nos presentamos a las elecciones”, ha puesto en valor para recalcar que estas políticas fueron avaladas por los ciudadanos catalanes en los procesos electorales del 28 de mayo y del 23 de julio, ya que el PSC fue la fuerza más votada.
La autodeterminación, fuera de la Constitución
En cuanto a la autodeterminación, Rodríguez también ha puesto el marco de la Constitución como línea roja a sabiendas de que este elemento no figura en la Carta Magna. De hecho, en una entrevista previa en Telecinco, ha sido tajante al reflejar que un referéndum en Cataluña no está sobre la mesa porque “no está contemplado en la Constitución española”
Por otro lado, el ministro de la Presidencia en funciones, Félix Bolaños, también ha respondido a las palabras del líder de Junts sobre la ausencia de una propuesta concreta en torno a la amnistía: “Esa es nuestra política y siempre va a ser (…) Conocen la fórmula, somos discretos y cuando llegan los acuerdos se hacen públicos y los explicamos”, ha remarcado el ministro sobre las palabras de Puigdemont.
A su vez, Bolaños ha insistido en la “discreción” y ha confirmado que el PSOE habla con “todos” los grupos parlamentarios del Congreso, además de ERC, para reformar el reglamento y permitir el uso de las lenguas cooficiales en la Cámara Baja, tal como anunció la presidenta de la Cámara Baja, Francina Armengol.”Es una reforma que atañe a todos los grupos parlamentarios y por lo tanto se está trabajando con todos, no solo con un grupo concreto”, ha apostillado.
El PP da por perdido a Sánchez: “Han tenido que elegir entre dignidad o Puigdemont y optaron por lo segundo”
Y Ferraz acusa: “Hubiesen aceptado repartirse el Gobierno”
NotMid 31/08/2023
Una sensación de profunda decepción se extendió este miércoles en la cúpula del PP tras el rechazo del PSOE al «pacto de centralidad» que Alberto Núñez había ofrecido a Pedro Sánchez para evitar que la gobernabilidad de España esté en manos de los partidos independentistas. «Han tenido que elegir entre dignidad o [Carles] Puigdemont y optaron por lo segundo», se lamentaban fuentes autorizadas de Génova tras el desprecio con el que fue recibida la propuesta por los socialistas.
Unas horas antes el ganador de las últimas elecciones generales había pedido oficialmente al secretario general de la segunda fuerza más votada que le permitiera ponerse al frente del país durante un mandato limitado a dos años para afrontar sus «reformas pendientes» apoyándose en seis pactos de Estado consensuados entre las dos formaciones mayoritarias. Y la respuesta que recibió de su interlocutor, aseguran, fue un rotundo «no es no».
En estas circunstancias, desde el cuartel general de los populares reconocen que va a ser «difícil» llegar a acuerdo para la investidura de Feijóo con los socialistas, aunque siguen sin darse por vencidos ante la improbabilidad de que completen los cuatro votos a favor que les faltan para la mayoría absoluta en la primera votación -el 27 de septiembre-, que sería suficiente con que fueran cuatro abstenciones en la segunda vuelta, convocada 48 horas después. «Nosotros no somos Sánchez. No vetamos a nadie, ni siquiera a él», subrayan.
Al respecto, y ante la crítica del líder de su partido en Cataluña, Alejandro Fernández, a la oferta de diálogo que han trasladado precisamente al partido de Puigdemont para intentar lograr esos apoyos que necesitan, en el equipo de Feijóo precisaron ayer que coinciden con la única voz crítica que se ha alzado en público en sus filas en que Junts per Catalunya (JxCat) es su «adversario político». Aun así, confirmaron que formará parte de la ronda de contactos con todos los grupos con representación en el Congreso salvo Bildu con los que tienen previsto reunirse antes de la investidura, de la que, a falta de la convocatoria oficial, de momento ya se ha descolgado ERC.
En La Moncloa y en Ferraz, a su vez, había pocas expectativas. Y la duración de la reunión entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, apenas una hora, confirmó los presagios. El líder del PSOE cruzó la puerta de Ferraz pasadas las 11.00 horas aún incrédulo y tal y como había salido del complejo presidencial pasadas las 9.30 horas: sin acuerdo alguno con el PP y sin visos de que pueda haberlo. En el PSOE, no obstante, consideran que la cita apuntala su estrategia de querer poner en entredicho el liderazgo y la fortaleza de Feijóo: «Está a la desesperada», sentencian en el equipo de Sánchez y, además, «los motores braman» en el PP, describen en alusión a algunos barones populares.
GOBERNAR DOS AÑOS
La propuesta de Feijóo de que el PSOE le permitiese gobernar con el compromiso de convocar a los dos años nuevas elecciones sorprendió tanto a Pedro Sánchez como a su equipo. No esperaban un movimiento así. «Desesperado» es como califican fuentes socialistas al candidato a la investidura. «Si le proponemos gobernar dos años nosotros y dos años ellos, seguro que acepta», ironizan sobre el encuentro.
«Le vale cualquier cosa», sentencian en el equipo del presidente del Gobierno en funciones, en alusión a que ahora apelan a los votos socialistas para que le dejen gobernar cuando hace unas horas hacían pedagogía a lo suyos sobre el hecho de reunirse con Junts para buscar sus apoyos. «Si Junts les dice que sí, aceptan sus votos a pies juntillas», exponen desde el núcleo duro de Sánchez. Y sobre la petición de que ellos no obstaculicen la investidura de Feijóo ironizan que «ha pasado de querer derogar el sanchismo a rogar al sanchismo».
Aunque el PSOE descargó la presión de la reunión sobre el PP y la intención era «escuchar», Sánchez llevó a la cita una espina que tienen muy clavada él y su equipo más cercano: la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El órgano de gobierno de los jueces va camino de cumplir cinco años bloqueado. Ambos partidos estuvieron a punto de sellar un acuerdo en octubre de 2022, pero la negociación, prácticamente cerrada, se rompió tras una conversación telefónica en la que Sánchez confirmó a Feijóo que iba a modificar los delitos de sedición y malversación.
Ayer, en el Congreso Sánchez buscó visibilizar, de nuevo, lo que consideran una incoherencia del PP, instando a Feijóo a comprometerse a renovar el Poder Judicial antes del 31 de diciembre gobierne quien gobierne. ¿Por qué incoherencia? Lo explica Pilar Alegría, portavoz de la Ejecutiva del PSOE: «Antes de plantear ningún acuerdo y propuesta lo primero que tiene que hacer es cumplir el más básico, que es el constitucional. Lo primero que tiene que hacer es cumplir con la Constitución».
Junto a la renovación del Poder Judicial hubo otro asunto que provoca enfado y malestar en La Moncloa y en Ferraz y que Sánchez trasladó a Feijóo: las apelaciones del PP a posibles diputados tránsfugas del PSOE que pudieran desmarcarse del voto socialista y facilitar la investidura del gallego. «Respeto», es lo que le pidió en el cara a cara.
Los socialistas califican de «intolerables las llamadas al transfuguismo». La petición al presidente del PP que si no está conforme, pida a sus portavoces que dejen de hacer ese llamamiento. Fuentes socialistas exponen que Feijóo, por su parte, se quejó de que éstos están empleando sus fotos con el narcotraficante Marcial Dorado para desgastarlo.
Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo. /JAVIER BARBANCHO
Feijóo se compromete a convocar elecciones en dos años si Sánchez le permite gobernar y le ofrece seis pactos de Estado
El PP sostiene que así “la influencia que pretenden tener los partidos independentistas quedaría desactivada”
NotMid 30/08/2023
Alberto Núñez Feijóo ha ofrecido a Pedro Sánchez un acuerdo “en aras de la centralidad” por el que “la lista más votada pueda gobernar en nuestro país, como ha sido costumbre durante los últimos 45 años”. “De esa forma, la influencia que pretenden tener los partidos independentistas quedaría desactivada y España podría garantizar la igualdad de trato de los españoles”, señalan fuentes del PP.
Por ello, el candidato a la investidura ha pedido al secretario general del PSOE que facilite su nombramiento como presidente del Gobierno y que acuerden alcanzar seis pactos de Estado en una legislatura que tendría una duración de dos años. Ante el “riesgo” de repetir las elecciones en enero, el ganador de la última cita con las urnas ofrece un mandato de 24 meses para acometer las reformas pendientes y, un vez transcurrido ese periodo, convocar nuevos comicios.
Al término de la reunión celebrada este miércoles, de menos de una hora de duración, Feijóo ha constatado que “lamentablemente” a Sánchez “no le interesa” un acuerdo “de partidos constitucionales”. “Mi opción de Gobierno es y será defender siempre la igualdad de los españoles”, ha insistido el líder popular, que asegura que no renuncia a “entenderse” con la segunda fuerza tras el “rechazo de bloques” ideológicos, que a su juicio, dejó el escrutinio del 23-J.
Previamente, le había pedido al presidente en funciones que se comprometiera a facilitar la formación de un Ejecutivo con 15 ministerios y a “defender la integridad territorial” del país, rechazando expresamente “solicitudes de referéndum de independencia y de amnistía”. Asimismo, le ha ofrecido pactos de Estado que buscan la regeneración democrática, garantizar la viabilidad del Sistema Nacional de Salud y el saneamiento económico.
En el documento de cuatro folios con el que el candidato a la investidura ha acudido a la reunión con Sánchez se recoge la necesidad de una visión de país “en la que los intereses generales no queden supeditados de forma inexcusable y permanente a otros minoritarios o personales que socavan la unidad” de España, en alusión implícita a las cesiones que el PSOE estaría dispuesto a hacer a los partidos independentistas.
“No podemos permitir que la gobernabilidad de España se convierta en un bien a subasta e incluso que esté sujeta al chantaje permanente de aquellos que buscan privilegios particulares a costa y en el perjuicio de la mayoría de los españoles”, subraya el PP en su propuesta de acuerdo. En este sentido, añade que el referéndum de autodeterminación en Cataluña y la amnistía para los implicados en el 1-O que piden ERC y Junts a cambio del apoyo a su investidura “son completamente inasumibles porque, más allá de su cuestionable encaje legal y constitucional, estaría estableciendo diferencias entre los españoles que ningún Gobierno de la Nación, que se debe a todos sus ciudadanos por igual, puede admitir”.
El propio Feijóo ha recalcado posteriormente que su propuesta es la “alternativa” a un Ejecutivo dependiente de “un independentismo envalentonado” que está pidiendo la “liberación de presos con delito de sangre”, “la amnistía general de los condenados por atentar contra la integridad del país” y un referéndum de independencia.
En el PP apelan como inspiración de su propuesta -que hacen extensiva al resto de fuerzas con representación en el Congreso que respeten la Carta Magna- al “éxito de los grandes acuerdos aprobados en la Transición” y la “conveniencia” de que ese “ejemplo” guíe los próximos años. Y concluyen: “Tenemos el objetivo histórico de de abrir un nuevo periodo político en España que deje atrás la división de los españoles en bloques partidistas e ideológicos y permita trazar un nuevo camino de progreso y bienestar común”.
“De momento me he encontrado con el no es no”, ha reconocido el candidato a la investidura tras la reunión con Sánchez en el Congreso. “Pero no voy a cejar en el intento de ofrecer pactos y acuerdos y acuerdos y pactos”, ha recalcado.
Santiago Abascal junto a Pepa Millán en en el Congreso de los Diputados / Javi Martínez
Vox y PSOE son los partidos con más votantes arrepentidos y la izquierda teme más unas nuevas elecciones
La mayoría cree que habrá Gobierno pero más de un 84% repetiría su voto si hubiera que volver a las urnas
NotMid 29/08/2023
Casi dos tercios de los españoles creen que habrá Gobierno en los próximos meses y España no se verá abocada a la repetición electoral el próximo 14 de enero. Según la encuesta de Sigma Dos para EL MUNDO, realizada con 1.933 entrevistas entre el 17 y el 24 de agosto, tras la constitución de las Cortes y el primer pacto del PSOE con Junts para la presidencia de la Mesa, el 63,1% de los españoles confía en que habrá investidura.
Y en caso de no haberla, no habría demasiados cambios porque la fidelidad hacia los partidos sigue siendo muy alta. Sólo un 6,5% del electorado se arrepiente de su voto del 23-J y un 84,1% asegura que ni se arrepiente ni cambiaría su papeleta en caso de tener que volver a las urnas.
El porcentaje de arrepentidos es más alto que la media entre los votantes de Vox, con un 9,9% que ahora no votarían o elegirían otro partido. También en el PSOE, con un 7,4% que lamentan haber votado a Pedro Sánchez hace poco más de un mes. Tanto PP como Sumar presentan una tasa de arrepentidos menor al 5%.
La impresión de que habrá Gobierno es más mayoritaria en la izquierda -un 79,2% entre los votantes de Sumar y un 69,7% entre los del PSOE- que en la derecha -un 59,9% en el electorado del PP y un 57,3% en el de Vox-. Sólo un 24,3% piensa que los comicios tendrán que repetirse porque nadie será capaz de formar Gobierno. Ahora bien, cuando se pregunta si se estaría de acuerdo con que las elecciones se repitieran, la percepción cambia bastante.
Según la encuesta de Sigma Dos, el 51,6% de los españoles sería partidario de que se celebrasen nuevas elecciones el próximo 14 de enero. Un 38% rechaza esa posibilidad y un 10,4% no se pronuncia. Y, de nuevo, hay diferencias significativas entre bloques. Más de un 80% de los votantes del Partido Popular y más de un 85% de los de Vox desea que España vuelva a las urnas y la derecha tenga una segunda oportunidad para sumar una mayoría suficiente para llegar a Moncloa. Y al contrario en la izquierda. Sólo el 20,9% de los votantes de Sumar querrían volver a las urnas. El porcentaje es algo más alto entre los votantes del PSOE: el 33,9% de los que optaron por Pedro Sánchez verían con buenos ojos volver a votar dado el resultado del pasado 23 de julio.
La izquierda no quiere la repetición electoral. Pero hay un consenso más o menos general en que unas nuevas elecciones reforzarían más si cabe al bipartidismo. Con gran división a la hora de señalar a un ganador, eso sí. El 32,4% de los encuestados piensa que el Partido Popular sería el principal beneficiado por unas nuevas elecciones, pero el 31,5% interpreta que volver a las urnas sería bueno para Pedro Sánchez y el PSOE. Menos de un 6% creen que repetir las elecciones sería positivo para Sumar o para Vox.
De nuevo, la percepción en este asunto es muy subjetiva. Los votantes de PSOE y PP piensan que sus respectivos partidos serían los más beneficiados si España volviera a votar. Los de Vox creen que el más beneficiado sería Feijóo (31%), poco por encima del propio Vox (29%). Los partidarios de Yolanda Díaz son más pesimistas: el 39,2% cree que unas nuevas elecciones beneficiarían al PSOE, un 20,9% que al PP y sólo el 16,4% piensan que los beneficiados serían ellos.
En unas nuevas elecciones, sin embargo, el PP seguiría lastrado por los pactos alcanzados con Vox tras las autonómicas del 28-M. El 60,3% de los encuestados cree que estos acuerdos «han perjudicado electoralmente a Núñez Feijóo en las elecciones generales». Un peaje que admiten los propios votantes del PP en un 64,6%. Sólo el 7,7% de quienes votaron al PP opinan que los acuerdos con Abascal le beneficiaron en las urnas.
FICHA TÉCNICA
Población de referencia y ámbito geográfico: Personas de 18 y más años residentes en España con derecho a voto.
Técnica de recogida de información: A través del Panel Sigma Dos by Trust Survey. Metodología mixta telefónica (CATI) / on line (CAWI) / RRSS.
Tamaños muestrales: 1.933 entrevistas.
Selección de las unidades muestrales: En la entrevista telefónica mediante selección aleatoria de hogar y aplicación de cuotas de sexo y edad en la selección de la unidad última. En el caso del panel se ha aplicado asignación proporcional por sexo y grupo de edad. La distribución de la muestra ha sido proporcional por comunidad autónoma en ambas muestras.
Margen de error: El error de muestreo absoluto se puede acotar por ±2,3% para un nivel de confianza del 95.5%, y en el supuesto de variables con dos categorías igualmente distribuidas.
Fecha del Trabajo de Campo: 17 a 24 de agosto de 2023
Realización: SIGMA DOS. Calle Velázquez, 52. 28001, Madrid.
Dirección técnica: José Luis Rojo Gil.
Sánchez y Feijóo en octubre de 2022. / JAVIER BARBANCHO
Sánchez rechaza hablar con Feijóo por teléfono y sus jefes de gabinete pactan que se vean este miércoles en el Congreso
El candidato a la investidura intentó mantener una charla previa pero el secretario general del PSOE delegó mientras ofrecía tres alternativas
NotMid 29/08/2023
La reunión que Alberto Núñez Feijóo había solicitado a Pedro Sánchez en el marco de la ronda de contactos para intentar recabar apoyos para su designación como presidente del Gobierno se producirá finalmente este miércoles a las 10 de la mañana en el Congreso de los Diputados.
Según han confirmado en el PP, el ganador de las elecciones generales contactó este lunes con el secretario general del PSOE para “plantearle la idoneidad de mantener un encuentro” entre el candidato a la investidura propuesto por el Rey y el líder del segundo partido. La comunicación se produjo a través de WhatsApp.
En su primer mensaje, Feijóo solicitó a Sánchez mantener una charla telefónica para tratar este asunto. El presidente en funciones coincidió en la conveniencia de celebrar esa reunión, pero prefirió que fueran los directores de gabinete de ambos quienes pactaran la fecha más indicada, tal y como precisan fuentes de la sede de Génova.
En el PSOE señalan, a su vez, que Sánchez ofreció tres alternativas para celebrar dicha reunión de inmediato: este martes, el miércoles o el jueves. Finalmente ha sido esta mañana cuando se ha acordado que el día del encuentro sea el miércoles, 30 de agosto, a las 10.00 horas en el Congreso.
En el PP enmarcan esta reunión en “la normalidad democrática que ha de marcar la agenda posterior a las elecciones generales del 23-J” y “en la institucionalidad previa al debate de investidura fijado para el 26 de septiembre”.
“Feijóo ya avanzó a Sánchez durante el debate que se celebró el pasado mes de julio que PP y PSOE deberían trabajar en un modelo que facilitara la investidura de la lista más votada. Esa convicción del presidente del PP sigue vigente y así se le trasladará mañana al secretario general de los socialistas”, subrayan en la cúpula de Génova.
En el cuartel general del PSOE, por su parte, esperan en que con este encuentro el PP “abandone el insulto diario” a su formación política y “adopte una senda más constructiva para el país y los españoles y españolas”
La reunión, en todo caso, está abocada al fracaso. El líder de los populares afeará al presidente en funciones que esté dispuesto a optar a la reelección “cediendo todo lo que sea a los independentistas”, mientras que su interlocutor le recriminará su “amnesia con Junts”, después de que el partido conservador esté dispuesto ahora a reunirse con el de Carles Puigdemont tras criticar que los socialistas mantuvieran conversaciones con la formación de un “prófugo de la Justicia”.
PSOE y Sumar validan su treta para dar grupo a Junts y ERC y el PP se opone por ser un “fraude reglamentario y electoral”
La Mesa del Congreso aprueba los grupos parlamentarios de Puigdemont y ERC
NotMid 28/08/2023
No era una decisión que se iba a tomar en función del reglamento, sino de la política, y por eso Junts y ERC constataron ayer que tendrán sendos grupos parlamentarios propios. PSOE y Sumar certificaron en la Mesa del Congreso la validez de la maniobra que PSOE y Sumar se inventaron unos días antes para poder otorgárselos. La jugada pudo salir adelante gracias a la mayoría de ambos partidos en el órgano -cinco votos-, en el que sólo se opuso el PP -cuatro-, que denunció que, además de un «fraude reglamentario», se había perpetrado un «fraude electoral».
La controversia por el precedente que se ha creado está servida, pero lo que quedará, una vez que se apague el ruido, es que PSOE y Sumar han establecido las condiciones preeliminares que estos dos partidos independentistas exigían para empezar a sentarse a negociar la investidura de Pedro Sánchez. ¿Por qué? Porque contar con un grupo parlamentario en el Congreso supone una fuerte inyección económica en subvenciones, garantiza un protagonismo político destacado con el mismo tiempo que los grandes partidos y ofrece una voz asegurada en los espacios del debate parlamentario.
En la Mesa del Congreso hubo choque de posiciones. El PP recriminó que la fórmula con la que Junts y ERC habían dado por cumplidos los requisitos a los que no llegaban por sí mismos se habían conseguido de manera fraudulenta respecto a los resultados electorales y retorciendo las condiciones del reglamento.
Junts y ERC tendrán grupo porque PSOE y Sumar han establecido una fórmula inédita para sortear hasta tres artículos del Congreso. El principal es la exigencia de que los partidos que no lleguen a 15 diputados tengan que tener al menos un 15% de voto en todas las circunscripciones donde se haya presentado. Tanto republicanos como neoconvergentes no llegaban de largo a esa cifra en dos provincias. Así que lo que se ha interpretado es que bastaría con que tuvieran un 15% en toda Cataluña. Como esa interpretación -que sí tiene un precedente en 2004- tampoco se conseguía, PSOE y Sumar se inventaron que cediéndoles todos los diputados por las provincias de Tarragona y Girona también se les atribuye para el cómputo todo el porcentaje de voto que PSC y Sumar tuvieron en esas circunscripciones. Así pues, los socialistas dieron cuatro diputados a Junts y Sumar, dos a ERC.
El PP denunció que esto es un «fraude electoral» que sobrepasa el préstamo temporal de diputados para llegar al mínimo de cinco -del que hay bastantes precedentes-, pues en un sistema electoral de listas cerradas y bloqueadas los votos no pertenecen a los diputados, sino a las formaciones políticas que los han conseguido. Por eso enfatizó que no se puede traspasar porcentaje de voto y va a estudiar si cabe alguna manera de recurrir la decisión.
Por lo demás, la Mesa del Congreso fue escenario de otro conflicto. Hay una fuerte disputa por el reparto de los sitios dentro del hemiciclo y de los despachos. La reacción del PP, contra la idea de separar a sus diputados, fue tan tajante que finalmente Francina Armengol decidió darle una vuelta y esperar una semana más antes de adjudicar dónde se sienta cada cual en la Cámara.
Feijóo dice que no aceptará “chantajes” para la investidura: “No somos Sánchez, no seré presidente a cualquier precio”
El líder del PP ha inaugurado el curso político en Soutomaior (Pontevedra) arropado por el grueso de sus barones, pero con las ausencias de Isabel Díaz Ayuso, Carlos Mazón o Gonzalo Capellán
NotMid 27/08/2023
Alberto Núñez Feijóo ha inaugurado este domingo el curso político en su tierra natal. El líder del PP ha reunido en Soutomaior (Pontevedra) a sus principales barones territoriales para dejar clara su intención de convertirse en el próximo presidente del Gobierno. El acto, no obstante, estuvo marcado por dos grandes ausencias, las de Isabel Díaz Ayuso y Carlos Mazón. Tampoco han acudido los presidentes de Cantabria y La Rioja, María José Sáenz de Buruaga y Gonzalo Capellán.
Feijóo ha asegurado que se reunirá “con los grupos políticos que quieran hablar” para negociar su posible investidura, agendada para el 26 de septiembre. El candidato a la presidencia del Gobierno también se ha mostrado dispuesto a escuchar las propuestas de los presidentes autonómicos que quieran “aportar”, si bien ha advertido que no aceptará “chantajes” y tampoco se someterá a la voluntad de “las minorías”.
El popular ha destacado que su predisposición al diálogo no quiere decir que vaya a aceptar “lo que está dispuesto a aceptar” el PSOE. “El encargo de la investidura conlleva la obligación de hablar con aquellos que quieran hablar y después se puede coincidir o discrepar. Esto es lo que intentaré durante las próximas semanas. Hablar sí, dialogar también, pero chantajes no, subastas no”, ha continuado.
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, durante la inauguración del curso político en el Castillo de Soutomaior. (Agostime / Europa Press)
“No somos Sánchez. No seré presidente del Gobierno a cualquier precio”, ha garantizado el candidato. Feijóo también ha avanzado que planteará las reformas que considera “necesarias” para el momento político, económico e institucional actual frente al “modelo de fragmentación, cesiones, rupturas y divisiones que aboca a nuestro país a un abismo territorial, político, existencial y económico”.
La investidura, un plan a largo plazo
El número uno del PP ha estado acompañado por el expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, además de otros miembros de la Ejecutiva Nacional, como Borja Semper o Cuca Gamarra. La mayoría de los líderes autonómicos tampoco se han perdido la cita, un encuentro en el que han participado Alfonso Rueda, Juanma Moreno, Alfonso Fernández Mañueco, María Guardiola, Marga Prohens, Jorge Azcón o Fernando López Miras, cuya investidura sigue en el aire. La intervención de Feijóo contó con el beneplácito de unos 1.500 cargos del partido, entre ellos, parte del núcleo duro del candidato durante su anterior etapa al frente de la Xunta de Galicia.
“Vamos a presentar nuestra candidatura a la presidencia del Gobierno, aunque no salga adelante por cuatro votos. Lo que sí os puedo asegurar es que las ideas, las propuestas y el programa que voy a exponer en el Congreso de los Diputados tendrán vigor durante los próximos años”, ha terminado. Estas declaraciones llegan pocas horas después de que algunos populares apelasen al voto tránsfuga de los socialistas “incómodos” y hablasen de Junts como “un partido cuya tradición y legalidad no están en duda”, una afirmación que choca con las duras críticas al independentismo vertidas durante los últimos años por los mismos dirigentes.
Alberto Núñez Feijóo ha insistido en que prefiere “perder una investidura y que no pierda España”, para luego añadir que él quiere ser “un presidente libre y no secuestrado”. El popular baraja la posibilidad de que la investidura no prospere, por eso dice que, aunque no salga adelante “a corto plazo”, servirá para “poner la primera piedra del próximo Gobierno de España”, que, según palabras propias, “antes o después será del PP”
El portavoz de ERC, Gabriel Rufián. habla con las dirigentes de JxCat, Laura Borrás y Miriam Nogueras / Juan Carlos Hidalgo
ERC y Junts chocan al exigir el referéndum como ‘línea roja’ para investir a Pedro Sánchez
Una parte del independentismo quiere solucionar la desjudicialización del ‘procés’ antes de reclamar la autodeterminación
NotMid 27/08/2023
La división dentro del independentismo cada vez es más profunda y la negociación para facilitar una investidura del candidato socialista Pedro Sánchez como presidente del Gobierno puede acabar con cualquier esperanza de recomponer puentes entre los partidos soberanistas. Las estrategias de Esquerra Republicana de Catalunya y de Junts Per Catalunya sólo tienen en común que su objetivo está en sacar rédito político de las concesiones que consigan del PSOE a cambio de sus votos y siempre con la vista puesta en unas hipotéticas elecciones autonómicas que podrían llegar el año próximo.
Lo que está claro es que ERC se quedó sola en su propuesta de hacer un “frente común” con Junts en el Congreso. Los republicanos siguen manteniendo que su ‘línea roja’ es conseguir una desjudicialización del proceso independentista, aunque ya han empezado a transigir en si llegará en forma de ley de amnistía como reclamaban en un principio o bien en alguna otra figura jurídica a explorar que garantice una solución a la mayoría de los procesos abiertos contra el independentismo, ya sean los penales o los del Tribunal de Cuentas que afecta al bolsillo de los líderes soberanistas.
Su voluntad es conseguir acabar con la “represión” del Estado en estos años de ‘procés’ para sentar las bases de una negociación política que desemboque en un referéndum de autodeterminación. Por eso, aunque en sus declaraciones públicas se apueste por las dos exigencias, fuentes de ERC señalan que se prioriza conseguir una amnistía antes que una votación pactada ya que la situación permitiría salir reforzado a los republicanos en su pugna con Junts por ser hegemónicos dentro del electorado secesionista.
Esta amnistía podría pasar por forzar a la despenalización de actos de desobediencia enmarcados en la libertad de expresión y del uso de las instituciones para el 1-O al considerarse que están dentro de la autonomía que tienen los gobiernos locales para destinar recursos públicos a los fines que consideren. Además, ERC busca mejorar la financiación de Cataluña y el traspaso de Cercanías, como indica la campaña iniciada esta semana por el Govern, con su presidente Pere Aragonès a la cabeza, atacando duramente al Gobierno por la gestión y la falta de inversión en esta infraestructura ferroviaria tras varios incidentes con centenares de pasajeros afectados.
La estrategia de ERC contrasta con la inmovilista de Junts que está enrocada en reclamar tanto la amnistía como la autodeterminación en la negociación con los socialistas. Sus exigencias no pasan sólo por la desjudicalización del ‘proces’, con la exoneración en todos los procesos civiles y penales abiertos de los últimos 10 años tanto los relacionados con el 1-O como el de corrupción que afecta a la ex presidenta del Parlament Laura Borràs, sino también con sentar las bases hacia un posible referéndum en Cataluña.
Para Junts es prioritario presentarse a las elecciones como el partido que es capaz de facilitar la secesión para atraer de nuevo al electorado más desencantado y eso pasa por radicalizar sus peticiones frente a los socialistas, sin miedo a una repetición electoral, para desmarcarse del apelativo de “autonomista” con el que el independentismo más unilateral se refiere a ERC. No ha gustado nada en las filas de la formación de Carles Puigdemont, quien controla personalmente la negociación, los ataques recibidos por este sector tras facilitar la presidencia de la Mesa del Congreso a la candidata socialista Francina Armengol y por eso ahora quiere endurecer su posición en la negociación. Veremos el precio a pagar del PSOE a los nacionalistas catalanes por la investidura de Pedro Sánchez.
Pedro Sánchez, en el Congreso de los Diputados / Paul White
El PSOE inventa una treta para sortear tres puntos del Reglamento y dar más dinero a Junt
El PP estudia el caso y avisa: no avalará un “fraude”
NotMid 26/08/2023
A estas alturas todo el mundo conoce ya que la investidura de Pedro Sánchez está condicionada por el sentido del voto de ERC y Junts. Y la primera exigencia que ambos han puesto encima de la mesa antes de negociar sus apoyos es conseguir ahora grupo parlamentario propio en el Congreso. La petición se hace, lógicamente, porque ninguno de los dos puede lograrlo por sí mismo y porque necesitan una ayuda externa, dado que están lejos de cumplir los requisitos del reglamento. Pues tras darle muchas vueltas y estudiar los precedentes, el PSOE ha terminado por inventarse una nueva fórmula que fuerza las reglas para esquivar las condiciones que marcan tres artículos del funcionamiento de la Cámara.
¿Por qué tomarse tantas molestias? Porque Junts y ERC colmarán sus aspiraciones de tener grupo propio y, gracias a esto, recibirán una inyección más cuantiosa de dinero en subvenciones, tendrán más protagonismo político en los debates del Pleno al contar con el mismo tiempo de intervención que los grupos más grandes, se garantizarán plaza en todas las comisiones de la Cámara y disfrutarán de su cupo para elevar iniciativas y para preguntar al Gobierno en las sesiones de control del Congreso. Todo eso implica a su vez contratar más asesores para su funcionamiento en Madrid. Hay, pues, mucho en juego.
El desafío era encajar esa ambición con un reglamento del Congreso que cerraba de golpe la puerta a los dos partidos independentistas. Hay tres artículos que constreñían la capacidad de maniobra, pero el PSOE ha consumado una fórmula inédita para sortear los distintos escenarios, obligando a que ahora sea la Mesa del Congreso la que bendiga la maniobra con una interpretación flexible que, de forzar las reglas, las retuerce a conveniencia. De hecho este movimiento ha hecho saltar las alarmas en el PP que advierte de que no avalarán «que se constituyan grupos en fraude reglamentario».
¿Dónde está la treta? Lo primero es acudir al reglamento, y a lo que dicta el artículo 23 en su punto primero. «Los diputados, en número no inferior a 15, podrán constituirse en Grupo Parlamentario. Podrán también constituirse en Grupo Parlamentario los diputados de una o varias formaciones políticas que, aun sin reunir dicho mínimo, hubieren obtenido un número de escaños no inferior a cinco y, al menos, el 15% de los votos correspondientes a las circunscripciones en que hubieren presentado candidatura o el 5% de los emitidos en el conjunto de la Nación».
Junts y ERC tienen siete diputados cada uno. Esto significa que deberían acogerse a la segunda parte del enunciado, donde dice que aquellos partidos con al menos cinco diputados pueden formar grupo si tienen un determinado porcentaje de voto. Como no alcanzan el 5% en toda España sólo les queda tener «al menos el 15% de los votos correspondientes a las circunscripciones en que hubieren presentado candidatura».
Ninguno de los dos lo cumple. ERC se quedó en el 12,3% en Barcelona y el 14,7% en Girona. Por su parte, Junts obtuvo el 9,6% de los votos en Barcelona y el 11% en Tarragona.
La vía que se ha buscado para encajar esos números es considerar que sirve con haber logrado ese 15% del voto en el conjunto de Cataluña. No es la interpretación habitual pero sí es cierto que hay un precedente, en 2004, en el que la Mesa hizo esa lectura. Fue para favorecer a ERC, que tenía ocho diputados y que se quedó en el 14,1% del voto en Barcelona, pero que en la suma global de Cataluña estaba por encima del 15,8%. El PP recurrió entonces al Tribunal Constitucional, pero no justificó su queja en que la interpretación de la Mesa fuera errónea, porque por la redacción pudiera encajar esa lectura, sino porque consideró que ERC también se había presentado en la Comunidad Valenciana y que, por tanto, se le tendría que aplicar la media de las siete circunscripciones en las que tuvo listas. El Constitucional no admitió el recurso, dado que en estos casos considera que la Mesa es la soberana para interpretar el reglamento de la Cámara.
La cuestión es que ahora ni siquiera con esa interpretación flexible habría argumentos para darle grupo a ERC y Junts. Ninguno de los dos alcanza el 15% en el global de Cataluña. Los republicanos se quedaron frenados en el 13,1% y Junts, en el 11,1%. Por tanto, no bastaba agarrarse al precedente de ERC en 2004, había que improvisar algo más o buscar otro camino para conseguirlo.
Hay precedentes de haber sido generosos con una fuerza política cuando ésta se quedaba muy cerca de cumplir el objetivo en el porcentaje de voto, pero en este caso no había cómo justificarlo cuando Junts estaba a casi cuatro puntos y ERC a casi dos.
Por eso ha habido mucho que pensar, hasta que ha surgido la idea que se ha consumado. El PSOE ha cedido sus dos diputados de Tarragona y sus dos de Girona a Junts. Del mismo modo que Sumar, que ha estado en esto coordinado con los socialistas, ha hecho lo propio con ERC al prestarle a su parlamentaria por Girona y al de Tarragona.
La cesión de diputados es una práctica que se ha hecho otras veces. Se dejan temporalmente para constituir el grupo y luego regresan a casa con sus compañeros una vez que éste ha sido aprobado por la Mesa. Sin embargo, a esta ocasión se han dejado diputados con el argumento de que con ellos se van todos los votos que éstos han conseguido para sacar sus escaños. Es decir, los dos diputados del PSOE de Tarragona se llevan consigo sus 120.500 votos y los dos de Girona, los casi 93.000 votos. El plan es que el montante de más de 213.000 votos se sumen a los 392.700 que tuvo Junts y, con ello, se supere el global del 15% del voto en Cataluña.
Es lo mismo de Sumar con ERC. La candidatura de Yolanda Díaz obtuvo en Girona y Tarragona un total de 76.614 votos (35.118 y 41.496, respectivamente). Esas papeletas unidas al total de votos de ERC en toda Cataluña situaría a los republicanos en un 15,3% de votos.
Para que esta interpretación fructifique es clave la Mesa del Congreso, que es quien manda. Y allí el PSOE, con la presidenta Francina Armengol a la cabeza, y Sumar tienen mayoría y, por tanto, la última palabra para avalar su jugada. ERC y Junts votaron a la izquierda en la configuración de la Mesa para impedir que mandaran PP y Vox.
El PP ya está estudiando esta treta y ha pedido informes sobre los precedentes. También quiere escuchar a los letrados de la Cámara para con toda la información decidir si recurren. El vicepresidente segundo del Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro, es claro: «No vamos a avalar que se constituyan grupos en fraude reglamentario». En declaraciones a EL MUNDO advierte de que los españoles «no tienen que pagar los acuerdos de Sánchez para lograr los votos que le dieron la mesa del Congreso».
El portavoz popular, Borja Sémper, también se pronunció: «Es un poco fraude que los partidos chalaneemos con diputados y otorguemos escaños para que puedan conformar grupos políticos» a quienes los ciudadanos no han dado la «legitimidad» o la «confianza» en las urnas para que puedan hacerlo.
El PSOE tenía otra opción. Puestos a ceder, podría haber dado ocho diputados a Junts para llegar a los 15 que permite constituir grupo sin porcentajes de ningún tipo. Pero aquí se estrellaba con dos artículos más. El 23.2 impide que elegidos del mismo partido constituyan otros grupos parlamentarios. Ocho son más que los siete de Junts. Por tanto no era un complemento, sino la mayoría. Además, cuando se marcharan se activaría el artículo 27, que dice que cuando un grupo pierde más de la mitad de diputados queda disuelto.
Feijóo pasada delante de Sánchez en el Congreso.P. WHITE / AP
Feijóo potenciará su liderazgo nacional hasta la investidura: “Sánchez, que espere”
El PP tiene previsto hablar con todos los grupos salvo Bildu antes del Pleno fijado para el 26 y el 27 de septiembre
NotMid 24/08/2023
Tranquilidad. “Hay 35 días”. Éste es el mensaje que traslada la cúpula del PP después de que el «tiempo razonable» que había pedido para tratar de amarrar los cuatro votos que separan a Alberto Núñez Feijoó de la presidencia del Gobierno se haya materializado en la convocatoria del Pleno de investidura en el Congreso para el 26 y el 27 de septiembre. “Este domingo abrimos el curso político. El lunes arranca todo. [Pedro] Sánchez, que espere”.
Será a partir de la semana que viene cuando el equipo del candidato al que el Rey ha propuesto para someterse a la confianza de la Cámara Baja inicie una ronda de conversaciones con todos los grupos con representación parlamentaria “menos con aquellos que no han condenado el terrorismo”. Es decir: la dirección de Génova traza una única línea roja con EH Bildu y se muestra dispuesta a hablar con el resto, incluido Junts per Catalunya (JxCat), a pesar de que hasta ahora había situado a la formación liderada por Carles Puigdemont “fuera de los límites constitucionales” y, por extensión, como un interlocutor no válido.
Aun así, la prioridad de los populares va a ser la de apelar a la “responsabilidad” del PSOE para que permita gobernar al ganador de las últimas elecciones aunque es una posibilidad que en Ferraz no se ha contemplado ni como una hipótesis remota. La cuestión ahora es si el planteamiento va a ser solicitar a la segunda fuerza política una abstención general como la que en 2016 permitió a Mariano Rajoy continuar en La Moncloa o sólo de los cuatro diputados que necesitará Feijóo en la segunda vuelta para obtener más síes que noes -en la primera precisa de mayoría absoluta de 176 votos afirmativos -.
“Es una pregunta a la que aún no podemos responder. Una vez conocida la fecha [del Pleno] avanzaremos en la estrategia. Hay 35 días. Trabajaremos en ello a partir del lunes”, explican en Génova. Entre las cuestiones que se tienen que dilucidar está el orden en el que se convoca a los distintos representantes y si en el caso de los socialistas la invitación se cursará a nombre de su secretario general o del portavoz del grupo parlamentario, Patxi López.
El pasado 30 de julio Sánchez respondía por carta a la misiva que, a su vez, le había enviado previamente Feijóo solicitándole una reunión esa misma semana para evitar un “bloqueo” y la “ingobernabilidad” de España. “Tras la constitución formal del Congreso de los Diputados, el próximo 17 de agosto, y una vez designado el candidato propuesto por el Jefe del Estado, estaré encantado de reunirme con usted, así como con el resto de portavoces de los grupos parlamentarios con representación en la Cámara”, escribió entonces el presidente en funciones al ganador de los comicios con una literalidad de la que se infería que daba por hecho que sería él a quien el Rey le encargaría intentar la investidura.
Veintiún días después de aquel intercambio de correspondencia, el primer designado por el Rey para tratar de obtener el refrendo de la Cámara Baja ha sido el líder de los populares después de que se presentara en el Palacio de la Zarzuela con 172 apoyos confirmados: los 137 de su grupo, los 33 de Vox y los representantes únicos de Unión del Pueblo Navarro (UPN) y de Coalición Canaria (CC). Por eso el mensaje que van a tratar de apuntalar en los próximos días es que le faltan cuatro síes para la mayoría absoluta en la primera votación o cuatro abstenciones en la segunda y que no es imposible conseguirlos, pero que necesitan ese «tiempo razonable» para intentarlo.
“Si consideramos la propuesta de investidura de Alberto Núñez Feijóo un trámite, lo podemos hacer mañana y lo liquidamos: nosotros hacemos nuestro discurso, ellos hacen el suyo y pasamos rápidamente a lo que por lo visto interesa a los socialistas, que es que Pedro Sánchez cuanto antes tenga la oportunidad de despiezar el Estado y venderlo por partes”, señaló este miércoles Esteban González Pons, vicesecretario de Institucional en en una entrevista en Onda Cero.
TRÁMITE “EN SERIO”
En el equipo del candidato recalcan que van a tomarse “en serio” este proceso que les hará acaparar el foco informativo y potenciará su liderazgo durante el las cinco próximas semanas. advierten que no es “un trámite insustancial” ni tampoco “publicitario”. Ante la probabilidad de que no logren los apoyos que necesitan porque las “exigencias” que les pidan a cambio sea “incompatibles” con sus “límites morales y constitucionales”, volverán al Palacio de la Zarzuela con un mensaje para el Rey: “Lo hemos intentado y no lo hemos conseguido”.
“Si el PP entrara en la subasta en la que está Sánchez con Junts a lo mejor el PP podría tener el voto a favor en la investidura de Junts. Si nosotros aceptamos la amnistía y aceptamos un referéndum de independencia en Cataluña le quitamos el apoyo de Junts a Sánchez”, deslizó González Pons planteando el escenario de lo que no van a hacer. “De lo que estamos hablando no es de que haya una mayoría mejor que la del PP, estamos hablando que hay un tipo que está dispuesto a desguazar lo que es de todos para conseguir lo que es propio”, agregó.
En Génova tampoco daban por perdido este miércoles un eventual entendimiento con el PNV a pesar de que desde el 23-J los nacionalistas vascos ya les habían cerrado la puerta en tres ocasiones. Su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, volvió a rechazar posteriormente participar “en combinaciones en las que entre Vox”.
Los populares inaugurarán el curso político el domingo en el Castillo de Soutomaior -como era una tradición en el partido desde la etapa de la presidencia de Rajoy- siete años después de haber sido expulsados de este enclave pontevedrés tras perder la Diputación provincial, de la que depende el mismo, y que recuperaron tras el 28-M. A partir del lunes se afanarán en el “dificilísimo” reto de intentar llevar a Feijóo a La Moncloa mientras Sánchez espera.
Rey Felipe VI recibiendo a Alberto Núñez Feijóo.Mariscal / EFE
Las claves del histórico comunicado del Rey sobre la investidura: un varapalo a Sánchez; Feijóo, mayor de edad que Rajoy y “consideraciones” que ya son ley
NotMid 23/08/2023
No hay una equidistancia posible. Pujaron con la misma determinación, pero distintos eran los fundamentos. Hubo dos candidatos, sí, ambos lanzados para recibir el encargo real de someterse a una investidura, pero el desenlace marca papeles de vencedor y perdedor. Aunque la terminología deportiva facilita la comprensión, sería más preciso hablar de un Alberto Núñez Feijóo legitimado y un Pedro Sánchez deslegitimado. Porque con su decisión, Felipe VI estableció justicia e hizo ley. Ante una pugna sin precedente, entre dos, mando parar.
Atendiendo al dictamen y a los argumentos, sólo cabe hablar de presiones al Rey desde la Presidencia del gobierno (en funciones) y no desde Génova. Fue Sánchez quien llegó a acusar a su adversario de coartar al Rey. “No es la hora de presiones al jefe del Estado”, dijo, en una denuncia que lo encubría. Desde ya es “la hora de la democracia parlamentaria”, esa apelación que tanto gusta en el PSOE, pero antes, a todas horas, es la hora de las instituciones, de los usos y costumbres que afirman la democracia -no sólo en su derivada parlamentaria-, de los procedimientos inamovibles por encima del chisgarabís de turno.
El comunicado de Casa Real para dar cuenta de que Feijóo es el primer candidato propuesto es de una extensión y una profundidad inusuales. Desde la estricta institucionalidad, para huir de la política, adquiere alcance político e histórico.
1. Comienza por aseverar lo obvio, pero que supone nada menos que su pilar constitucional: “Hoy han concluido las consultas llevadas a cabo por su Majestad el Rey (…) en el procedimiento previsto en el artículo 99 de la Constitución”. Y entre el arranque y la última línea de ese párrafo preliminar introduce un subrayado: “[consultas] con los representantes de los grupos políticos que han comparecido”. Una primera defensa de la institucionalidad, que ERC, Junts, EH Bildu y BNG no han querido respetar, a diferencia de Aitor Esteban ahora o de Pablo Iglesias hace nada, que no son menos nacionalista o republicano por conjugar sus posiciones con el respeto a lo vigente, aunque pretendan exiliarlo. Esa insistencia en que, en su decisión, el Rey se basa en lo que escucha durante la ronda de consultas (artículo 99, apartado 1) no implica el enroque en una monarquía palaciega, que sólo atiende a lo que se escucha entre las cuatro paredes de Zarzuela. En el propio comunicado se matiza.
2. “Su Majestad el Rey ha propuesto a don Alberto Núñez Feijóo como candidato a la Presidencia del Gobierno”, arranca el segundo párrafo. Y pasa a las “consideraciones”, en cuatro puntos que en adelante serán jurisprudencia. En próximas legislaturas, periodistas y expertos constitucionalistas de urgencia (en agosto, incluso) sabrán a qué atenerse. En el primer punto, la Casa Real vuelve a apuntar a “los grupos que han comparecido” y que “han expuesto el sentido de sus votos”. Y en la segunda consideración da cuenta de que Feijóo le ha trasladado “su disposición a ser candidato”. En un paso más, en el punto tres se recuerda: “El Partido Popular ha sido el partido político que ha obtenido mayor número de escaños en las pasadas elecciones”.
Llegados aquí, el Rey hace Monarquía parlamentaria, sella tradición e institucionalidad: “Conviene señalar que, salvo en la Legislatura XI, en todas las elecciones celebradas, el candidato del grupo político que ha obtenido mayor número de escaños ha sido el primero en ser propuesto como candidato a la Presidencia del Gobierno”. Y si en la Legislatura XI no fue así se debe a que aquel presidente tan chispeante de sentido común se comportó de la manera más irresponsable desde su último día, cuando abandonó el Congreso ante su censura, al primero, cuando declinó el ofrecimiento del Rey porque iba a perder -como probablemente Feijóo en esta ocasión-. Rajoy, de mayor de edad, es Feijóo. Sabemos desde este martes que proponer al candidato más votado a la Presidencia del Gobierno es una “práctica” que “se ha ido convirtiendo con el paso de los años en una costumbre”. Ahí, un legado ya de Felipe VI.
3. ¿No lee los periódicos el Rey? ¿No tienen wifi en Palacio? ¿Necesita que un independentista vaya a Zarzuela a decirle qué piensa? ¿Queda la “costumbre” por encima de la lógica? El párrafo crucial del comunicado es el que cierra la tercera “consideración”. Sin dejar de insistir en la defensa de sí mismo -“En el procedimiento de consultas llevado a cabo por Su Majestad el Rey no se ha constatado”-, añade: “A día de hoy, [no se ha constatado] la existencia de una mayoría suficiente para la investidura que, en su caso, hiciera decaer esta costumbre”. Si Sánchez hubiese podido exhibir un abrazo con Junqueras, Otegi, Puigdemont y Yolanda Díaz como aquel que le fundió a Pablo Iglesias dos días después de las segundas elecciones de 2019; si el PNV, después de apoyar al PSOE para la Mesa del Congreso no hubiese dicho en Zarzuela que aquel aval no se había actualizado; si ERC y Junts no hubiesen expresado eso mismo, vinculando su futuro ‘sí’ a una negociación por hacer, la “costumbre” se habría adaptado a la realidad. Es decir, se habría propuesto a Pedro Sánchez. Pero “a día de hoy” no tiene apoyos superiores a Feijóo. El PSOE tiene 159 diputados de su lado, incluidos Sumar, Bildu y BNG; el PP cuenta con 172, con Vox, Coalición Canaria y Unión del Pueblo Navarro.
4. Llegará la ocasión de Sánchez, pero antes corresponde ese “a día de hoy” y explorar el apartado 3 del artículo 99 de la Constitución: “Si don Alberto Núñez Feijóo obtiene la confianza de la Cámara, será nombrado Presidente del Gobierno”. Como no ocurrirá, entonces, pasaremos al apartado 4: “De no obtener la confianza de la Cámara, Su Majestad el Rey tramitará sucesivas propuestas”. Sánchez, sí, en ese momento. No es nada personal, parecen susurrar desde Zarzuela a Moncloa, es la institucionalidad y la defensa constitucional de cada punto de cada artículo. Hasta minutos antes de la decisión, el presidente en funciones exigió que el Rey se basase en hipótesis, razonables, matemáticas, con el fundamento de la última votación para Francina Armengol. De actuar así, Felipe VI habría tomado una decisión política, habría hecho un cálculo. En lugar de eso, “a día de hoy”. Cartas sobre la mesa.
5. Porque de lo hipotético también formaba parte que Sánchez no prosperase en un primer turno. ¿Tendría sentido volver en ese caso a Feijóo? No. Y de lo hipotético también forma parte que no haya ningún candidato que acabe recibiendo la confianza de la Cámara. Y en ese caso, cierra el Rey su comunicado, “procedería, en los términos previstos en el apartado 5 del artículo 99 de la Constitución, a la disolución de las Cámaras y a la convocatoria de nuevas elecciones”. Sánchez y Feijóo pasarán; también Felipe VI tendrá su sucesión, pero todos los que sigan heredan este comunicado: 10 párrafos, 472 palabras, 2.581 caracteres para nunca más perderse.
La Constitución de 1978 incluyó la Monarquía sin grandes desarrollos, en un intento de esquivar el pretérito republicano. A Juan Carlos I se le blindó, pese a su origen, haciéndolo indivisible de la democracia. Constitución y Monarquía se votaron como un pack. Hasta el PCE tuvo que aceptar. En los 45 años posteriores, nunca se ha encontrado el momento de ese abordaje legislativo mayor que demandan para la Monarquía los defensores sinceros de la Corona. Este martes, Zarzuela llenó décadas de vacío con el poder de la “costumbre”. Dice el artículo 1 del Código Civil: “Las fuentes del ordenamiento jurídico español son la ley, la costumbre y los principios generales del derecho”
6. El comunicado deja una última enseñanza. Artículo 56 de la Constitución: “El Rey es el Jefe del Estado, símbolo de su unidad y permanencia, arbitra y modera el funcionamiento regular de las instituciones”. ¿Qué es “arbitrar” y “moderar”? Esa duda ha llenado miles de horas y páginas. Hoy sabemos también algo más de ese aspecto no desarrollado legislativamente desde 1978. Tras la primera ronda de consultas y ante la falta de un candidato ya incuestionable, Felipe VI podría haber decretado vacante el encargo, remitiéndose a una nueva ronda de consultas. Podría, igualmente, haber calibrado la existencia de 178 vetos a Feijóo que anticipan su fracaso. Pero posponer el proceso de investidura implica bloquearla; supondría retener la política en palacio y hacer política. Podrá repetir la ronda después de una primera investidura fallida, pero, de inicio -sirva el tópico- pone en marcha el reloj. Eso es “arbitrar” y “moderar”. El Rey activa la política, fundamentado en la ley y enriqueciendo la “costumbre”. Sólo eso le compete. El libre albedrío queda para el resto.
La secretaria general del Partido Popular, Cuca Gamarra, el coordinador general del PP, Elías Bendodo, y el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo (Eduardo Parra – Europa Press)
El PP pide tiempo para negociar y no descarta a los independentistas de la ronda de negociaciones
Los ‘populares’ incluirán a Junts, a ERC y al BNG en la ronda de negociaciones que dará comienzo el lunes. La única formación que no está invitada es EH Bildu
NotMid 23/08/2023
El Partido Popular está rodeado de interrogantes este martes, después de que el rey Felipe VI haya encargado a Alberto Núñez Feijóo ir a la investidura. Varios dirigentes del Partido Popular han salido desde primera hora de la mañana a explicar en los medios de comunicación la estrategia que tiene el PP para enfrentarse a una investidura que se espera fallida por falta de apoyos. Según han indicado, pretenden hablar con todas las fuerzas, descartando únicamente a EH Bildu, para que les permitan gobernar en solitario.
“Son 172 (escaños) contra 151 de Sánchez. Se abre un proceso ahora y el PP puede hablar con los grupos”, ha señalado el coordinador del PP, Elías Bendodo, en una entrevista en la Cadena SER. Para lograrlo, el PP pide más tiempo.
Mientras Bendodo ha reconocido que ve complicado dialogar con Junts para una investidura porque Puigdemont se sitúa “fuera de la Constitución”, otros miembros de la cúpula del PP, como Esteban González Pons, Cuca Gamarra o Borja Sémper no han descartado el diálogo con las fuerzas independentistas, incluyendo a Junts.
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Pons y Gamarra han sido claros al afirmar que hablarán “con todos, menos con Bildu”, aunque Pons ha reconocido que un gobierno con Vox y con Junts es “imposible”. “El PP se mueve en el marco de la Constitución, vamos a escuchar las pretensiones de todos, pero tenemos límites constitucionales”, ha apuntado. El PP no termina de ser preciso con las negociaciones que comenzarán el próximos lunes: por un lado, no descarta que Junts se siente a la mesa, pero a la vez lo enmarca fuera de la Constitución.
Feijóo llamará la próxima semana a los diferentes portavoces de los grupos, que ya estarán constituidos, con el fin de intentar sacar adelante la investidura del PP. Reconocen que lograr será “dificilísimo” porque el PP no está dispuesto “a cualquier cosa por gobernar”. Con todo, dará un paso más y hablará con los partidos que no son sus “socios naturales” sino que están “pasada la raya del hemiciclo”, empezando por el PSOE, a quienes les tienden la mano para ponerse de acuerdo.
“Vamos a hablar con todo el mundo, no vamos a estar en la investidura como un trámite insustancial ni publicitario, sino con todas las de la ley”, ha señalado Pons, que, como el resto de su partido, no quiere que la investidura se siga percibiendo como fallida, por lo que el diálogo con los grupos es su tabla de salvación. El único que ha hablado de que esta investidura también merecería la pena como “apelación política” ha sido Borja Sémper en una entrevista en EsRadio.
El PP también cree que volver a las urnas puede ser preferible para los españoles, por encima de un gobierno con “Junts, Bildu, el referéndum y la amnistía”. Aunque lo más razonable, a su juicio, es que el PP y el PSOE se pusieran de acuerdo, por lo que ofrecerán, en primer lugar, un acuerdo a los socialistas.
El PP pide tiempo a Armengol
Conscientes de que está en manos de la presidenta del Congreso, Francina Armengol, comunicar la fecha de la investidura, el PP reclama un tiempo “razonable” para negociar con el resto de grupos. “Si consideramos el intento de investidura como un trámite, lo podemos hacer mañana y liquidamos, hacemos los discursos y pasamos a lo que les interesa a los socialistas (…) Si nos tomamos en serio la investidura, aunque no consigamos el objetivo, hay que dar un tiempo razonable”, ha argumentado el vicesecretario institucional del partido.
Gamarra también ha rechazado las “prisas” y ha abogado por “optar por lo correcto”. “Debe tomarse el tiempo que sea necesario para llevar a cabo las rondas. Feijóo ya dijo que empezaría el lunes”, ha asegurado.
La presidenta del Congreso, Francina Armengol, junto al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez (EFE/Juan Carlos Hidalgo)
El PSOE se prepara para una investidura de Feijóo a la espera de lo que decida el rey
Los socialistas ven en esta posibilidad una nueva ocasión para que el líder popular “se de cuenta de la realidad que le rodea”, lo que sería su “tercer tropiezo”
NotMid 22/08/2023
En el PSOE ya se asume la posibilidad de que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, sea el primero que se someta a un debate de investidura, aunque todavía a estas alturas sea solo eso, una posibilidad. Felipe VI termina este martes la primera ronda de contactos recibiendo a Santiago Abascal, al secretario general socialista, Pedro Sánchez, y al candidato popular, por lo que esta misma tarde ya podrá conocerse su decisión en torno a una propuesta de investidura.
El escenario es incierto, pero a medida que se acerca el momento de deshojar la margarita, la idea de que Feijóo sea el elegido tras esta primera ronda para recibir este ofrecimiento cobra cada vez más fuerza. No hay nada claro. De hecho, más allá de decidir si opta por Feijóo o Sánchez, dos candidatos que han mostrado públicamente su intención de ir a una investidura, habría una tercera opción: emplazar a los partidos a una nueva ronda de consultas.
Así lo deslizó este lunes el portavoz del PNV, Aitor Esteban, horas antes de encontrarse con el jefe del Estado en la Zarzuela. A su entender, para tener “un conocimiento más profundo de dónde se podría llegar, de cómo está la situación y si habría posibilidades reales de una investidura de alguien, quizá debería esperar y hacer otra nueva ronda”.
En cualquier caso, desde Ferraz ya se ponen en la situación de que el rey se decante por el candidato que mayor representación tiene en el Congreso, es decir, por el líder de la primera fuerza, aunque este no disponga de los apoyos necesarios para ser investido. “La costumbre hace la ley en España”, recuerdan fuentes populares para defender que Feijóo sea el candidato a la Presidencia del Gobierno.
El PSOE se jacta de no presionar al rey
Al cierre de esta edición, Feijóo se reunirá esta tarde con Felipe VI con solo 139 apoyos asegurados, ya que Vox dejó en el aire su apoyo al líder popular a la espera de este muestre sus intenciones con Abascal. Con estos números, el PSOE vaticina un “tercer tropiezo” del líder popular si finalmente se somete a un pleno de investidura tras el traspié por el resultado del 23-J (pese a ser el partido más votado, quedó lejos de una mayoría por sí solo) y la votación de la Mesa del Congreso. “No seremos nosotros los que le quitemos esa idea”, afirman fuentes de Ferraz.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el rey Felipe VI durante un acto conmemorativo. (A. Pérez Meca/Europa Press)
En este sentido, aunque el PSOE insiste en defender que “el único candidato” capaz de armar una mayoría es Sánchez, confirman que no pondrán trabas a una eventual investidura de Feijóo para despojar al monarca de la presión que, a su entender, ha ejercido el PP “a diario”. “Lo que decida el jefe del Estado siempre estará bien”, remachan estas fuentes, que enmarcan dicha decisión en la “naturalidad institucional en esta cuestión”.
A pesar de que el mensaje más repetido en los últimos días por los socialistas estaba encaminado a pujar por ser los primeros en esta carrera (tratando de echar por tierra la idea de que Feijóo optase a una investidura), conscientes del contexto que enmarca esta inédita ronda de contactos con dos candidatos posibles, desde el PSOE se rearman por si el rey opta finalmente por Feijóo: “Nosotros no estamos en una competición con el PP para ver quién va primero a la investidura”, zanjan estas voces.
Yolanda Díaz también muestra su respeto a la decisión del rey
De igual forma, en Sumar también adelantan el respeto “escrupuloso” a la decisión del rey en torno a esta cuestión, no como “otras formaciones políticas”, en referencia a los populares. Su líder, Yolanda Díaz, trasladó en su reunión con el rey el apoyo de los 31 diputados a Pedro Sánchez para conformar un nuevo gobierno de coalición progresista, avanzando que su candidatura visibiliza una posibilidad “real” de mantener la mayoría que se vio en la conformación de la Mesa del Congreso, aunque advirtió de que las negociaciones serán “complicadas”. Enfrente, Feijóo ha demostrado estar “más solo que nunca y aislado”, “lo que se materializa en la imposibilidad de conformar gobierno”.
Una vez celebradas estas reuniones, y presentada la propuesta para la Presidencia del Gobierno por parte del monarca a través de la presidenta del Congreso, para lo que la Constitución no establece ningún plazo máximo, la socialista Francina Armengol fijaría la fecha para celebrar la sesión de investidura, aunque normalmente se suele consensuar con el candidato.
Diversas fuentes parlamentarias coinciden en señalar a este medio que, en caso de que el rey encomiende este martes a Feijóo dicha responsabilidad, la sesión de investidura se podría convocar para la próxima semana, activando el llamado reloj electoral. De modo que, “si transcurrido el plazo de dos meses, a partir de la primera votación de investidura, ningún candidato hubiere obtenido la confianza del Congreso, el rey disolverá ambas Cámaras y convocará nuevas elecciones con el refrendo del Presidente del Congreso”, tal como recoge el artículo 99 de la Carta Magna.
Esta cuenta atrás acotaría los plazos para la negociación entre los diferentes grupos de cara a una segunda sesión de investidura con Sánchez como candidato. Por otro lado, si el rey finalmente no opta por ningún candidato tras esta primera ronda, el monarca podrá volver a convocar a las diferentes fuerzas políticas a una segunda ronda de consultas.
Sánchez acepta que Feijóo pueda intentar una investidura seguro de que será “fallida”: “Nosotros necesitamos tiempo”
El presidente en funciones no entrará “en una guerra” con el PP por ir a una investidura porque cree que una derrota del gallego refuerza su proyecto
NotMid 22/08/2023
Si tuvieran que elegir, la preferencia en el PSOE y el Gobierno es la de contar con el mayor margen posible para lograr armar una mayoría con la que poder investir a Pedro Sánchez como presidente, que pasa por convencer a los independentistas vascos y catalanes. Pero ante la pretensión del PP de apretar el botón del tiempo, aceptando el encargo de lograr una mayoría si el Rey así se lo encarga hoy a Alberto Núñez Feijóo, Ferraz y Moncloa se echan ahora a un lado. «No estamos en una guerra con Feijóo para ir primeros», señalan fuentes socialistas. «Lo que decida el jefe del Estado está bien». En el equipo de Sánchez ya visualizan, y asumen, una probable investidura, «fallida» aclaran, del líder del Partido Popular. Algo que incluso no ven con malos ojos porque, entienden, sería un escenario que jugaría a su favor.
Los estrategas de Sánchez ven en las opciones que hay sobre la mesa un win-win para ellos. Esto es: si el Rey decide hoy que Feijóo se someta a una investidura entienden que se evidenciará la falta de apoyos y de alternativa por parte del PP. Y si, en cambio, el Rey opta por Sánchez, tratarían de consolidar la mayoría absoluta que ya les permitió controlar la presidencia del Congreso. «El escenario es bueno», admiten fuentes socialistas. «Por eso no vamos a entrar a rebajarnos a presionar al jefe del Estado» como, consideran, está haciendo el PP. «No vamos a hacer lo del PP. No estamos en eso. No una hay competición entre Sánchez y Feijóo para ver quien va primero. Feijóo está pidiendo ir primero, nosotros lo que diga el jefe del Estado».
El planteamiento pasa no por trasladar la sensación de que se quiere influir o condicionar la decisión del Rey, por muy claro que ellos tengan que sólo es posible una investidura de Sánchez. El propio candidato socialista ya lo verbalizó hace una semana en un discurso ante sus diputados y senadores: «No es la hora, nunca lo ha sido, ni de presiones al Jefe del Estado, ni de cábalas mágicas, esta es la hora de la democracia parlamentaria. Vamos a pedir a los que presumen de constitucionalismo que respeten el artículo 99 de nuestra Constitución».
Es verdad que en el equipo de Sánchez saben que requieren de tiempo para armar esa mayoría que reúna a partidos como el PNV, Bildu, ERC y Junts. Y querrían ese tiempo. Porque ahora mismo no tienen los apoyos totalmente amarrados. Sí encauzados, creen, pero no garantizados. «Las negociaciones tienen sus tiempos, su liturgia y necesitan de esos tiempos y diferentes fases para no descarrilar», exponen quienes están en los entresijos de las negociaciones. Trasladan respeto máximo a la decisión que pueda adoptar el jefe del Estado, pero creen que las prisas que muestra el PP porque se le encargue a ellos no deben ser un condicionante.
«El tiempo no debe ser un factor para hacer las cosas mal», exponen los socialistas. «El factor tiempo no tiene que precipitar que se hagan las cosas mal. Esta prisa que está metiendo el PP es impostada», añaden. Los interlocutores de este diario ven cualquier escenario posible, pero la preferencia es la cautela: «Hay un gobierno que aunque está en funciones está gobernando, lo que hace falta es que la mayoría que han dado las urnas se cristalice en una mayoría en el parlamento que posibilite una investidura a un presidente».
«Esto hay que tomarlo con muchísima tranquilidad, dejar que su majestad el Rey se tome su tiempo, haga las correspondientes entrevistas y ver cuál es la decisión final que toma. Si finalmente es Núñez Feijóo, él sabe que no tiene los apoyos, pero hay que darle normalidad y la normalidad democrática es seguir los pasos, los tiempos, las consultas del Rey», ahondó ayer Margarita Robles, ministra de Defensa. «No hay prisa. El Gobierno en funciones sigue trabajando y sigue trabajando bien. Desde el día 17 todo el mundo sabe quién tiene las mayorías y quién no las tiene».
Pese a que públicamente los socialistas han llegado a calificar de «ridículo» el «empeño» de Feijóo de ir a una investidura, lo cierto es que ahora no se ve con malos ojos que Feijóo se someta al Congreso y se considera como un mal menor. Una oportunidad, incluso. «Feijóo necesita tres estacazos para darse cuenta de lo que ha pasado tras el 23 de julio: el 23-J, la constitución de las Cortes y una investidura fallida. Él sabrá», relatan en alusión a que el resultado del PP no cumplió las expectativas, no lograron presidir el Congreso y que Feijóo no podrá ser investido presidente.
El respeto a la decisión del Rey no quita que en el PSOE estén convencidos que «no hay dos mayorías sino que solo hay una viable». La suya con los independentistas vascos y catalanes y con el partido del prófugo Carles Puigdemont como llave de gobernabilidad ahora mismo. «Logrando el apoyo de Vox, UPN y Coalición Canaria, Feijóo ya tenía todo eso la noche del 23-J. No ha sumado un solo voto desde entonces, no ha tenido una votación que demuestre que es capaz de aglutinar una mayoría en cualquier momento», diseccionan desde la cúpula socialista.
«A lo mejor Feijóo necesita de un tercer tropiezo para darse cuenta de en qué situación está», insisten desde el PSOE, donde creen que una investidura fallida podría poner en tela de juicio el liderazgo del gallego en el PP. Su visión es que Feijóo tiene prisa por someterse al veredicto del Congreso para «tapar que tiene problemas políticos en el partido».
En caso de que el Rey optase porque sea Feijóo quien lidere este proceso, y su investidura fuera fallida como parece apuntarse, sí se pondría en marcha el reloj para convocar nuevas elecciones. Dos meses a contar desde que se produzca el rechazo de la Cámara. Entonces podría haber otra ronda de consultas si hay un candidato que pueda reunir una mayoría. Pedro Sánchez aguardaría, por tanto, a la investidura fallida de Feijóo para avanzar en las negociaciones con el PNV, Bildu, ERC y Junts con el propósito de atar sus apoyos. El objetivo del presidente del Gobierno en funciones es exhibir ese mayoría de 178 diputados que le permitió alzarse con la presidencia del Congreso. Y sin descartar aún a Coalición Canaria.
Cristina Valido, la única diputada de esta formación, visitó este lunes La Zarzuela para reunirse con el Rey. Reiteró que apoyará la investidura de Feijóo pero puso precio para respaldar también la de Sánchez si éste cumple los compromisos presupuestarios pactados el año pasado y asume otros nuevos sobre la «agenda canaria».
Los canarios se quejan de que el Gobierno no ha iniciado el calendario de transferencias de fondos del convenio de carreteras (210 millones de euros), ayudas al transporte de mercancías (84,28 millones), gratuidad en guaguas y tranvía (81 millones), plan contra la pobreza (30 millones) y gestión del agua en potabilizadoras (8,5 millones) y desaladoras (8). Más 100 millones para La Palma. Todos «compromisos en los Presupuestos del Estado» y por lo que Coalición Canaria apoyó las Cuentas Públicas del Ejecutivo para 2023.
Fuentes de Hacienda consultadas por este diario explicaron que si está presupuestado, es una exigencia asumible y a la que pueden dar respuesta.
González Pons con Núñez Feijóo. / JAVI MARTINEZ
El PNV considera “precipitada” la ronda de contactos con el Rey: “Con el PSOE no hemos tenido ni una sola reunión”
El PP cree que “probablemente” llegará a la reunión con Felipe VI con más apoyos a la investidura que Sánchez
NotMid 21/08/2023
En el PP no hay plan b a intentar la investidura de Alberto Núñez Feijóo aunque a priori tendría más votos en contra de su nombramiento que a favor. “Este partido no ha terminado, le quedan muchos minutos y hay que jugarlos todos”, ha descrito este lunes el vicesecretario de Institucional de la formación, Esteban González Pons, en una entrevista en la Cadena Cope haciendo uso de un símil deportivo acorde con el tema de actualidad del día.
Los cálculos que hacen en Génova es que el ganador de las elecciones “probablemente” llegará con más apoyos que Pedro Sánchez a la ronda de consultas con el Rey, ya que el aspirante a la reelección como presidente del Gobierno “de momento no cuenta ni con el apoyo explícito del PNV, ni de Junts, ni de ERC”: “Cuenta con el de Bildu, pero porque entre Bildu y el PSOE se ha producido una mimetización en los últimos años que a veces cuesta distinguir a uno del otro”.
El propio presidente del PNV, Aitor Esteban, ha confirmado en otra entrevista en la Ser que su partido aún no han teneido ningún contacto con la dirección de Ferraz. “Con el PSOE no hemos empezado a hablar, no hemos tenido ni una sola reunión y creo que el resto del arco parlamentario tampoco”, ha señalado calificando, a su vez, de “precipitadas” las reuniones de Felipe VI con los partidos representados en el Congreso.
“Yo creo que el Rey debería ofrecer la investidura primero al partido que tiene más votos y cumplir con los procedimientos de la democracia, pero si el Rey adopta otra decisión el PP la va a acatar y punto final”, ha subrayado, asimismo, el vicesecretario de los populares. “Apuremos la copa hasta el final (…). Vamos a intentar que alguien en España sea lo suficientemente sensato como para impedir que se produzca lo que se puede producir”, ha añadido en un guiño a los nacionalistas vascos.
En este sentido, González Pons ha advertido que con los apoyos que podría recabar Sánchez para continuar en el Gobierno se producirá “un Frankenstein plus”: “Nuestra nación puede acabar desmontada y vendida por piezas (…). Cómo nos hemos ido acostumbrando a eso que ya ni siquiera causan escándalo las cesiones a partidos que lo que llevan en sus programas es la disolución de España”.
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, el pasado jueves, en el Congreso. / AP
Moncloa ve “mucho más cerca” la investidura de Sánchez, pero advierte a Junts de que no permitirá una amnistía “total”
NotMid 21/08/2023
«Lo más difícil ya está hecho». En el Gobierno en funciones creen que el jueves dieron un paso de gigante hacia la investidura de Pedro Sánchez. No lo está todo, ni mucho menos, coinciden varias fuentes gubernamentales consultadas, pero sí es «muy probable» volver a entenderse con los correligionarios de Carles Puigdemont para lograr la mayoría absoluta del Congreso si Felipe VI designa al secretario general del PSOE candidato a la investidura. Eso no podrá pasar, hoy por hoy, pero sí «avanzar» de manera más rápida hacia la «solución definitiva del problema».
Cuando dicen que «lo más difícil ya está hecho», en La Moncloa se refieren a la recuperación de los cauces negociadores con Junts per Catalunya, con el que el PSOE no había tenido apenas interlocución en los últimos meses. Que los de Puigdemont votasen a favor de Francina Armengol indica que están dispuestos a jugar de nuevo con las reglas del Estado español. Y también denota que tienen más incentivos para el pacto que para romper la baraja. Porque si se repiten las elecciones y se vuelven a repartir cartas, es imposible que les toque una mano con mayor influencia. Todo depende de ellos: «O repetición o Pedro presidente, no hay más», resume un ministro en funciones.
Los dirigentes gubernamentales consultados coinciden en que el Ejecutivo no puede darle a Carles Puigdemont todo lo que pide. Lanzar una amnistía general no está «sobre la mesa». Su encaje sería «muy difícil», aseguran. Por eso, en ningún caso se pueden comprometer a un enjuague «total» de los hechos ilegales del independentismo catalán desde 2013 a 2017. Porque así como el indulto implica el perdón de la pena, la amnistía permite la exención de la responsabilidad criminal de las penas interpuestas y, por tanto, la inexistencia del delito. Es decir: borrón y cuenta nueva.
Como la Constitución impide los indultos generalizados, se buscará otra «fórmula» para despenalizar buena parte del procés, pero siempre que no sea una medida «de máximos», insisten en el ala socialista del Ejecutivo. Los contactos con ERC y Junts han comenzado. De hecho, los negociadores del PSOE ya trataron estos temas durante las tres semanas de negociaciones que han desembocado en el acuerdo para el Congreso. Pero no hay nada decidido a futuro ni tiene por qué haberlo antes de la investidura, apuntan en el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Sin embargo, ERC y Junts quieren un compromiso por escrito con la amnistía. La diputada republicana Teresa Jordà ya recordó que la amnistía es una «línea roja». Y deberá negociarse directamente con el ex presidente catalán fugado en Bélgica, como señaló el diputado de Junts Isidre Gavín.
«La investidura está mucho más cerca», pero no se puede dar por hecha, ni mucho menos, asegura un dirigente del entorno de Sánchez. «No habrá problema en ponernos de acuerdo [con Junts] para evitar un Gobierno con la ultraderecha», pero «será complicado», añade una ministra en funciones.
Fuentes de Sumar coinciden en que «queda mucho por negociar», pero son bastante más optimistas que los socialistas. E inciden en que hay que «dejar esa etapa atrás», en referencia a la «judicialización del conflicto político catalán». Ya en 2021, Unidas Podemos apoyó el intento de ERC y Junts de tramitar una ley de Amnistía en el Congreso. Lo frenó el PSOE, junto al PP y Vox. En el equipo de Yolanda Díaz lanzan un mensaje a los independentistas: sólo votando con «la coalición progresista» se frena a Vox.
Para las fuentes de Moncloa consultadas, la clave de la negociación será que Junts ahora sí está dispuesto a debatir en términos utilitaristas (ahí ven un resquicio de la herencia convergente) y, aunque pidan cosas imposibles» como el referéndum de autodeterminación -que las fuentes del PSOE rechazan de plano-, no se plantean como líneas rojas definitivas. «Le damos mucha importancia» al paso dado por la facción irredentista del independentismo, añaden.
«Junts pasa de ser un partido casi antisistema a un acuerdo que implica colaborar con la estabilidad del Estado», se ufanaban el jueves los socialistas. Y eso después de un periodo sin apenas interlocución con la cúpula que capitanea Carles Puigdemont. «No teníamos prácticamente ningún puente en Junts», reconocieron el jueves en Ferraz, como ya publicó este diario.
«Teníamos que hacerlos pasar de la negativa total a un acuerdo asumible», inciden. ¿Por qué? Porque una vez que Junts ya ha dado el paso de dejar de situarse fuera del perímetro, y por unas contrapartidas que el PSOE ve «asumibles», será menos difícil convencerlo de que apoye una investidura de Pedro Sánchez. No será fácil en ningún caso, pero en Ferraz confían en atarla.
De hecho, hasta apenas 72 horas de la votación crucial -como adelantó EL MUNDO- los negociadores del PSOE no llegaron al convencimiento íntimo de que estaban en condiciones de encarrilar la mayoría suficiente: «Podemos lograrlo. Van en serio». Y ahora añaden: «Si lo planificamos así, no nos sale mejor». Pero ventean otra negociación dura, «no apta para cardíacos».
Para Moncloa, el aspecto fundamental de las negociaciones fue lograr que Junts per Catalunya cruzara esa frontera y pasara de situarse al margen de cualquier ecuación de la política española a conformar una mayoría heterogénea en torno a dos ideas fundamentales. La primera, ahondar en la confección de una España «plurinacional» y más descentralizada. La segunda, un cordón sanitario a cualquier alternativa que implique, ya sea de manera activa o pasiva, a Vox.
El principal pegamento de los 178 diputados que apoyaron a Francina Armengol en la Cámara Baja es su oposición frontal a una España «que retroceda al pasado», en palabras de un ministro que analiza en conversación con este diario la jugada de la nueva legislatura. «Estas Cortes tienen más diputados conservadores que progresistas», subraya. Se refiere a que la suma de PP, Vox, PNV, UPN, CC y Junts totaliza 184 de los 350 escaños de la Cámara. Ocho por encima de la mayoría absoluta.
Y aun así -añaden las fuentes gubernamentales-, el PP no les ha hecho ninguna oferta seductora a los nacionalistas de derechas, «como Aznar en su día». Sólo convenció a Coalición Canaria y a UPN. En el equipo de Pedro Sánchez esperaban una dura competencia por el voto del PNV, incluso por el de Junts. Pero al final sus temores no se materializaron. «Y no sólo eso, han tratado a su socio, Vox, con una soberbia tremenda», por dejarlo fuera de la Mesa de control de la Cámara Baja, insisten en el Gobierno.
Con los votos de PNV y Junts en el esportón -por ahora- en puridad es más correcto hablar de «bloque de Sánchez» que de «bloque progresista», ya que en La Moncloa consideran que han trascendido el eje izquierda-derecha y que el que opera ahora es el eje de «la España del pasado o la España del futuro» . En ese punto es en el que enmarcan la oferta para que en el Congreso se puedan utilizar las lenguas cooficiales -gallego, euskera y catalán-, así como la petición para incluirlas en las instituciones comunitarias.
En todo caso, los socialistas van a seguir insistiendo en la vía canaria, por si Junts no cede esta vez. En ese caso hipotético, el voto de la diputada de Coalición Canaria, Cristina Valido, sería la clave.
Miriam Nogueras en el Congreso – JAVI MARTINEZ
Junts enfría la investidura de Pedro Sánchez y presiona ahora con el referéndum
Miriam Nogueras desvincula el acuerdo de la Mesa de la posible presidencia del candidato socialista
NotMid 20/08/2023
Junts Per Catalunya quiere más. Tras el acuerdo para votar a favor de la diputada del PSOE Francina Armengol como presidenta de la Mesa del Congreso, en el que arrancó un compromiso de los socialistas para explorar una Ley de Amnistía respecto al proceso independentista, el partido de Carles Puigdemont quiere aprovechar estas concesiones para arrancar un referéndum de autodeterminación para Cataluña.
La portavoz de Junts en el Congreso, Miriam Nogueras, dejó claro que todavía queda mucho por negociarse y que su partido será “muy escrupulosos” sobre posibles acuerdos relacionados tanto con la amnistía como con el referéndum. ERC mantiene que se deben explorar fórmulas dentro de la Constitución para esta votación acordada mientras que JxCat no fue nunca tan explícito. Sin embargo, al intentar buscar un acuerdo es necesario que la consulta sobre el futuro de Cataluña se adapte a la Carta Magna.
Por el momento los nacionalistas creen que están en la senda adecuada para conseguir sus objetivos políticos. Nogueras desvinculó el acuerdo de su partido con el PSOE para votar a favor de que Francina Armengol fuera presidenta del Congreso de las conversaciones para investir a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, pese a que reconoció en Catalunya Ràdio que este diálogo “cambia mucho el panorama” de los últimos cuatro años. “Lo que pasó en la Mesa es lo que ha pasado en la Mesa y a partir de ahora veremos qué pasa y si el partido socialista se mueve o no se mueve”, indicó
Sin embargo, dejó claro que necesitan cobrar “por avanzado” cualquier tipo de acuerdo con el PSOE como hicieron con las medidas acordadas el pasado jueves como el uso del catalán en el Congreso, su reconocimiento como lengua oficial de la Unión Europea (UE), la creación de dos comisiones de investigación, una sobre el 17-A y otra sobre el espionaje al independentismo, y avanzar en la desjudicialización del conflicto político catalán que para Junts pasa por una Ley de Amnistía. Ahora, Junts quiere añadir el referéndum.
También Carles Pugdemont usó, como es habitual en él, las redes sociales para lanzar un críptico mensaje a las reacciones al acuerdo de Junts con los socialistas para la Mesa del Congreso y a los acuerdos para que el catalán sea considerado lengua oficial en Europa. “El sistema político y mediático español continúa con el ancho de vía ibérico, por así decirlo. Aún no han entendido que para ir por el mundo, o cambian de tren en la estación de Portbou y así pueden circular por toda Europa, o cogen la alta velocidad y atraviesan el Pertús a través de un túnel tan costoso como infrautilizado. El viaje es de subida (y sube también), no de bajada. De todas formas, si lo que quieren es quedarse como están no es necesario que salgan de casa”, indicó.
Francina Armengol, presidenta del Congreso, ante el presidente del Gobierno en funciones Pedro Sánchez / JAVI MARTINEZ
El PSOE deberá negociar una amnistía ‘a la carta’ desde 2013 para la investidura de Sánchez
Los partidos soberanistas pedían en 2021 la exoneración desde 10 años atrás, dejar sin efecto la extradición y suprimir toda las acusaciones de terrorismo a los CDR, así como la prevaricación o malversación del 9-N y el 1-O
NotMid 19/08/2023
Es una “línea roja” para apoyar la investidura como presidente del Gobierno del líder del PSOE Pedro Sánchez, tal y como ayer afirmó la diputada de ERC, Teresa Jordà, y deberá negociarse directamente con el ex presidente catalán fugado en Bélgica Carles Puigdemont, como señaló el diputado de Junts Isidre Gavín. Concretar una Ley de Amnistía se ha convertido en la principal exigencia de los partidos independentistas para garantizar los votos a los socialistas después de que formara parte de los puntos específicos para que Francina Armengol consiguiera la presidencia de la Mesa del Congreso.
Lo que está claro es que el PSOE deberá cambiar el sentido de su voto de marzo de 2021 cuando la Mesa del Congreso de los Diputados rechazó, gracias a socialistas, PP y Vox, la propuesta de Junts, ERC, PDeCAT y la CUP, entonces con representación parlamentaria, para tramitar una Ley de Amnistía y que se debatiera en la Cámara. Unidas Podemos, que era socio de gobierno del PSOE, apoyó que el texto para que siguiera con su tramitación. La Mesa consideró que la normativa era inconstitucional.
El texto presentado hace dos años por los independentistas sería el punto de inicio de la Ley de Amnistía que se quiere consensuar con el Gobierno, según fuentes políticas, aunque el primer paso es presentar un documento que supere el trámite de la Mesa para que pueda ser debatido en la Cámara. Además debe adaptarse en algunos puntos ya que delitos como la sedición ya no están dentro del Código Penal desde que se hizo la primera propuesta.
Sin embargo, la propuesta instaba a exonerar todos los acusados o condenados por orden público, “entendiendo todos los que aparecen en el Título XXII del Libro del Código Penal” que también incluye los delitos de terrorismo. De esta forma, el independentismo reclama que queden libres los 12 CDR de la ‘operación judas’ procesados por la Audiencia Nacional por pertenecer presuntamente a una organización terrorista que supuestamente estaban dispuestos a usar la violencia para conseguir la secesión de Cataluña.
Las formaciones independentistas presentaron una normativa hecha a medida para acabar con todos los procesos penales, civiles y administrativos no sólo derivados del referéndum del 1-O sino también del proceso participativo del 9 de noviembre de 2014, por el que se condenó al ex presidente catalán Artur Mas y los ex consejeros Francesc Homs, Irene Rigau y Joana Ortega. Además instan a acabar con las causas derivadas de «actos de protesta en la calle» relacionados con estas dos votaciones independentistas, como la sentencia del Tribunal Supremo, que marcan todo el procés.
Se pretende una amnistía retroactiva hasta 2013 que debe aplicarse a todos los “actos de intencionalidad política, cualquiera que fuese el resultado tipificados como delitos o como conductas punibles administrativamente”. “Se entenderá por intencionalidad política cualquier hecho vinculado a la lucha democrática por la autodeterminación de Cataluña”, como la preparación, convocatoria, financiación, promoción y ejecución de la consulta del 9-N y del 1-O. Así se incluirían no sólo las condenas sino también los procesos judiciales abiertos, como el que afecta al ex presidente catalán Carles Puigdemont pero también los del Tribunal de Cuentas, como la condena de cinco millones de euros por el referéndum del 9-N, o los que tienen abiertos por el gasto público del 1-O o de la promoción exterior que hizo la Generalitat del proceso soberanista.
Los delitos a los que afectaría la amnistía serían los de prevaricación, falsedad, malversación de caudales públicos, desobediencia o revelación de secretos, por lo que quedarían exonerados los líderes independentistas que tienen causas abiertas en diversos juzgados como Puigdemont, Toni Comín y Lluís Puig, Clara Ponsatí, Anna Gabriel y los dirigentes de ERC Marta Rovira, Josep Maria Jové, y Lluís Salvadó. Aquí la Ley insta a frenar cualquier orden de busca y captura, en territorio nacional o extranjero, así como una posible extradición. Además habría 37 investigados por el Juzgado de Instrucción 13 de Barcelona por los preparativos por el 1-O y la acción exterior de la Generalitat promocionando el proceso independentista, en la que está acusado el ex consejero Raül Romeva.
Precisamente Romeva podría beneficiarse doblemente ya que fue condenado por el Supremo y luego indultado junto a Oriol Junqueras, Joaquim Forn, Jordi Turull, Dolors Bassa, Carme Forcadell, Josep Rull, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart. La Ley de Amnistía también insta a eliminar las penas de inhabilitación y que pierdan los “antecedentes” lo que afectaría también a Santiago Vila, Meritxell Borràs y Carles Mundó, los otros tres condenados por el Supremo, o la consejera Meritxell Serret, condenada por desobediencia por el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya que está pendiente de recurso.
La desobediencia no comporta penas de prisión, sólo inhabilitación para cargo público e inhabilitación para cargo público, como le ocurrió al ex presidente de la Generalitat Quim Torra, condenado dos veces, por negarse a descolgar una pancarta a favor de los líderes independentistas presos. Al ser un acto relacionado con la condena del Supremo por el 1-O también se debería amnistiarlo y devolverle las multas que tuvo que pagar por orden judicial. En este sentido, la norma remarca que se eliminarán los antecedentes penales, se retornarán finanzas o multas así como los embargos realizados dentro de estos procedimientos.
“La amnistía determina extinción de responsabilidad criminal de penas impuestas o que se puedan imponer y responsabilidades civiles”, señala la normativa que pone la presión en jueces y fiscales ya que deben ser, de oficio, los que deben ordenar en un plazo de tres meses su aplicación en cada causa. También afecta a expedientes administrativos abiertos por cualquier institución relativos al proceso independentista y que pudieron acabar en multa, ya que se las dejará sin efecto jurídico. El texto pretende amparar también a los que acusados, sancionados, investigados o condenados por “los actos de protesta en la vía pública que, con el fin de defender el mencionado referéndum o criticar las actuaciones de las autoridades gubernamentales o jurisdiccionales, hubieran sido objeto de persecución penal o administrativa a partir de la fecha de celebración del referéndum”, aunque les hayan impuesto una multa administrativa.
La propuesta de Ley presentada señalaba que “la amnistía dejará sin efecto de ningún tipo, además, los procesos constitucionales, administrativos, de extradición activa, de cooperación jurídica europea e internacional, económicos o contables y electorales, concluidos o iniciados en cada uno de estos ámbitos, relacionados con las citadas finalidades, así como a las investigaciones impulsadas en el ámbito policial, fiscal o jurisdiccional con igual finalidad”. También se incluía a los perseguidos por “actos de expresión y de opinión en prensa, imprenta, redes sociales, creaciones artísticas o cualquier otro medio de comunicación”.
Francina Armengol junto a Pedro Sánchez tras ser elegida presidenta del CongredoHidalgo / EFE
Sánchez incumplió la Ley del Gobierno en funciones para amarrar el sí de Puigdemont
El Ejecutivo pide a la UE que catalán, gallego y euskera sean lenguas oficiales en Europa. Y Armengol, sin debate previo, anuncia que ya se pueden usar las lenguas cooficiales en el Congreso
NotMid 19/0872023
Pedro Sánchez ha dejado atado su poder en la Mesa del Congreso, el órgano rector de la principal cámara legislativa, con la ayuda de los siete diputados de Junts, liderados por el fugado Carles Puigdemont, y los siete de ERC, dirigidos por el condenado por sedición y posteriormente indultado, Oriol Junqueras. El PSOE ha logrado situar en la presidencia de la Cámara Baja a Francina Armengol, reciclándola así como tercera autoridad del Estado tras ser desbancada del Gobierno balear por el PP. Además ha conseguido otros dos puestos en la Mesa que añadidos a los dos logrados por Sumar le garantizan controlar la dirección del Congreso ocupando cinco de los nueve sillones; los otros cuatro son para el PP.
Este triunfo, sin embargo, tiene un precio del que, por ahora, los socialistas sólo han emitido pagarés a futuro y sin aval. Resta el pago en efectivo, contante y sonante, que tanto Junts como ERC reclaman en un plazo inmediato so pena de no prestar sus 14 votos a una investidura de Sánchez como presidente del Gobierno.
De hecho, ninguno de los eventuales aliados del llamado bloque progresista -a excepción de PSOE y Sumar- da por hecho ya que Sánchez vaya a ser el próximo presidente. Bien al contrario: todos aseguran que la verdadera negociación comienza ahora. El recelo respecto a los compromisos que adquiere el líder socialista es muy alta tras la pasada legislatura.
De momento, ya han surgido serias dudas en relación con la promesa principal que el PSOE ha hecho a Junts: la inclusión del catalán, euskera y gallego en la lista de los idiomas oficiales -24 hasta la fecha- reconocidos en las instituciones comunitarias, para lo cual el titular en funciones de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, remitió ayer mismo, apenas un par de horas antes de que se iniciara la sesión constitutiva de las Cortes, una carta a la Presidencia del Consejo de la UE ostentada justamente por España y con copia a la secretaria general del Consejo, pidiendo la modificación del régimen lingüístico de la Unión y la inclusión de este asunto, que debería ser aprobado por unanimidad de todos los Estados miembro, en la reunión del Consejo de Asuntos Generales prevista para el próximo 19 de septiembre.
La Ley del Gobierno, en su artículo 21.3 establece que el Ejecutivo en funciones, situación en la que se encuentra actualmente el Gobierno de coalición presidido por Sánchez, «limitará su gestión al despacho ordinario de los asuntos públicos, absteniéndose de adoptar, salvo casos de urgencia debidamente acreditados o por razones de interés general cuya acreditación expresa así lo justifique, cualesquiera otras medidas».
Fuentes jurídicas y también parlamentarias contactadas por este periódico coinciden en señalar que en ningún caso puede considerarse «asunto ordinario», «urgente» o de «interés general» la petición firmada por Albares en nombre del Gobierno. Apuntan que Sánchez en su pretensión de asegurarse los votos para controlar la Mesa del Congreso ha excedido el margen que la ley otorga a un Ejecutivo en funciones, con capacidad de actuación limitada y que no puede adoptar decisiones que comprometan al futuro presidente del Gobierno que designe el Congreso y al Ejecutivo que este forme.
Y ese movimiento fue crucial. A mediodía del miércoles, Sánchez adelantó su voluntad de promover las lenguas cooficiales en Europa. Pero Junts siguió exigiendo «hechos comprobables», según la definición de Puigdemont esa misma mañana. Ayer, a primera hora, llegó la carta de Albares y entonces Puigdemont ya sí celebró: «Es un hecho, no una promesa, nunca se había hecho». 7 síes.
El segundo inconveniente con el que topa esta promesa reside en la propia UE puesto que la ampliación de las lenguas por ella consideradas oficiales implica modificar el Reglamento número 1 que regula el régimen lingüístico ampliando el ya enorme y costoso servicio de traducción e interpretación de las instituciones. Esta reforma tendría que contar con el voto de los 27 socios de la Unión.
Tampoco nadie ha sabido precisar -más allá de señalar que la ley no lo prohíbe- cuál es el fundamento preciso en el que se ha basado la nueva presidenta del Congreso, Francina Armengol, para anunciar, de acuerdo con las promesas hechas por Sánchez al independentismo, en su primera intervención pública nada más ostentar el cargo, el empleo inmediato en la Cámara de cualquiera de las lenguas cooficiales. Armengol no hizo referencia a limitación alguna pese a que para llevar a la práctica este uso sería necesario garantizar el correspondiente servicio de traducción simultánea. También en este caso hay quien cree que será necesario reformar el Reglamento del Congreso.
La primera en hacer uso práctico del anuncio de Armengol fue la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, que optó por convocar una rueda de prensa al término de la sesión constitutiva en la que sólo habló en catalán, incluso para responder a las preguntas en castellano. En su intervención dio por seguro que el catalán será lengua oficial de la UE y calificó el compromiso de Sánchez de «histórico» porque le dará «por primera vez en la historia un reconocimiento oficial internacional de máximo nivel». Aún así, recalcó que los votos de Junts en ningún caso están asegurados para apoyar una investidura de Sánchez. En este sentido afirmó que el «objetivo» de su partido es la independencia de Cataluña, algo que estará presente en la próxima negociación con el PSOE.
Igualmente suscita dudas el punto tercero del pacto alcanzado con ERC según el cual «el Estado se compromete con el fin de la represión relacionada con el 1-O contra el independentismo por las vías legales necesarias». Los republicanos afirman que esto incluye el impulso de una ley de amnistía, algo que ayer el portavoz socialista, Patxi López, quiso negar, asegurando que de lo que se trata es de «abordar políticamente» -y no judicialmente- lo que es un «problema político», en referencia al reto secesionista. «La negociación para la investidura», aventuró Gabriel Rufián, «va a ser mucho más complicada».
También vaticina dificultades el portavoz del PNV, Aitor Esteban, para quien, aunque Sánchez pueda formar gobierno, «la legislatura será muy compleja». Por su parte, la portavoz de Bildu, Mertxe Aizpurua, insistió en que «la verdadera negociación empieza ahora».
De momento, el PP ya exige a Sánchez que explique al detalle, luz y taquígrafos el contenido exacto de todo lo que ha pactado con ERC y Junts.
La versión más optimista de la jornada fue la que trasladó el socialista Patxi López para quien es evidente que sólo Sánchez está en condiciones de afrontar una investidura. López dio por hecho que tras la ruptura de la entente PP-Vox para votar la Mesa del Congreso -los de Abascal optaron por votar a su propio candidato y no apoyar a los del PP-, el líder popular Alberto Núñez Feijóo no puede asegurar al Rey que cuenta con el apoyo de 172 diputados, sino sólo con el de 139. El líder de Vox, por su parte, aseguró tener una conversación pendiente con Feijóo para comprobar si su intención sería la de formar un Gobierno de «neutralidad institucional». Abascal mantiene que tras el pacto de Sánchez con los independentistas para controlar la Mesa del Congreso, «el golpe de Estado que se fraguó en la Generalitat en 2017, se reproducirá en unos meses en La Moncloa» si Pedro Sánchez vuelve a gobernar.
El Rey iniciará el lunes 21 la ronda de consultas para la investidura y no acudirán los socios de Sánchez
El Monarca recibirá el martes a los líderes de Vox, PSOE y en último lugar, al PP, por ser éste el partido más votado
NotMid 18/08/2023
Siete partidos políticos con representación en el Congreso se preparan ya para acudir a la cita de consultas con Felipe VI la próxima semana, el lunes 21, a las 10.30 horas, y a continuación el martes 22, cuando recibirá a los líderes de Vox, PSOE y, por último, PP, por ser éste el partido más votado.
La Casa del Rey ha confirmado las fechas y los horarios de cita para cada formación. Las fuerzas dispuestas a explicar su posición al Monarca con vistas a la investidura de un candidato a la presidencia del Gobierno son PSOE, PP, Vox, Sumar, PNV, Coalición Canaria y UPN. Una vez más, los partidos independentistas optan por obviar la ronda del Monarca.
En esta ocasión, el Rey deberá enfrentarse a un nuevo dilema puesto que son dos los aspirantes a ser designados a la investidura: el popular Alberto Núñez Feijóo, ganador de las elecciones pero muy lejos de la mayoría absoluta, y el socialista Pedro Sánchez, que aspira a revalidar un Ejecutivo de coalición con Sumar y el apoyo de independentistas, nacionalistas y abertzales.
Esta mañana la presidenta del Congreso, Francina Armengol, ha informado al Rey de la constitución del Congreso y de las votaciones que se produjeron para nombrar a los miembros de la Mesa, el órgano rector de la Cámara.
Precisamente el resultado de esa votación que arrojó 178 apoyos en favor de Armengol como presidenta es en la que apoya Sánchez su argumento para ser designado candidato a la investidura y ello a pesar de que partidos como ERC, Junts, Bildu, BNG y PNV han anunciado que su respaldo a los socialistas en la formación de la Mesa no prejuzga su posición en la investidura. En medios parlamentarios, no obstante, las incógnitas respecto a esa votación se focalizan en los siete diputados de Junts, ya que se considera que todos los demás -ERC, Bildu, PNV y BNG- finalmente no pondrán excesivas dificultades a Sánchez porque a ninguno de ellos les interesa una repetición de elecciones.
PLENO DE INVESTIDURA
Desde el PSOE se argumenta además, en favor de Sánchez, que su adversario, Feijóo, en la votación de la Mesa ni siquiera logró concitar el apoyo de Vox por lo que no puede garantizar tener amarrados 172 respaldos (PP, Vox, UPN y CC).
El Rey recibirá a los partidos siguiendo un orden de menor a mayor. Feijóo, líder del partido mayoritario, será el último en acudir a la cita con Felipe VI.
El Monarca puede, al término de la ronda, designar o no a un candidato. En caso de no hacerlo por no tener claro quién pueda sacar adelante la investidura, podría convocar pasados unos días una nueva ronda. Si de los contactos sí surge una designación, no hay plazo tasado para la celebración del pleno de investidura. La fecha suele fijarse entre el candidato y la presidencia del Congreso.
Fechas y horas de la ronda de consultas
Lunes 21 de agosto:
10.30: Javier Esparza (UPN)
12.00: Cristina Valido (Coalición Canaria)
16.00 Aitor Esteban (PNV)
17.30 Yolanda Díaz (Sumar)
Martes 22 de agosto:
10.30 Santiago Abascal (Vox)
12.00 Pedro Sánchez (PSOE)
16.00 Alberto Núñez Feijóo (PP)
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo y la secretaria general de la formación, Cuca Gamarra (EFE/ Juan Carlos Hidalgo)
Feijóo y Abascal evitan dar vía libre a su ruptura para mantener la tensión hasta las consultas con el Rey
La ruptura del acuerdo para dar la presidencia del Congreso a Cuca Gamarra se produjo en conversaciones en la Cámara Baja antes del comienzo de la sesión de constitución de las Cortes
NotMid 18/08/2023
La ruptura entre el PP y Vox que se ha escenificado este miércoles en el hemiciclo del Congreso de los Diputados no es tan evidente de puertas para fuera. La clave está en la propuesta de candidato para la investidura, encargada, en último término, al rey Felipe VI. Tanto el PP y Vox pueden mantener la tensión hasta que el Rey haga la ronda de consultas.
Todo estaba previsto: a partir de las 10:00 horas los 33 diputados de Vox apoyarían la candidatura de Cuca Gamarra, del PP, para la Presidencia del Congreso. Sin embargo, los pasillos de la Cámara Baja recibieron a varios madrugadores que, entre conversación y conversación, dieron la vuelta a la tortilla: Junts y ERC llegaron a un acuerdo con el PSOE, y el PP, visto lo visto, optó por quedarse con un puesto más en la Mesa.
Fuentes de Vox señalan que, en conversaciones dentro del Congreso y antes de la sesión de constitución de las Cortes, el PP reveló a su grupo que no les darían sus apoyos para que consiguiesen un puesto en la Mesa de la Cámara Baja, lo que desbarató el acuerdo entre ambos partidos para otorgar la presidencia a Gamarra. De hecho, desde Vox señalan que ya veían venir este movimiento por parte de los populares.
Pero cuando la Mesa de Edad comenzó a llamar uno a uno, por orden alfabético, a los diputados para su votación secreta, se daba por hecho que en las papeletas que depositaban los 33 parlamentarios de Vox estaba escrito el nombre de Cuca Gamarra, aunque no era así. Esto se descubrió cuando, entre las 350 lecturas de nombres, de vez en cuando saltaba el de Ignacio Gil Lázaro, lo que evidenció una ruptura en la derecha.
El PP asegura que el apoyo se mantiene
El PP no escenificó ningún enfado por ello, de hecho, fuentes de la Dirección Nacional señalan que el objetivo era conseguir fuerza en la Mesa, y por eso decidieron quedarse con cuatro puestos y no con tres. Sobre Vox, aseguran que esa ruptura del acuerdo de la Mesa no cambia “nada” en las negociaciones con los de Abascal para una investidura, salvo, quizás, en Murcia. En este sentido, el PP da por hecho que habrá una repetición electoral en esta región, al ver lejano el acuerdo de investidura con Vox antes del 7 de septiembre. Por lo demás, el PP es contundente, “el apoyo de Vox sigue vigente salvo que digan lo contrario”, aseguran desde Génova.
Si ambos partidos aceptaran la ruptura, no cabrían más posibilidades que una investidura de Pedro Sánchez, pero ni el PP ni Vox son claros al respecto, lo que no permite cerrar en su totalidad la vía de la investidura de Feijóo. Fuentes de Vox cercanas a la negociación van más allá, e indican que la postura que tomarían en una eventual investidura de Feijóo se la comunicarán al Rey en la ronda de consultas.
Es un pacto de no agresión que beneficia a ambos. El PP no da por zanjadas sus posibilidades para que Feijóo sea propuesto por el Rey, y Vox mantiene la tensión y algo de relevancia hasta la ronda de consultas. Con todo, y aunque Vox apoye al PP en una eventual investidura, siguen sin llegar los apoyos, que se estancarían en los 172.
Esto viene respaldado por lo que ha sucedido hoy con la elección de Francina Armengol como presidenta del Congreso. Tanto Junts, como ERC, y el resto de los partidos de los que se esperaba un apoyo al PSOE, han cumplido, lo que acerca un poco más la posibilidad de que salga adelante una investidura de Pedro Sánchez.
El presidente del Gobierno en funciones y diputado socialista, Pedro Sánchez, junto a la vicepresidenta segunda en funciones y líder de Sumar, Yolanda Díaz, durante la durante la sesión constitutiva del Congreso. (EFE/Chema Moya)
PSOE y Sumar se crecen tras la victoria en la Mesa del Congreso: “Se puede armar una mayoría para la investidura”
Los 178 apoyos a Francina Armengol sitúan a Pedro Sánchez más cerca de obtener una mayoría que Alberto Núñez Feijóo
NotMid 18/08/2023
Lo que el 22 de julio parecía algo muy lejano ahora está más cerca. Y el complejo escenario que arrojó el 23-J, tras la celebración de las elecciones generales, ahora parece más desenredado. De fondo, una victoria con alto valor simbólico para muchos actores que aguardan la siguiente fase, aunque con más confianza en medio de un panorama político marcado por la incertidumbre.
En resumidas cuentas, la victoria de PSOE y Sumar en la batalla de la Mesa del Congreso da aire a estos partidos, pero también a la mayoría de formaciones dispuestas a investir a Pedro Sánchez frente a un Alberto Núñez Feijóo que constató este jueves que no es más ganador el que más tiene, sino el que es capaz de conseguir los apoyos suficientes.
Francina Armengol es ya presidenta del Congreso. Liderará un órgano de carácter progresista con la presencia de PP como único representante del bloque de la derecha. Y es que los populares dejaron a los de Santiago Abascal sin asiento en la máxima instancia de la Carrera de San Jerónimo. La socialista se impuso a la candidata popular, Cuca Gamarra, por 178 votos frente a 139.
Y estas cuentas suponen más que llevarse el premio de la Mesa del Congreso: “Se puede articular una mayoría de Gobierno”, resume una voz cercana al presidente del Gobierno y candidato a la reelección, Pedro Sánchez. Esta valoración, compartida este jueves por muchos representantes de PSOE y Sumar, es el resultado de negociaciones a contrarreloj y al filo del alambre hasta casi el momento de la votación.
Acuerdo sobre la hora
“La noche ha sido bastante larga”, dijo el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, después de anunciar un acuerdo con el PSOE para permitir la Presidencia de Francina Armengol. Una hora antes, en la Ejecutiva de Junts, su secretario general, Jordi Turull, trasladó a los suyos un principio de acuerdo con los socialistas para este fin.
Sendos acuerdos se basan en cuestiones que hasta la fecha el PSOE se había negado en anteriores legislaturas: garantizar el uso del catalán y otras lenguas oficiales en sesiones plenarias en el Congreso, constituir una comisión sobre el caso Pegasus, el espionaje que afectó presuntamente a políticos independentistas, y otra sobre los atentados de Barcelona y Cambrils, de los que este jueves 17 de agosto se cumplieron seis años.
Para allanar el camino ante estas peticiones históricas y desatascar las negociaciones, hubo un “hecho” y “no una promesa”, como dijo la portavoz de Junts, Miriam Nogueras. En concreto, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, remitió anoche una carta al Consejo de la Unión Europea (UE) para trasladar la decisión del Gobierno de incluir las “lenguas españolas distintas del castellano que gozan de estatuto oficial en España” en el régimen lingüístico de la UE, tal como había prometido Sánchez este miércoles por la mañana en el Congreso.
La diputada de Junts, Miriam Nogueras, durante la sesión constitutiva de la XV Legislatura en el Congreso. (Eduardo Parra/Europa Press)
Asimismo, la propia presidenta del Congreso se ha estrenado en el cargo anunciando que permitirá el uso del catalán, el gallego y el euskera en la Cámara Baja desde la sesión constitutiva de este jueves. A falta de que esta predisposición se concrete a través de una reforma del Reglamento, los partidos nacionalistas e independentistas de los que depende la izquierda para reeditar el Gobierno de coalición se han congratulado por este primer paso.
PSOE y Sumar superan la primera bola de partido
En cualquier caso, pese a superar la primera bola de partido, ERC, Junts, EH Bildu, PNV y el BNG, las formaciones que han respaldado este jueves a los candidatos del PSOE y Sumar en la Mesa, han lanzado un aviso a navegantes: esta votación no presupone el apoyo a Pedro Sánchez en una investidura. “No tiene nada que ver con la negociación sobre la investidura. No se moverán promesas ni voluntades políticas sin garantías de cumplimiento. Nosotros no fiamos nada”, avanzó Nogueras.
También, desde los partidos que sostienen el actual Gobierno de coalición reconocen ser conscientes de ello, asegurando que a partir de este viernes empieza una nueva fase. Ambos son conscientes de que gran parte de las negociaciones versarán sobre la resolución del conflicto político catalán, cuyas soluciones no son compartidas en el independentismo. “Para algunos”, la amnistía “no es suficiente”, señaló Rufián en relación al partido de Carles Puigdemont.
No obstante, desde el PSOE, su portavoz, Patxi López, tomó las negociaciones para la Mesa como un primer punto de partida y los acuerdos con ERC y Junts como un gesto para poner en valor la resolución de los problemas políticos a través de la política. “Quiere decir no derivar todo a la Justicia”, profundizó. En Sumar, su líder, Yolanda Díaz, insistió en dar su apoyo a explorar una ley de amnistía: “Las leyes se aprueban cuando hay mayorías”.
En este sentido, alegó que “lo importante es contar con mayorías, como hoy”. Y con esa premisa y esta constatación ante algo que parecía imposible afrontan PSOE y Sumar el difícil reto de revalidar esta mayoría para investir de nuevo a Pedro Sánchez y conformar por segunda vez un gobierno de coalición. A la espera de que el rey designe al candidato para la investidura, el líder del PSOE gana puntos para tratar de hacerse con el primer puesto en esta carrera.
Vox se vota a sí mismo y desbarata cualquier opción del PP para presidir la Mesa
Junts ha alcanzado un “principio de acuerdo” con el PSOE para “facilitar” que acceda al cargo la socialista Francina Armengol
NotMid 17/08/2023
La Ejecutiva de Junts per Catalunya, reunida desde las 8.00 horas para decidir el sentido de su voto en relación con la presidencia del Congreso, ha alcanzado un “principio de acuerdo” con el PSOE para “facilitar” que acceda al cargo la socialista Francina Armengol. Así lo ha comunicado Jordi Turull a los miembros del órgano rector del partido. No obstante, el partido no da aún por cerrado el sí definitivo ya que de los puntos propuestos para lograr el pacto aún resta uno por cerrar. De este último requisito dependería la posición final que adopten los de Puigdemont que podría ser un sí a Armengol o una abstención.
La negociación con los socialistas y las conversaciones internas en el seno de Junts podrían prolongarse hasta minutos antes de la votación.
En la sesión de hoy, que comienza a las 10 de la mañana se constituirán las Cortes y se elegirá a la nueva Mesa de la Cámara Baja. De forma interina dirigirá el pleno la llamada Mesa de Edad, presidida por la diputada de más edad, la socialista Cristina Narbona, acompañada por los dos más jóvenes, Ada Santana y Ferran Verdejo, como secretarios.
Míriam Nogueras y otros diputados de Junts, a su llegada al Hemiciclo.Juan Carlos Hidalgo / EFE
Sánchez amarra la presidencia del Congreso pactando con Junts y ERC el uso del catalán en la Cámara e impulsando una ley de amnistía
NotMid 17/08/2023
Pedro Sánchez ha conseguido amarrar un acuerdo con ERC y con Junts para situar en la presidencia del Congreso a la socialista Francina Armengol. El pacto con ambas formaciones independentistas garantiza a la ex presidenta balear ser elegida como tercera autoridad del Estado con mayoría absoluta en primera votación. No obstante, las dos formaciones catalanas han advertido que esta decisión no prejuzga la posición final que adopten a la hora de apostar por la investidura del presidente del Gobierno.
La Ejecutiva de Junts per Catalunya, reunida desde las 8.00 horas para decidir el sentido de su voto en relación con la presidencia del Congreso, anunció a primera hora un “principio de acuerdo” con el PSOE para “facilitar” que acceda al cargo Francina Armengol. Así lo comunicó Jordi Turull a los miembros del órgano rector del partido. No obstante, la fromación no daba aún por cerrado el sí definitivo ya que de los puntos propuestos para lograr el pacto aún restaba uno por cerrar. Las conversaciones y negociaciones se prolongaron hasta el último minuto.
Igualmente, antes de que diera inicio la sesi?`on de constitución del nuevo Congreso, ERC anunció haber llegado también a un pacto con el PSOE para votar a favor de la candidata socialista. El acuerdo cerrado con Esquerra es especialmente trascendente porque además de incluir el uso inmediato del catalán en el Congreso y en las relaciones entre los ciudadanos y la Administración recoge el compromiso de avanzar en la desjudicialización del “conflicto político catalán” por “las vías legales necesarias” lo que supone, en palabras de los propios diputados de ERC, impulsar incluso la tramitación y eventual aprobación de una ley de amnistía.
Por su parte, las demandas principales de Junts para permitir a la candidata del PSOE acceder a la posición de tercera autoridad del Estado pasaban por poder constituirse como grupo propio en el Congreso, algo que en principio era difícil porque no cumplían con todas las condiciones requeridas para ello. Además, el PSOE se compromete a impulsar de inmediato el uso del catalán en el Congreso así como la creación de una comisión de investigación sobre las cloacas del Estado y el espionaje sufrido a través del software Pegasus a diputados y personas relacionadas con el independentismo y probablemente otra sobre los atentados del 17 de agosto en Cataluña.
Anticipo de Alianzas
Con los siete diputados de Junts y los siete de ERC votando a favor de Francina Armengol, la diputada socialista será elegida presidenta del Congreso en primera votación por mayoría absoluta añadiendo además los votos del PSOE y Sumar, los cinco del PNV, el diputado del BNG y los seis de Bildu. Con estos cálculos el voto de Coalición Canaria es ya intrascendente.
Tradicionalmente, la votación para elegir a los miembros de la Mesa del Congreso se interpreta como un anticipo de las alianzas que se tejerán con vistas a la investidura de un presidente del Gobierno; sin embargo, en esta ocasión desde Junts y también desde ERC se lanza el mensaje de que el sentido de su voto a la hora de elegir hoy a la tercera autoridad del Estado no prejuzga el que finalmente adopten en la investidura.
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo. (Fernando Sánchez / Europa Press)
Feijóo no tiene “ninguna duda” de que el rey le encargará la investidura y acusa a Sánchez de bloqueo
El líder del PP insiste en la victoria electoral y adelanta que Felipe VI “actuará como ha hecho siempre, de acuerdo con la ley”
NotMid 17/08/2023
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado este miércoles que no tiene “ninguna duda” de que el rey Felipe VI “actuará como ha hecho siempre, de acuerdo con la ley” y “sólo al servicio de España y los españoles” a la hora de proponer a un candidato que intente formar Gobierno.
“No tengo ninguna duda de que el jefe de Estado actuará cuando llegue el momento ejerciendo sus competencias constitucionales y sólo al servicio de España y los españoles”, ha dicho. En su intervención ante los diputados y senadores del partido elegidos en las elecciones del pasado 23 de julio, Feijóo ha repasado los resultados electorales y ha asegurado que su partido ha ganado las elecciones, “aunque algunos rivales no quieran reconocerlo”.
“Hay que saber ganar y saber perder; hemos sabido ganar y otros no han sabido perder”, ha apuntado antes de subrayar su confianza en la actuación del rey. Para Feijóo, resulta claro que el presidente en funciones y candidato del PSOE, Pedro Sánchez, ha demostrado “estar preocupado” al hablar de “presión y de problemas”. “Me da la sensación de que los problemas y las dudas las tiene él”, ha asegurado.
Feijóo se refería así a la incógnita de a quién propondrá el rey para formar Gobierno: al candidato que tiene más diputados o al que tiene más posibilidades de formar Gobierno. En su intervención ante los diputados y senadores socialistas, Sánchez ha alertado al PP de que “no es momento de presiones al jefe del Estado” ni tampoco de “cábalas mágicas” para intentar la investidura. El presidente en funciones ha anunciado que va a pedir la confianza del Parlamento para conformar una “mayoría progresista”.
Gamarra. Feijóo y Maroto en la reunión del grupo parlamentario – JAVIER BARBANCHO / Agencias
Feijóo elige a Cuca Gamarra para presidir el Congreso con tantos votos asegurados como la candidata del PSOE
Asegura ante sus diputados y senadores que el PP lograría la Presidencia del Congreso si Junts se abstiene: “Tenemos 171-172 votos a favor”
NotMid 16/08/2023
Cuca Gamarra será la candidata del PP a la presidencia del Congreso. Así lo ha revelado Alberto Núñez Feijóo en su alocución ante los grupos parlamentarios populares del Congreso y el Senado. De esta manera, los ‘populares’ escenifican que darán la batalla por la Mesa del Congreso al más alto nivel. Mientras se cierran las negociaciones, Feijóo lanza con la designación de Gamarra el mensaje de que cree que puede ganar la votación.
Para ocupar vicepresidencias o secretarías en la Mesa del Congreso, Feijóo ha designado a Marta González, José Antonio Bermúdez de Castro, Carmen Navarro y Guillermo Mariscal.
En el Senado, Feijóo ha elegido a Pedro Rollán, de manera que será futuro presidente, ya que el PP tiene la mayoría absoluta de la Cámara. Lo acompañarán en la Mesa Javier Maroto, Eva Ortiz y Marimar Blanco.
Gamarra es la número dos de Feijóo, ya que ostenta la secretaría general del partido, y ocupa actualmente la portavocía de su grupo en la Cámara Baja. Ahora el presidente del partido más votado la coloca en la palestra para intentar ser la tercera autoridad del Estado “por su formación y su experiencia”. Eso sí, su nombramiento depende de lo que decida mañana jueves la ejecutiva de Junts per Catalunya, que se reúne a las 8.00, dos horas antes de que comience la sesión constitutiva de las Cortes.
Como avanzó este diario, la candidatura de Gamarra implica que el PP ve opciones de ganar la votación de la presidencia del Congreso. Diversas fuentes del partido creen que tienen bastantes posibilidades, porque creen que Junts puede romper con Pedro Sánchez. Pero en Génova acotan que el PSOE tiene más opciones que ellos, a priori. “60% ellos y 40% nosotros“.
Feijóo no ha dado por cerrado el apoyo de Coalición Canaria al PP. De hecho, lo ha incluido entre sus apoyos ya cerrados. “Tenemos comprometidos 171-172 votos a favor de nuestra investidura y para superarnos Sánchez necesita el apoyo de la extrema izquierda, la izquierda populista, los soberanistas y los independentistas”, ha explicado.
Antes de eso, Feijóo ha felicitado a los suyos por ser los dos grupos más votados, con 87 parlamentarios más entre el Congreso y el Senado. “Hemos ganado, aunque algunos digan que hemos perdido”, ha arengado a los suyos. “Hay que saber ganar y saber perder; nosotros hemos sabido ganar y hay otros que no han sabido perder”, ha insistido, entre los aplausos de sus correligionarios.
“La responsabilidad” de que los independentistas tengan importancia sólo es “del PSOE“, ha sostenido, antes de asegurar que Sánchez debería dejar de “bloquear al partido vencedor de las elecciones”. “Pase lo que pase mañana en el Congreso, el responsable es el señor Sánchez y tendrá que asumir su responsabilidad”, ha incidido. “Pasará a la Historia como el líder del bloqueo de nuestro país desde el año 2015”, ha insistido.
A su juicio, España se merece un Gobierno que no someta al país “a un desgaste institucional” y a una “parálisis” legislativa, ha dicho. “El PP ha aceptado que el mensaje de los españoles en las urnas” es “negociar y acordar con otras fuerzas” porque no tiene a tiro aún la mayoría.
“Tenemos la responsabilidad de llegar a acuerdos amplios” para una legislatura que aporte estabilidad y “vuelva a la política con mayúsculas”, ha enfatizado el líder del partido más votado.
El presidente del gobierno en funciones y líder del PSOE, Pedro Sánchez, llega para presidir la reunión del grupo parlamentario socialista en el Congreso de los Diputados en Madrid. (EFE/Juan Carlos Hidalgo)
Sánchez impulsará el uso de las lenguas cooficiales en las instituciones en la UE en un guiño a los independentistas
El presidente del Gobierno se reafirma en su decisión de intentar una nueva investidura: “No es la hora de presiones al jefe del Estado ni cábalas mágicas; es la hora de la democracia parlamentaria”
NotMid 16/08/2023
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presidido este miércoles la primera reunión interparlamentaria del PSOE de la nueva legislatura, que echa a andar este jueves con la incógnita de quién presidirá la Mesa del Congreso. Esta será sin duda la primera gran batalla que marcará el rumbo de los próximos meses. Esta decisión está en manos de Junts, que decide este jueves en una Ejecutiva al alba si apoyará a la candidata del PSOE a presidir la Cámara Baja, Francina Armengol.
A la espera de saber cómo se resolverá esta primera prueba de la legislatura, en un claro guiño a los partidos independentistas de cara a la votación de este jueves, el secretario general del PSOE ha anunciado que impulsará el uso de las lenguas cooficiales en las instituciones comunitarias “como un compromiso que voy a desplegar a lo largo de la presidencia española de la UE”, opacada por la celebración de los comicios generales del pasado 23 de julio.
Sánchez ha enmarcado esta propuesta en su intención de “trabajar por la unión, por la cohesión de España”, partiendo de la base de que las lenguas cooficiales reconocidas en la Constitución son realmente “un enorme activo de nuestra sociedad”. “España habla en castellano, en catalán, en euskera y en gallego. Y nuestro deber es consolidar espacios de representación, de uso y conocimiento de todas las lenguas de España. Desde el Gobierno lo hemos ido haciendo durante estos últimos años, por ejemplo, gracias al impulso dado con el Instituto Cervantes. Pero debemos hacer más. Podemos hacer más. Y haremos más”, ha incidido.
Sánchez ha pedido al PP que “acepte” las reglas del sistema parlamentario español, “algo tan básico y legítimo como que en España gobierna quien tenga más apoyos”. “Vamos a pedir a los que presumen de constitucionalismo que respeten el Artículo 99 de la Constitución. No es la hora de presiones al jefe del Estado ni cábalas mágicas; es la hora de la democracia parlamentaria”.
Felicita al PP y pide a Feijóo que respete el resultado de las urnas
Y es que, esta sería una oportunidad para que el candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo, decida “qué quiere ser a partir de ahora” después de comprobar que su apuesta de ir de la mano de la ultraderecha “ha fracasado”. Por ende, ha reclamado “a esos constitucionalistas de boquilla que cumplan con la Constitución o que al menos la respeten, y que por cierto pongan fin al secuestro del Poder Judicial”.
El líder del PSOE ha defendido ante los suyos que los resultados del 23 de julio, una cita en la que el PP se impuso con 137 escaños, quedando lejos de la mayoría absoluta, y en la que los socialistas mejoraron también sus previsiones, respaldan la acción del Gobierno. “La mayoría de la ciudadanía quiere consolidar los avances alcanzados durante estos últimos cuatro años y que en vez de retroceder, lo que quiere es continuar avanzando”
A partir de aquí, el PP ha demostrado “doble incapacidad”. En primer lugar, “la incapacidad para asumir la realidad política, social y territorial de España”. “Desde las elecciones, el Partido Popular vive en estado de shock. Han sido víctimas de su propia propaganda y han comprobado que se pueden amañar muchas encuestas, como han hecho, pero, desde luego, el voto en democracia no se puede amañar. Y la ciudadanía lo dijo muy claro el pasado 23 de julio: no a derogar; no a retroceder; no a perder derechos. Querían un plebiscito y lo tuvieron: perdieron el 23 de julio”.
Por último, ha felicitado al PP por su resultado electoral, alegando que el PSOE “nunca ha puesto en duda ni la limpieza ni el desarrollo de unas elecciones democráticas”. “En fin, si hay que hacerlo, les felicitamos por sus resultados”, ha dejado claro para resaltar los resultados obtenidos por su formación: “También nosotros nos felicitamos por los nuestros y esperamos que cuando haya un nuevo Gobierno liderado por los socialistas no se ponga en duda su legitimidad tal y como vienen haciendo desde hace cinco años”
Puigdemont asume que Sánchez le engañará
Ya dijo el PNV que Sánchez no les había dado nada de lo que les prometió cuando le votaron. Y ERC… A Junts le hará lo mismo
NotMid 16/08/2023
Mañana se constituyen las Cortes y Sánchez y el PSOE dependen de Puigdemont y los soberanistas. A saber: los «bilduetarras» (no les gusta que les llamen así) y los sediciosos, que no sé por qué me suenan a viciosos.
No pintan bien las cosas para el llamado constitucionalismo, pese a que opinan los expertos afines que, al parecer, todo lo que se negocia cabe en la Carta Magna.
Dicen las crónicas de los periódicos que el prófugo está apretando las tuercas ¿de Frankenstein? con sus exigencias y que andan los socialistas muy preocupados porque no saben por dónde les saldrá. (Y en marear, Puigdi tiene mucha experiencia). Vamos, lo de siempre, que miembros del Psoe dicen que «van a ciegas en la negociación» como también se rasgaban las vestiduras con la ley de solo sí es sí de Irene Montero sin que luego movieran un dedo.
Hay algo de todo esto que debería tranquilizarnos y es, precisamente, que los indeseables (incluso para Sánchez) socios de Gobierno también dependen de él y basan su éxito en el éxito del presidente. Esto es, que a ninguno (ni a ERC, ni a Junts, ni a Bildu) les conviene volver a las urnas en diciembre. Así, dirá Sánchez, que menos lobos, Puigdemont. Otro aspecto que nos debería aliviar (y tranquilizar) es que Sánchez es un trilero también con sus socios. Ya lo dijo el PNV cuando volvió a saberse importante tras los resultados electorales de julio. «No nos ha dado nada de lo que nos prometió cuando le investimos presidente». Y en una línea similar está ERC de Junqueras y Rufián. Dejó salir de la cárcel a los presos, pero la mesa de diálogo no fue ni mesa ni diálogo y ahí siguen bajando de votos en cada elección. Otra cosa son las argucias verbales, la propaganda, con la que el presidente hará creer a los suyos que no cede y los nacionalistas tratarán de convencer a sus votantes que han logrado doblegar al Estado. Llámenlo derecho a decidir no vinculante o Estado social asimétrico o cualquier palabrería puesta una detrás de la otra y que nos harán adoptar a todos, pese a carecer de sentido.
Y como convidados de piedra, los representantes del PP, que ven cómo les ningunean hasta los partidos afines (PNV y CC). Es el famoso tablero inclinado. Pese a que el partido de derechas ha sido el más votado, está feo hasta reunirse con Feijóo para hablar.
Fernando Clavijo en una concentración en Tenerife contra violencia machistaAlberto ValdésEFE
El PSOE no saca a CC de la abstención y depende de Puigdemont para que Gamarra no presida el Congreso
Los socialistas no quieren darle un puesto al PNV en la Mesa del Congreso, por ahora, así que Sánchez se ve forzado a una última oferta a Junts
NotMid 16/08/2023
Todo está en el aire. Nada está cerrado «definitivamente», pero las negociaciones para la decisiva votación de la Mesa del Congreso comienzan a perfilarse de manera casi definitiva. Mientras Junts per Catalunya apura hasta el último minuto antes de decantar su voto, el PSOE ve cómo la baza de Coalición Canaria (CC) se le dificulta. El voto de la diputada de esta formación, Cristina Valido, es crucial para que Pedro Sánchez no dependa forzosamente de Carles Puigdemont, pero los nacionalistas canarios se inclinan por la abstención ante la candidata socialista a presidir la Cámara Baja, Francina Armengol, ya que Ferraz no ha aceptado -por ahora- su petición de que el PNV tenga un puesto en la Mesa desde el que pueda «romper el empate entre rojos y azules», según aseguran fuentes de CC. El problema para Sánchez es que otro de sus socios, Bildu (que tiene seis diputados), no contempla ese trato más favorable al PNV (cinco), al que dio el sorpasso en escaños el 23-J.
Sin embargo, el PP sí se podría abrir a darles un puesto en el órgano de gobierno del Congreso a los nacionalistas vascos, a cambio de votar a favor de una hipotética candidatura de Cuca Gamarra. Ella sería la elegida como candidata a tercera autoridad del país si los populares creen que pueden ganar la votación. O sea, si son capaces de hacer que Vox y el PNV voten lo mismo.
Génova está «hablando» estos días con los nacionalistas vascos, según fuentes conocedoras de los contactos. El problema es que los jeltzales han rechazado de plano y con cajas destempladas la segunda parte de las pretensiones del PP: apoyar la investidura de Feijóo para un Gobierno en solitario que dependa de ellos y de Santiago Abascal en el Parlamento.
Coalición Canaria quiere propiciar un acuerdo -ya sea con el PP o con el PSOE- que incluya al PNV, para que ejerza de apoyo a los intereses canarios desde la Mesa del Congreso. CC tiene una estrecha relación con el PP, con el que gobierna en coalición, pero también ha mantenido contactos con el equipo negociador del PSOE, capitaneado por el ministro en funciones Félix Bolaños. En la cúpula de CC confirman a este diario que «hay conversaciones constantes» con los socialistas. Los nacionalistas canarios no se plantean apoyar a Francina Armengol, pero no dan por «cerrada» la puerta. Dependerá de si el PSOE está dispuesto a darle entrada al PNV. Se decidirá, creen, en el «último minuto».
La baza canaria puede ser crucial para despejar la enorme incertidumbre que rodea las negociaciones de la Mesa del Congreso a 24 horas del límite. Sobre el papel, tanto en Génova como en Ferraz reconocen que el presidente canario y secretario general de CC, Fernando Clavijo, tiene una mayor sintonía y disposición al pacto con su socio de gobierno. Pero nada se descarta. De hecho, Clavijo no quiso mojarse ayer sobre con quién va a pactar, e invitó tanto al PSOE como al PP a «coger el guante» de su propuesta para darle una vicepresidencia o incluso la presidencia del Congreso al PNV, así como una serie de medidas económicas para Canarias. «Los dos bloques no suman por su lado, luego se tienen que sentar, dialogar, hablar y a ser generosos», dijo. «Ahora les toca a otros decidir. Son otros los que tienen que recoger el guante o no. ¿Quién coge el guante? Pues les corresponde a otros», aseguró tras un acto en Santa Cruz de Tenerife.
Fuentes del PP canario aseguran que «la balanza de Coalición Canaria se inclina hacia nosotros». «Si de ellos depende, estarán con nosotros», insisten. Incluso, añaden, si Junts per Catalunya rompe la baraja en una hipotética sesión de investidura y aboca a una repetición electoral.
En Ferraz mantienen su «cerrojazo informativo» hasta que las negociaciones «discretas» con unos y otros finalicen, para bien o para mal. Reconocen las conversaciones con Coalición Canaria y con Junts, pero se mantienen firmes en la directriz de no desvelar nada de su contenido. Lo cierto es que la resistencia de los canarios les obligará a un acercamiento final a los independentistas catalanes, a los que les será difícil esquivar.
Hoy Pedro Sánchez reunirá a la Ejecutiva Federal del partido y posteriormente mantendrá un encuentro en el Congreso con los diputados y senadores socialistas. De momento, Ferraz anunció ayer a su candidata a presidir el Congreso, la ex presidenta balear Armengol. Su nombre envía un guiño a las formaciones soberanistas, especialmente a ERC y Junts, ya que pertenece a la vertiente catalanista de los socialistas. Eso sí, no satisface a CC, para la que «no representa a la tercera España». Los nacionalistas canarios quieren que presida la Cámara Baja Aitor Esteban (PNV). O que, si no, haya un vicepresidente jeltzale.
Mientras tanto, el PP sigue deshojando la margarita y aún no desvela sus nombres para presidir el Congreso y el Senado. Lo hará, en el caso de la Cámara Baja, en función de sus posibilidades de éxito. Si Feijóo viera que puede hacerse con el control de la Mesa, presentaría a Gamarra, según fuentes de la negociación. Si no, optaría por perfiles técnicos. Fuentes de Génova aseguraron anoche que aún estaba «por decidir» cuándo lo anunciará Feijóo. Si esta tarde, en su reunión con los diputados y senadores del PP, o ya mañana, al filo de la sesión constitutiva de las Cortes Generales, que comenzará a las 10.00.
El presidente de Canarias, Fernando Clavijo. – Alberto Valdés / EFE
Coalición Canaria evita decantarse entre PSOE y PP para la votación decisiva del Congreso: “¿Quién coge el guante?”
Clavijo insiste en su propuesta para que el PNV ocupe la presidencia o una vicepresidencia del Congreso
NotMid 15/0872023
El presidente del Gobierno de Canarias y secretario general de Coalición Canaria (CC), Fernando Clavijo, ha reiterado este martes su propuesta de “acuerdo” para “desbloquear” la gobernabilidad a cambio del cumplimiento de una “agenda canaria” y de que el PNV ocupe la presidencia o la vicepresidencia del Congreso.
Clavijo cree que la votación crucial sobre la composición de la Mesa del Congreso, que se producirá el jueves, no se desbloqueará hasta “el último minuto”, y que sólo un “eje con PNV y Coalición Canaria” abriría una vía satisfactoria para la legislatura. “Un acuerdo con PNV y Coalición Canaria puede dotar al futuro Gobierno de España de estabilidad“, ha defendido en declaraciones a los periodistas tras el acto de la Virgen de Candelaria en Tenerife.
El voto de Coalición Canaria podría resultar crucial, ya que es el que deshace el empate entre bloques, a la espera de lo que decida Junts per Catalunya. Ahora mismo el PSOE cuenta con amarrar 171 escaños, los mismos que ya tiene de su lado Alberto Núñez Feijóo. En el PP creen que tienen muy cerca el apoyo de CC -gobiernan juntos la comunidad-, pero no lo dan por seguro al 100%. Si los nacionalistas canarios apoyasen finalmente a Pedro Sánchez, ya no haría falta que Junts votase a su favor. En la investidura, bastaría con la abstención.
Eso sí, Clavijo no ha querido detallar si su propuesta de pacto global, tanto para el Congreso como para la investidura, va dirigida al PSOE, al PP o a los dos a la vez. “Los dos bloques no suman por su lado, luego se tienen que sentar, dialogar, hablar y a ser generosos”, ha dicho. “Ahora les toca a otros decidir si esa propuesta que hemos lanzado desde la Coalición Canaria la recogen o no la recogen”, ha agregado.
Preguntado por su preferencia a la hora de elegir bloque, el presidente autonómico insular se ha puesto de perfil: “Son otros los que tienen que recoger el guante o no. ¿Quién coge el guante? Pues corresponde a otros”
Para Clavijo, es crucial que la gobernabilidad pase por la “España nacionalista”. “No todo es azul o rojo, hay una tercera España”. En ese sentido, a cambio de su apoyo exige resolver los “problemas” de los canarios, con medidas de apoyo ante el incremento de la inmigración, bonificar los incrementos salariales que mejoren los convenios laborales, un gran pacto por la juventud, cumplir el Régimen Económico y Fiscal o una cogestión de puertos y aeropuertos.
“Canarias necesita el Estado y un Gobierno estable que sea capaz de dar respuesta a los problemas que tenemos todos los canarios. Les corresponde a las fuerzas políticas hablar, dialogar, alcanzar acuerdos y si ponemos el interés general y la ciudadanía por encima de todo, estoy convencido que eso es posible“, ha incidido Clavijo, para quien aquellos que “ponen otros intereses por delante de los generales o de los de España pues tendrán que responder ellos”.
Francina Armengol comparece ante la prensa al recoger su credencial como diputada – JAVI MARTÍNEZ
El PSOE propone a Francina Armengol como presidenta del Congreso para atraer a los nacionalistas
La ex presidenta balear “es ejemplo de un país que convive con naturalidad en la riqueza que suponen las diversas lenguas que se hablan en España”, según los socialistas
NotMid 15/08/2023
El PSOE ha anunciado este martes que propondrá a la ex presidenta balear Francina Armengol para la Presidencia del Congreso de los Diputados en la sesión constitutiva del próximo jueves. La propuesta se hará de forma oficial mañana, en la reunión de la Ejecutiva Federal socialista, que estará presidida por Pedro Sánchez. Posteriormente, el presidente del Gobierno en funciones se reunirá con el Grupo Parlamentario Socialista.
Pedro Sánchez se decanta por un perfil muy atractivo para sus socios potenciales de investidura. El pasado 10 de agosto, los noticieros abrían su edición con el título: “El PSOE busca un presidente del Congreso del gusto nacionalista”. La trayectoria de Armengol, que ha gobernado con los soberanistas de Més y Podemos en Baleares durante dos legislaturas, además de su propia acción de gobierno, cómplice con el catalanismo, la convierten en una figura con buena acogida en los partidos independentistas con los que Sánchez trata de tener sintonía en busca de su apoyo en una hipotética investidura. En privado reconocían estos días que era “un nombre que suena bien”.
Según recuerda el PSOE, Armengol es militante socialista desde los años 90. En sus inicios en la política, fue concejal en el Ayuntamiento de Inca, diputada después en el Parlament balear, consejera del Consell Insular de Mallorca, diputada en el Congreso de los Diputados para, finalmente, convertirse en la primer mujer presidenta de la Comunidad Autónoma en 2015, que cargo que revalidó en 2019. En las elecciones autonómicas del pasado 28 de mayo se produjo un cambio de rumbo: el PP ganó las elecciones, consiguiendo 26 escaños frente a los 17 del PSOE. Margalida Prohens es la nueva presidenta balear desde el pasado 6 de julio, tras ser investida con la abstención de Vox.
Según los socialistas, su elección se debe a que Armengol “es una política cercana a la realidad cotidiana de los ciudadanos, representa la lucha por la igualdad de las mujeres, la justicia social y la apuesta por la convivencia basada en el diálogo”
“Armengol”, prosigue el comunicado emitido por el PSOE, “es también ejemplo de un país que convive con naturalidad en la riqueza que suponen las diversas lenguas que se hablan en España, además de una dirigente comprometida con la transición ecológica”.
“Estamos convencidos de que representará a nuestro país, como tercera autoridad del Estado, con la máxima solvencia, igual que hizo su antecesora en el cargo Meritxell Batet”, concluye el comunicado del PSOE.
Pilar Alegría, portavoz de la Ejecutiva del PSOE, en una comparecencia. – JAVIER BARBANCHO / Agencias
El chantaje de Junts descoloca ya al PSOE: “Vamos a ciegas, no sabemos qué parámetros manejan”
El PSOE impone “discreción en las negociaciones” mientras Puigdemont avisa: “Crece el nerviosismo y sube la subasta”
NotMid 15/08/2023
Habrá emoción hasta el último minuto. Junts Per Catalunya ha convocado una ejecutiva el próximo jueves, a las 8.00 horas, dos horas antes de la sesión constitutiva del Congreso de los Diputados en la que se elegirán a los miembros de la nueva Mesa, para tomar una decisión sobre el sentido de su voto. Si los de Carles Puigdemont acuerdan apoyar al PSOE, el órgano de control de la Cámara Baja caerá de su lado, anticipando una posible mayoría para la investidura de Pedro Sánchez. Si, por el contrario, los independentistas bajan el pulgar y deciden romper la baraja, la sombra de la repetición electoral se acercará de manera prácticamente irremediable.
Los movimientos de Junts y la disparidad de criterios de sus líderes han descolocado al PSOE. Fuentes de la dirección socialista reconocen que en cierta medida están «a ciegas» sobre la decisión final de la formación neoconvergente, aunque ha habido un acercamiento. El jueves, la cúpula del partido de Puigdemont debatirá sobre esas conversaciones «discretas», según explicaron fuentes de Junts, mantenidas en los últimos días, aunque por el momento todas las opciones están abiertas. Además, el partido ha impuesto silencio a sus miembros sobre este proceso negociador.
Aunque es difícil que exista para Junts un escenario en el que sus votos sean más decisivos, la incógnita de que votará tanto en la Mesa del Congreso como en la investidura no está ni mucho menos despejada. «No sabemos qué parámetros manejarán», añaden otras fuentes del entorno de Pedro Sánchez. «Nosotros lo vamos a intentar», añaden. Otros dirigentes socialistas del Gobierno se muestran esperanzados de que al final habrá pacto, pero alertan de que la amnistía que reclama Puigdemont no cabe en las negociaciones sobre la Mesa del Congreso.
«Creo que Junts facilitará el acuerdo», explica un ministro socialista en funciones. «No es tarea fácil», acota, porque el partido independentista «no quiere perder la posición que tiene». De ahí que haya apurado los plazos al máximo, para encarecer todo lo posible su voto afirmativo.
Hay que recordar que el PP cuenta actualmente con 171 apoyos y tiene cerca el 172, el de Coalición Canaria. De cerrarlo, el «sí» de Junts sería imprescindible para que el PSOE ganase la votación del jueves y se constituyese una Mesa del Congreso progresista. Si Junts se abstiene, la Presidencia de la Cámara Baja sería en principio para los populares.
Lo que queda son, como reconocen en el PSOE, 48 horas «no aptas para cardiaco». Ferraz y Moncloa han decretado un «cerrojazo total», para llevar las negociaciones en la máxima «discreción y prudencia» posibles, como apuntó la ministra en funciones Pilar Alegría ayer, en declaraciones a los medios en el Congreso de los Diputados.
Si el PSOE contiene la respiración mientras Junts deshoja la margarita es, fundamentalmente, porque gobernar sin el control de la Mesa del Congreso y con tantos socios parlamentarios indispensables sería una tarea hercúlea, como poco. Por eso Bildu apremió ayer a Junts a apoyar una mayoría progresista: «Todos somos necesarios». Y por eso el PP aguarda a la espera de recoger o no el fruto de la fragmentación del bloque de Sánchez. Los dirigentes populares consultados creen que habrá pacto, pero quieren estar preparados por si Puigdemont decide seguir por la vía más irredentista.
Artur Mas se despide del Consell Nacional del PDeCAT, en enero de 2018, con Carles Puigdemont presente por videoconferencia. – Quique García / EFE
Manos libres de Puigdemont con sus enterradores ya enterrados en Madrid
La posible disolución del PDeCAT pone fin a todos los intentos fallidos de esta rama
NotMid 15/08/2023
El 23-J no solo dejó a Junts per Catalunya con la llave de la gobernabilidad de España, también certificó que cualquier intento de hacerle sombra recuperando el pactismo de la vieja Convergència está hoy destinado al fracaso. Aunque el escrutinio dejase al partido independentista con un escaño menos que los ocho de 2019, la lectura entre líneas permite a los posconvergentes exhibir tres actas más de las que tenían hasta ahora en el Congreso. Porque en el ecuador de la pasada legislatura los cuatro diputados que militan en el PDeCAT desgajaron su destino del de los cuatro fieles a las directrices de Carles Puigdemont. Si los primeros llegaban a pactos con Sánchez; la otra mitad se desmarcaba. En el Congreso que nace este jueves, todos son leales al fugado, ya sí, con las manos libres para imponer su estrategia en Madrid.
La rama moderada de la refundación convergente se estrelló en julio contra las urnas y perdió toda su representación, como ya había sucedido en las autonómicas de 2021.
Cabe recordar que el Partit Demòcrata Europeu Català es la fuerza política creada en julio de 2016 por los dirigentes de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) con el objetivo de lavar la imagen de una marca empañada por la corrupción, la confesión de Jordi Pujol sobre la fortuna familiar oculta en Andorra y los recortes sociales de Artur Mas. Tras crear la lista electoral Junts per Catalunya para las autonómicas de 2017 (formalmente se constituyó como una coalición entre el PDeCAT y CDC, que aún no estaba disuelta), Puigdemont ha conseguido desinflar al PDeCAT en el proceso de engrosamiento de Junts, organizado como partido desde hace dos años.
Los pésimos resultados de la formación que quería mantener vivo el pujolismo bajo otra denominación han abierto un periodo de reflexión que podría culminar con su disolución en una asamblea extraordinaria a la vuelta del verano. Pese a una campaña en la que contó con la totalidad de los derechos electorales que compartía con JxCat por orden de la Junta Electoral Central, el mensaje de que sus diputados irían a Madrid para «obligar a pasar por caja» a quien gobernase, PP o PSOE, no caló.
El independentismo pragmático del PDeCAT, que añadió «Espai CiU» al nombre de su candidatura para apelar a la nostalgia, no llegó al 1% de los votos en Cataluña (31.700), menos que los obtenidos por el Pacma en la región y solo una tercera parte de los logrados por la CUP, que tampoco pudo retener ninguno de sus dos escaños. No se erigió en competencia seria para sus ex compañeros de bancada, que se granjearon 392.000 apoyos.
La viabilidad económica del PDeCAT marcará la decisión sobre cerrar o aguantar
Aunque con consecuencias idénticas, el fracaso del 23-J no fue tan estrepitoso en las autonómicas de hace dos años. Con la ex consejera de Empresa Àngels Chacón como número uno, el PDeCAT recabó 77.000 apoyos, un 2,72% del voto que no llegaba al umbral exigido para entrar en la Cámara. Por cada votante de la lista demócrata, hubo más de siete que optaron por la de JxCat, liderada simbólicamente por Puigdemont.
En paralelo a la errática trayectoria del PDeCAT, han ido apareciendo varios partidos o plataformas catalanistas del espacio liberal y conservador, con mayor o menos acento nacionalista. Convergents, Lliures, Lliga Democràtica o el proyecto más reciente, Centrem, no han pasado de la irrelevancia en su apuesta por una tercera vía. Mejor suerte han tenido, en cambio, las dos pequeñas formaciones antagónicas surgidas de entre los restos de Unió Democràtica de Catalunya (UDC), el socio minoritario de la federación CiU. Units per Avançar (la facción contraria al independentismo) ha hallado acomodo con el PSC tanto en el Parlament como en el Ayuntamiento de Barcelona, mientras que Demòcrates -la rama independentista- ha sabido agarrarse de la mano de Junts o Esquerra según el momento.
Las dificultades para el catalanismo de derechas a la hora de articular un nuevo partido ya fueron avanzadas precisamente con la caída de Unió. En 2015, tras negarse a formar parte de la coalición independentista Junts pel Sí -unión de CDC, ERC e independientes- y romper con Convergència, la lista encabezada por el ex consejero Ramon Espadaler superó los 102.000 votos, pero se quedó en un insuficiente 2,51%. Peor suerte corrió el histórico Josep Antoni Duran Lleida tres meses después en las generales: 64.726 votos, muy lejos de los 565.501 de Convergència, que se escondió en Democràcia i Llibertat.
Antes del nuevo tropiezo en las urnas, el PDeCAT ya había recibido dos jarros de agua fría en los últimos tiempos: Mas, aún militante, dijo a un mes de las elecciones que no tenía sentido que el partido se presentara cuando ya estaba Junts ocupando ese espacio. En octubre, Xavier Trias había abandonado el partido para ir con JxCat en las municipales.
La viabilidad económica del PDeCAT, con la evidente merma de ingresos, determinará la decisión entre bajar la persiana o aguantar el recorrido de una marca que en el ámbito local aún conserva 13 alcaldías, cerca de 200 concejales y presencia en consejos comarcales y la Diputación de Lérida. En cualquier caso, políticamente, el 23-J ya toma forma en el epitafio del partido. Queda Puigdemont sin contrapesos.
“Antes y después” del 1-O
‘BREXIT CATALÁN’. Demòcrates, escisión soberanista de la extinta Unió, se posicionó en la negociación de JxCat con el PSOE para investir a Pedro Sánchez al recordar que «la gran discusión de fondo es: ¿usted está dispuesto a negociar el Brexit catalán?» como señaló su portavoz Antoni Castellà a Efe.
NO AL CONCIERTO. Además dijo que no se organizó el 1-O para tener «más competencias o un concierto económico», sino que «hay un antes y un después».
Núñez Feijoó junto a al vicesecretario institucional del PP, González Pons -JAVIER LIZÓN / EFE
Las dos quinielas en las que trabaja el PP para la mesa del Congreso: de González Pons a Bermúdez de Castro
La formación solo propondrá un perfil para presidir la Cámara Baja si ve que hay “posibilidades reales” de ganar la votación
NotMid 15/08/2023
Alberto Núñez Feijóo tiene previsto presentar sus credenciales como diputado el miércoles por la mañana. Por la tarde, se reunirá allí mismo, en el Congreso, con los parlamentarios del PP, después de la Diputación Permanente. En principio, ése era el escenario en el que el presidente de los populares tenía previsto anunciar sus candidatos a presidir la Cámara Baja y el Senado, así como los posibles miembros de las Mesas. Pero la partida de póquer político que está jugando Carles Puigdemont podría trastocar esos planes.
¿Por qué? Porque Feijóo quiere designar a su candidato a presidir el Congreso en función de sus «posibilidades reales». Es decir: si ve que va a ganar, pondrá a un peso pesado «orgánico e institucional». Y si no, elegirá a un perfil más técnico para ocupar, en principio, la vicepresidencia primera de la Mesa del Congreso.
Por eso, ahora la cúpula del PP maneja tres escenarios: el primero, esperar a que Junts decante la balanza, el propio jueves por la mañana, día en que se constituyen las Cortes. El segundo, mantener la previsión de anunciarles a los parlamentarios quiénes son los elegidos. Y el tercero, anticiparlo hoy mismo, toda vez que Junts va a llevar al límite las negociaciones con el PSOE. «No está decidido», insisten en el PP, antes de repetir que Feijóo maneja «nombres para ganar» la votación de la presidencia del Congreso y «nombres para no hacerlo», pero sin estar «vinculado a ningún plazo concreto».
Lo cierto es que si Junts rompe con Pedro Sánchez y decide no votar a favor de la candidatura del PSOE, el PP podría presidir el Congreso. En ese escenario -menos probable, de partida-, Feijóo nombraría a «alguien con trayectoria parlamentaria y cargo orgánico», según las fuentes populares consultadas. «No será un debutante», añaden, sino alguien de los que repiten como diputados… o con despacho en Génova y peso político.
En ese punto, las quinielas de la dirección del PP miran sobre todo a Esteban González Pons, por su papel «institucional», sin descartar a Cuca Gamarra. Aunque las mismas fuentes inciden en que Feijóo es muy celoso para los nombramientos y no los desvela «ni al cuello de su camisa».
¿De verdad el PP cree que tiene posibilidades de presidir la Cámara? Los dirigentes consultados vaticinan que Junts acabará apoyando al PSOE, pero, mientras tanto, exploran opciones. Es a lo que se refirió ayer Elías Bendodo cuando enfatizo «el trabajo discreto que está haciendo el PP para constituir las Cortes y la posterior investidura». «Las negociaciones se llevan con discreción» y «el PP tiene sus planes», añadió.
En todo caso, el escenario más probable -sobre el papel- es el de un acuerdo de PSOE y Junts para que presida la Mesa del Congreso un candidato socialista. Si el PP viese que se encamina con toda seguridad a eso, propondría nombres distintos para la vicepresidencia del Congreso. El que más repiten los dirigentes consultados es el del veterano diputado castellano leonés José Antonio Bermúdez de Castro, al que Feijóo ya nombró coordinador institucional y portavoz adjunto en la Cámara Baja.
Entre los poquísimos nombres que en Génova ven aptos para el cargo, se cita a la gallega Marta González, que ya trabajó con Feijóo en la Xunta y que fue el principal ariete del PP contra la Ley del sólo sí es sí. Tampoco se descarta a la vicesecretaria de Estudios del PP. Carmen Navarro, que ha ocupado en los últimos meses la secretaría cuarta de la Mesa.
LA PRESIDENCIA DEL SENADO, EL ARIETE DE LA LEGISLATURA
Además de sus candidatos para la Mesa del Congreso, el otro gran nombramiento que tiene que hacer Alberto Núñez Feijóo en las próximas 48 horas es quién será el candidato del PP a presidir el Senado. Teniendo en cuanta que los populares tienen la mayoría absoluta en la Cámara Alta, se trataría, básicamente, de una elección directa. Es Feijóo quién decidirá quién es la cuarta autoridad del Estado.
El PP quiere hacer de su mayoría absoluta en la Cámara Alta -tiene 143 escaños, diez más de los que marca el listón decisivo de la toma de decisiones- un ariete contra el Gobierno, si Pedro Sánchez acaba ahormando finalmente una mayoría suficiente, con el «sí» de Junts per Catalunya. Desde la Cámara Alta el PP podría frenar las iniciativas del Ejecutivo que no compartiese, además de aprobar comisiones de investigación que pongan el foco sobre los asuntos más peliagudos para los socialistas. Con una Mesa del Senado dominada por el PP, a los de Feijóo les será fácil marcar los plazos de discusión y de votación, incluso extendiéndolos al límite.
Hay dos cargos importantes para esa labor de oposición en la Cámara Alta. El primero es el del presidente o presidenta, y el segundo, el de quien ocupe la portavocía. Para esos dos cargos hay dos nombres que suenan más que el resto en Génova. Son los del vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local, Pedro Rollán, y el del actual portavoz de los populares en la Cámara Alta, Javier Maroto. Además, las fuentes consultadas incluyen en la ecuación a la ex presidenta del Congreso y ex presidenta de Aragón Luisa Fernanda Rudi, un peso pesado parlamentario del partido. Sin embargo, tanto en la dirección nacional como en el Grupo Parlamentario en el Senado ven menos probable -aunque no descartable, porque Feijóo no ha comunicado su decisión final- el nombramiento del ex ministro Javier Arenas.
El nombre más citado es el de Rollán, un hombre de la confianza de Feijóo que es el senado más votado de España y que se sienta en el Comité de Dirección del PP. En ese sanedrín sólo participa el portavoz parlamentario, y no el presidente de la Cámara. Es decir, si lo nombra, Feijóo tendría que sacarlo de su núcleo duro, por neutralidad institucional. De Rollán también destacan en Génova su conocimiento territorial -el ámbito del Senado-. No en vano, ha sido incluso presidente de la Comunidad de Madrid.
La candidata número 1 de Junts per Catalunya por Barcelona al Congreso de los Diputados, Míriam Nogueras, y el secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Turull. (David Zorrakino – Europa Press)
JxCat celebrará una ejecutiva el jueves para acordar su posición sobre la Mesa de Congreso
Puigdemont ha insistido hoy en su exigencia de guardar silencio para no causar interferencias en la negociación a través de su perfil en Twitter, al recomendar “paciencia, perseverancia y perspectiva”
NotMid 14/08/2023
El secretario general de JxCat, Jordi Turull, ha convocado para el próximo jueves una reunión extraordinaria de la Ejecutiva del partido, poco antes de la sesión constitutiva de las Cortes, para decidir la posición de sus diputados en torno a la composición de la Mesa del Congreso.
Según han confirmado a Efe fuentes de JxCat, la reunión de la Ejecutiva de JxCat será telemática y tendrá lugar el jueves día 17 entre las 08:00h y las 09:45h.
Esta reunión ha sido convocada de mutuo acuerdo con la presidenta del partido, Laura Borràs; la líder en el Congreso, Míriam Nogueras, y el portavoz en el Senado, Jaume Cleries.
La ejecutiva de JxCat tiene como objetivo decidir el sentido del voto de sus diputados en la sesión constitutiva de las Cortes Generales que está previsto que se inicie a las diez horas en el Congreso de los Diputados.
En la convocatoria de la reunión realizada por Jordi Turull, éste insiste en la necesidad de que los líderes, portavoces y negociadores guarden silencio sobre el desarrollo de las negociaciones, algo que según las mismas fuentes es un requisito exigido por el expresidente de la Generalitat y líder de la formación, Carles Puigdemont.
Coalición Canaria tiende puentes al PNV sin descartar investir a Feijóo
Sánchez aborda una semana clave con la esperanza de un giro de Coalición Canaria para no depender de Puigdemont. El presidente canario plantea que el PNV presida el Congreso y no descarta investir a Feijóo
NotMid 14/08/2023
A 72 horas del límite, todo sigue en el aire. La inestabilidad política salida de las urnas el 23 de julio se traduce también en el escenario parlamentario y sobre el Congreso de los Diputados hoy planean más dudas que certezas. Hasta el jueves, momento en el que se constituyan las Cortes, los partidos afrontan una fase final decisiva para despejar numerosos interrogantes que sin duda repercutirán en el complejo proceso de formación de Gobierno en el que están sumergidos tanto la izquierda como la derecha.
El reloj de arena hace ya días que apura sus últimos granos: los diputados han ido desfilando por los pasillos de la Cámara Baja para recoger sus credenciales, en paralelo a las discretas negociaciones que han mantenido todos los grupos con representación parlamentaria. El Partido Popular y el PSOE pugnan por la presidencia del Hemiciclo, pero a estas alturas la opción más probable es que los socialistas repitan a los mandos del Congreso. Para ello, Sánchez deberá amarrar en las próximas horas su primer pacto con Junts para conseguir la presidencia de la Cámara. Si no lo consigue y el PP logra el apoyo de Coalición Canaria, el control de la Mesa dará un vuelco inesperado.
Otras formaciones, como Sumar, Vox o el PNV, aspiran a fijar sus puestos en la Mesa. El equilibrio aquí alcanzado marcará los posibles pactos entre los bloques de cara a una hipotética investidura, todavía inapreciable en el horizonte.
El PSOE espera que la constitución de las Cortes sirva como un primer ensayo de un posible nuevo bloque, sustentado en nacionalistas e independentistas, que le permita revalidar mandato. En Ferraz son conscientes de que la única manera de contrarrestar la mayoría absoluta del PP en el Senado es manteniendo el control en el Congreso, pero Génova reitera que en la Mesa de la Cámara Baja debe quedar claramente reflejado qué formación ha sido la más votada.
Pero la izquierda maniobra en las últimas horas para mantener el control de un órgano que se antoja clave durante toda la legislatura, y en el que aspiran a mantener cinco de los nueve puestos de la Mesa -la presidencia, dos de las cuatro vicepresidencias y dos de las cuatro secretarías-. Para empezar a amarrar estos números Sánchez ha tenido que profundizar en su relación con ERC, que en los últimos días se ha mostrado favorable a desbloquear la situación en el ámbito parlamentario. En las últimas horas, no obstante, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, avisó al PSOE de que «no puede dar por descontados los votos» de su partido. Recordó que la Mesa «ha vetado el catalán, no ha dejado investigar el espionaje de Pegasus o ha atascado la tramitación de la ley de amnistía» y por ello insistió en «el entendimiento estratégico con Junts», una oferta que los de Carles Puigdemont, por ahora, continúan esquivando.
El presidente canario no descarta pactar con Sánchez
Por el momento, una pieza clave en la negociación con fuerzas independentistas está siendo la cuestión de si ERC y Junts, con siete escaños cada uno, pueden formar grupo propio en el Congreso. El mínimo para hacerlo es de 15 diputados, por lo que la decisión última recaerá sobre la nueva Mesa. En cualquier caso, la cuestión de fondo con las fuerzas catalanas -sus exigencias para hacer presidente a Sánchez: la amnistía de los condenados por el procés y el compromiso de la celebración de un referéndum de autodeterminación- no se está tratando en estos contactos, y será abordada siempre después de la crucial primera votación del jueves por la mañana.
Pero el resto de fuerzas minoritarias también tienen mucho que aportar a esta encrucijada. Ayer, en una entrevista concedida a La Vanguardia, el líder de Coalición Canaria, Fernando Clavijo, consideró al PNV «un referente» y propuso que uno de sus parlamentarios ocupe la presidencia de la Cámara. Tanto el PSOE como el PP tientan en los últimos días a los jeltzales, que podrían volver a la Mesa por primera vez desde la segunda legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero, cuando José Ramón Beloki fue secretario segundo de la Mesa del Congreso.
Hacia qué lado se decante Coalición Canaria será decisivo, tanto este jueves para elegir el órgano de gobierno de la Cámara como a futuro, en la investidura de Alberto Núñez Feijóo o de Pedro Sánchez. El partido, que gobierna en coalición con el PP en el archipiélago, ha celebrado en los últimos días el paso atrás de Vox, y ha dicho estar predispuesto a negociar con el PP y apoyar a Feijóo -con quien dice tener un trato «excelente»- si se aborda la agenda canaria. Pero en la entrevista de este domingo Clavijo también subrayaba que Coalición Canaria tiene una «buena» relación con Pedro Sánchez, con el que no descarta pactar siempre y cuando los «extremistas» no formen parte del Gobierno. «¿Qué es Sumar? No se sabe muy bien lo que es Sumar. Sí sabemos lo que es Podemos: el intento de transportar el modelo político venezolano a España. Nosotros estamos en contra de ese modelo bolivariano», afirmó sobre los morados.
Si el PP lograse integrar a Coalición Canaria en su bloque podría llegar a 172 apoyos junto a Vox y UPN. Sánchez, a expensas de Junts, lograría 171 junto a Sumar, ERC, EH Bildu, el PNV y el BNG. Igual que en la investidura, el presidente del Congreso se elige por mayoría absoluta en primera votación, o con más síes que noes en segunda. Hasta el momento, ningún partido ha desvelado el nombre de su candidato al puesto.
Yolanda Díaz durante la Fiesta del Pulpo de Carballiño, en Ourense. EUROPA PRESS
Yolanda Díaz llama a formar un Gobierno progresista: “Nadie entendería en este país que estas elecciones fuesen un retroceso”
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social en funciones hace un llamado a “todas las formaciones políticas” para alcanzar los “acuerdos necesarios”
NotMid 13/08/2023
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social en funciones, Yolanda Díaz, ha asegurado que el pasado 23 de julio “las urnas hablaron” y, ha recalcado, “dijeron que se debe conformar un gobierno progresista”
Así se ha expresado este domingo la también líder de Sumar en O Carballiño (Ourense), donde ha acudido junto a la recientemente nombrada portavoz en el Congreso de la coalición, Marta Lois. “En septiembre arranca el curso escolar, el curso de la vida de la gente, con dificultades, con problemas. Una ciudadanía que no tiene que ver con el tiempo político. Por eso hago un llamado a todas las formaciones políticas para que sean capaces de llegar a los acuerdos necesarios para facilitar un Gobierno para nuestro país”, ha defendido Díaz.
A este respecto, ha señalado que “las urnas hablaron” el pasado 23 de julio y “lo que dijeron es que tenemos que conformar un gobierno progresista”. “Dijeron que tenemos que seguir avanzando, ganando derechos. Nadie entendería en este país que estas elecciones fuesen un retroceso, una interrupción”, ha asegurado.
La vicepresidenta considera que se han hecho “muchas cosas” desde el Gobierno de España, “pero ahora toca hacer más” y ganar “más derechos laborales, ecológicos y de igualdad”. “De esto va la política y es lo que espero que pase en los próximos meses”, ha comentado.
Negociaciones para la mesa del Congreso
Yolanda Díaz y Marta Lois han evitado confirmar si desde Sumar se negocia con el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en favor de una hipotética investidura de Pedro Sánchez, limitándose a confirmar que “desde el minuto uno después de las elecciones hay personas que trabajan para tener un Gobierno progresista en el Estado español”.
En cuanto a las negociaciones para presidir la Mesa del Congreso, las líderes de Sumar no han avanzado nada concreto, pero han afirmado que “la mesa tiene que dar respuesta a lo que votaron los españoles”. “Lo que tiene sentido es que el órgano de máxima importancia sea acorde a lo que votó la ciudadanía. Trabajamos para tener una mesa progresista”, defienden. En esta línea, Lois ha deslizado que “a veces hay momentos en que las fuerzas políticas insinúan que hay acuerdos, pero los acuerdos de verdad se expondrán públicamente cuando corresponda”. Ahora, ha incidido, se llevan a cabo reuniones “muy importantes” y “bajo discreción”
En la Diada del año pasado los líderes de ERC acudieron al acto de Òmnium pero no a la manifestación / EFE
ERC vuelve a la Diada para reconstruir puentes con la ANC que le pide romper con Sánchez
Los republicanos asistirán a los actos del 11-S tras la ausencia del año pasado ya que no la consideran “hostil”
NotMid 13/08/2023
Los malos resultados electorales de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) en las elecciones municipales de mayo y en las generales de julio han provocado que la formación intente buscar un giro más soberanista. Desde que Pere Aragonès gobierna en la Generalitat, los republicanos se han mostrado como un firme aliado del PSOE en el Congreso además de apostar por la vía del diálogo para cerrar las profundas heridas abiertas por el proceso independentista.
Esta actitud incluso provocó que Junts se saliera del Govern, para escenificar su rechazo a esta política pactista y alinearse con la unilateralidad de parte del secesionismo catalán.
Sin embargo, la pérdida de votantes y de representación en el Congreso ha provocado que ERC adopte posiciones más extremas al reclamar la amnistía y la autodeterminación, con un referéndum acordado con el Estado, a los socialistas para apoyar la investidura de Pedro Sánchez.
Son las mismas reivindicaciones de Junts, con los que Esquerra intentó un frente común, aunque el inmovilismo del partido de Carles Puigdemont contrasta con la negociación abierta por parte de los republicanos que están pendientes de conseguir un grupo propio en el Congreso siempre y cuando la presidencia sea socialista.
Estas concesiones a negociar no han variado los intentos de ERC para reconstruir puentes con el independentismo unilateral. El año pasado no acudieron a la manifestación que la Assemblea Nacional Catalana (ANC) convoca cada edición de la Diada del 11 de septiembre al temer los abucheos de los asistentes más radicales.
De cara a este 2023, la secretaria general adjunta y portavoz de ERC, Marta Vilalta, considera que la situación es menos «hostil» y que la protesta está planteada «desde una perspectiva más abierta, transversal y plural».
«Creemos que ha habido una reflexión respecto al año pasado y, por lo tanto, vemos que de momento se enfoca desde una perspectiva más abierta, más transversal, más plural, con más vocación de sumar que la que vivimos el año pasado. Nosotros querremos estar allí», dijo Vilalta a Efe pese a que todavía se desconoce si Aragonès volverá a asistir tras faltar el año pasado.
Pese a esto, el ambiente puede ser «incómodo» para ERC como reconoció la presidenta de la ANC, Dolors Feliu, quien instó a los partidos independentistas que consiguieron representación en el Congreso a «bloquear» una investidura de Sánchez si no se acuerda iniciar «un camino hacia la independencia».
La Assemblea reclama un referéndum de autodeterminación y en caso de no conseguirlo pretende que Esquerra y JxCat fuercen una «repetición electoral», un escenario que por el momento ERC rechaza aunque desde Junts se contempla como una posibilidad que cada vez cobra más fuerza.
La manifestación de la Diada serán cuatro columnas que saldrán de cuatro puntos de Barcelona (la Ciudad de la Justicia, la Escuela Proa, la estación de Sants y Hacienda) y que convergerán en la plaza «Primero de Octubre» de Barcelona, la que el resto de la población conoce como plaza España. Los puntos de inicio de las cuatro marchas son «enclaves de denuncia y reivindicación de los derechos y libertades perdidas por la ocupación española», según remarcaron desde la organización.
RECURSO A LA LEY DE VIVIENDA
Otro de los ejemplos de este distanciamiento de ERC respecto a su etapa anterior es el anuncio de que votarán que el Parlament presente un recurso ante la ley por el derecho a la vivienda que ellos mismos apoyaron, junto a Bildu, PSOE y Unidas Podemos, en el Congreso. Los republicanos creen ahora que el texto invade competencias de la Generalitat y por eso se alinearán con JxCat para instar al parlamento catalán a que interponga un recurso de inconstitucionalidad contra esta normativa. Junts ya votó en contra de la ley en el Congreso por lo que mantienen la coherencia en su reclamación.
Ahora, ERC cree que se debe recurrir esta norma ante el Constitucional para “defender el autogobierno de Cataluña y, a la vez, mantener los avances en materia habitacional”. Además, los republicanos alegan que su tarea en el Congreso “permitió avances sociales fundamentales en materia de vivienda”, como por ejemplo “topar los precios del alquiler o poner freno a la especulación y los abusos que afectan a la ciudadanía”.
Sin embargo, señalan que, pese a “todas las mejoras en aspectos competenciales que se pudieron blindar durante la tramitación parlamentaria en las Cortes españolas” existen” algunos artículos la ley” que afectan “al autogobierno de Cataluña en aspectos como el urbanismo o la autonomía financiera y de gasto”, tal y como señala el dictamen del Consejo de Garantías Estatutarias encargado por JxCat.
Félix Bolaños en el Congreso J.J. GUILLÉN / EFE
Ferraz prioriza la logística del Congreso y pospone a después del 17-A la negociación de fondo sobre Cataluña
ERC y JxCat exigen amnistía para los condenados del 1-O y un referéndum de autodeterminación
NotMid 12/08/2023
Por utilizar una expresión gráfica, el elefante está en la habitación, pero de momento en el PSOE hacen como si no notaran su presencia. La única opción de que Pedro Sánchez pueda ser reelegido presidente del Gobierno pasa necesariamente por que los partidos independentistas le presten unos votos a los que han puesto un precio muy elevado: amnistía para los condenados por el referéndum ilegal de 2017 y autodeterminación para Cataluña. Y, por ahora, ese melón no se ha abierto.
Los interlocutores de Ferraz han mantenido esta semana reuniones presenciales con representantes de las seis formaciones además de Sumar a las que necesitan para armar una mayoría parlamentaria. De los pocos detalles que han trascendido sobre esas conversaciones capitaneadas por el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y por el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes y Asuntos Constitucionales, Rafael Simancas, destaca el de que se van a llevar en dos fases: primero se habla la de la composición del órgano rector del Congreso y, a partir del 17 de agosto, ya de la de la investidura.
Traducido a contenidos concretos, lo que se va a acordar antes del jueves de la semana que viene es qué concesiones se comprometen a hacer los socialistas para obtener a cambio de los apoyos necesarios para poder conservar la presidencia de la Mesa de la Cámara Baja. Por lo pronto en ERC ya han desvelado que les “garantizan” que, tras haber perdido ocho de sus 13 escaños, podrán contar con grupo propio pese a no cumplir los requisitos requeridos, una exigencia que también ha puesto sobre la mesa Junts per Catalunya (JxCat).
Dicho de otra forma: de lo que se está hablando estos días es de temas “fundamentalmente logísticos” además del reparto de los nueve puestos destacados Congreso para que el bloque de la izquierda pueda cumplir su aspiración de quedarse con cinco de ellos, según apuntan fuentes parlamentarias.
“Estamos en la semana previa para acabar de cerrar este posible soporte al PSOE con lo que hace referencia única y exclusivamente a la composición del Mesa. No ha habido más conversaciones”, explicó el jueves Teresa Jordà, número dos de ERC, confirmando así que los asuntos polémicos quedan pospuesto hasta después del 17 de agosto. “Nosotros hemos sido muy diáfanos durante toda la campaña diciendo cuáles eran nuestras condiciones. Y seguimos manteniéndolas”, advertía.
En la formación de Oriol Junqueras consideran que esta legislatura tienen una “ocasión de oro” por los “14 diputados independentistas” -los suyos y los de JxCat- que “tienen mucho que decir” porque son necesarios para que Sánchez permanezca en La Moncloa. Y sacan pecho por las cesiones que ya lograron arrancar al Gobierno de coalición entre PSOE y Unidas Podemos la pasada legislatura a cambio de su apoyo parlamentario, desde el indulto a los presos del 1-O a la eliminación del delito de sedición y la rebaja de penas en el de malversación: “No partimos de cero. Cataluña no parte de cero. En los últimos cuatro años se ha trabajado muchísimo y se han hecho muchos avances”.
“En estos momentos es pronto para hablar de contenidos”, respondía, a su vez, esta semana en la Cadena Ser el portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, a la pregunta de si se había abordado ya el asunto de la amnistía y la autodeterminación. “Hemos corrido el riesgo en este país de que PP y Vox llegaran al Gobierno y todo el mundo sabía lo que hubiera ocurrido con Cataluña, que es que se hubiera descarrilado el diálogo (…). Afortunadamente no ha ocurrido y la vía del diálogo es lo que ha prevalecido y lo que va a prevalecer. A partir de aquí las concreciones las iremos viendo en los próximos meses”, añadía.
PUIGDEMONT
Donde no han hecho ninguna valoración sobre el alcance de las conversaciones que se han mantenido en esta primera fase de negociación es en JxCat. La única pista que ha dejado el secretario general del partido, Jordi Turull, en su cuenta de Twitter ha sido la afirmación de que “hace muchos años que el trabajo del Tribunal Constitucional es decorar jurídicamente la estrategia del Estado contra al independentismo” y que “esa estrategia no cierra por vacaciones”, en alusión al rechazo del recurso de Carles Puigdemont contra su detención.
En el PSOE siguen insistiendo en que tienen que ser “discretos, responsables y prudentes” porque lo que tienen “entre manos” es “muy importante”. “Las conversaciones van como tienen que ir”, zanjan en el equipo negociador de Pedro Sánchez, donde ni siquiera han desvelado aún quién será su candidato a la presidencia del Congreso tras la renuncia de Meritxell Batet.
Azcón, contra el independentismo: “La voluntad ciudadana no puede estar condicionada por minorías que pretenden deshacer la convivencia”
En su toma de posesión, el presidente aragonés pide “evitar que prosperen los proyectos que pretenden desembrar” España
NotMid 12/08/2023
El nuevo presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha afirmado que “la voluntad de los ciudadanos no puede estar condicionada por minorías que pretenden deshacer una convivencia que nos ha llevado a la prosperidad al conjunto de los españoles en la mejor etapa de nuestra historia”.
Azcón se ha expresado así en su discurso de toma de posesión de su cargo de presidente de la Comunidad Autónoma, que se ha celebrado este viernes en el patio de Santa Isabel del Palacio de La Aljafería, sede de las Cortes de Aragón, donde ayer el Pleno le eligió presidente con los 28 votos del PP, los siete de Vox y el del representante del PAR.
En su discurso, al que ha asistido también el presidente saliente, Javier Lambán, el nuevo jefe del Ejecutivo regional ha aseverado que ser leal a España significa, para los aragoneses, “participar activamente de su construcción” desde el carácter específico de la Comunidad Autónoma y, también, “evitar que prosperen los proyectos que pretenden desembrar o deshacer esa nación que por fin encontró en la democracia, la libertad y el respeto su manera más acertada de existir”.
AZCÓN: “EL CAMBIO SE HA PUESTO EN MARCHA”
En su toma de posesión Azcón ha estado acompañado por el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, quien se ha felicitado “del cambio que se ha puesto en marcha” en ambas comunidades.
Mazón ha viajado a Zaragoza “muy contento” para felicitar a Azcón y para mostrar su alegría, ha dicho, por poder “avanzar” y decir “cosas importantes” como que “ya nunca más los hijos tendrán que pagar por la muerte de sus padres”, que habrá bajada de impuestos y que se va a luchar por la competitividad.
De Jorge Azcón su homólogo valenciano ha dicho que es una persona “honesta, trabajadora, defensor de Aragón a ultranza” y que tiene un corazón “extraordinario”.
Preguntado por la situación de la política nacional y por su opinión acerca de si el PP debería hablar con Junts para lograr una hipotética investidura del popular Alberto Núñez Feijóo, Mazón se ha limitado a decir: “Lo mejor que nos puede pasar a todos es que Feijoo sea presidente del Gobierno”.
“NO ESTÁ SOBRE LA MESA” NEGOCIAR CON JUNTS
La vicesecretaria de Políticas Sociales del PP, Carmen Fúnez, que también ha asistido a la toma de posesión, ha avanzado, por su parte, que “no está sobre la mesa” la posibilidad de que el PP negocie con Junts una posible investidura de Feijóo.
Fúnez ha asegurado que los populares tienen “muy claro” que Feijóo es “un presidente de principios; no es Pedro Sánchez y no va a defraudar nunca a los principios constitucionales ni a sus electores”.
Y ha agregado que trabajan en la línea de lograr la estabilidad en el Congreso de los Diputados, algo que aporta “el partido que gana las elecciones”, es decir, el PP, el “ganador” y al que separan “cincuenta escaños del segundo”, el PSOE. Estas cuentas le salen de sumar los 137 escaños populares a los 33 de Vox y al parlamentario de UPN, frente a los 121 de los socialistas.
Azcón, Mazón y Lamban, en el acto de investidura de las Cortes de Aragón- Javier Belver / EFE
El PP consolida su arsenal de poder territorial en el Senado y los órganos clave para las autonomías
La Cámara Alta y las comunidades autónomas serán claves para la estrategia de Génova
NotMid 12/08/2023
A la espera del desenlace en Murcia, donde ya gobierna, la investidura de Jorge Azcón en Aragón confirma el arsenal de poder autonómico amasado por el PP en mayo y que tendrá su traducción en Madrid durante los próximos años, suceda lo que suceda. Aunque Pedro Sánchez lograse la investidura, las cotas de poder alcanzadas en los últimos meses por el partido de Alberto Núñez Feijóo podrían convertir la legislatura socialista en un camino plagado de dificultades y lleno de obstáculos a la gobernabilidad. El Partido Popular, triunfador indiscutible en las elecciones del 28-M y primera fuerza insuficiente en los comicios del 23-J, cuenta con un arma poderosa para plantar cara, cimentada en sus baronías renovadas o recién estrenadas, y su plasmación en todos los órganos en los que son actores protagonistas las Comunidades Autónomas.
La artillería más potente es la que reside en el Senado, dominado por el PP, que logró en las elecciones del 23-J hacerse con una holgada mayoría absoluta. Los populares ocuparán 143 escaños, diez más de los que marca el listón decisivo de la toma de decisiones. Cierto es que las atribuciones del Senado, la cámara de representación territorial, son en el sistema parlamentario español mucho menores que las del Congreso pero, aún así, tiene margen de maniobra suficiente para marcar tiempos en la actividad legislativa. Unos lo llamarán filibusterismo, otros entorpecimiento, pero la ley le concede unos poderes que los populares a buen seguro no desperdiciarán.
En un Senado con mayoría absoluta y presidido por el partido que ejerce la oposición, las iniciativas legislativas que llegan del Congreso pueden ser frenadas durante semanas. En el caso de los proyectos de ley, la Cámara Alta tiene hasta dos meses para pronunciarse. Este plazo se rebaja a 20 días si se trata de iniciativas que llegan con la etiqueta de urgente. También puede imponer sobre ellas enmiendas e incluso vetos. Tanto unas como otros pueden ser levantados por la Cámara Baja pero será necesario reunir para ello a la mayoría absoluta de los diputados. Si esta mayoría no se consiguiera en el plazo de dos meses, entonces cabe la posibilidad de anular el veto con una votación que arroje más síes que noes. Con una Mesa del Senado dominada por el PP será fácil marcar los plazos de discusión y de votación incluso extendiéndolos al límite.
El Senado además es pieza imprescindible en el caso de que se pretenda reformar la Constitución. Si la propuesta de reforma no afecta a artículos blindados de la Carta Magna tendrá que ser aprobada por tres quintos de los senadores, una cifra imposible de alcanzar si el grupo popular, con mayoría absoluta, se opone. En ese caso habrá que conformar una comisión mixta con senadores y diputados para alcanzar un acuerdo. Además, una décima parte de los senadores -26- podrán reclamar la celebración de un referéndum sobre los aspectos reformados. Si se trata de una reforma constitucional que afecta a artículos blindados -lo que requiere aprobación por ambas Cámaras, disolución de Cortes y celebración de elecciones, ratificación de la reforma por las nuevas Cortes y sometimiento a referéndum-, entonces la aquiescencia de la Cámara Alta y su mayoría es inevitable.
También resulta imprescindible, por tener prácticamente la competencia exclusiva, para activar y aprobar el procedimiento del artículo 155 por el cual el Gobierno central puede intervenir total o parcialmente una Comunidad Autónoma.
Igualmente su papel es clave a la hora de ratificar Tratados internacionales, que han de ser aprobados por ambas cámaras. Si hubiera desacuerdo habría que crear una comisión mixta para tratar de alcanzarlo. Si no se logra, el texto vuelve al Congreso que podría aprobarlo por mayoría absoluta. El Senado además es clave para autorizar los acuerdos de cooperación entre autonomías y para aprobar la dotación y distribución del Fondo de Compensación Interterritorial.
Finalmente, la Cámara Alta elige a 10 de los 20 vocales del CGPJ; a 4 de los 12 magistrados del Tribunal Constitucional; a 6 de los 12 vocales del Tribunal de Cuentas o a 4 de los 10 miembros del Consejo de RTVE. Para estas elecciones es necesaria una mayoría de tres quintos que sólo puede lograrse contando con el grupo que ostenta la mayoría absoluta.
Además de en el Senado, la influencia del Partido Popular será determinante en otros ámbitos importantes para sostener la gobernabilidad. Es el caso, por ejemplo, del Consejo de Política Fiscal y Financiera en el que se sientan junto al ministro de Hacienda los consejeros homólogos de todas las CCAA, la mayoría de las cuales, 12 de 17, están gobernadas o cogobernadas por el PP. Este órgano se encarga de adecuar la coordinación entre la actividad financiera de las autonomías y la Hacienda del Estado, así como la política de endeudamiento y de inversiones. Sus acuerdos son sólo recomendaciones al Gobierno pero en caso de discrepancia continuada reflejan una distorsión muy negativa entre el poder autonómico y el poder central.
El Gobierno también puede enfrentarse a un choque reiterado con la mayor parte de las autonomías en las comisiones bilaterales de cooperación, un marco en el que se deben solventar las discrepancias competenciales para intentar evitar que estas lleguen al Tribunal Constitucional.
Las discrepancias también pueden ser moneda de cambio en las reuniones de la Conferencia de Presidentes, el órgano de cooperación de más alto nivel entre el Gobierno central y los de las autonomías, y que claramente estará dominada por líderes del Partido Popular. Se trata de un órgano en el que se debaten y acuerdan asuntos clave para el sistema autonómico. Sus acuerdos han de adoptarse por consenso y las recomendaciones por dos tercios de los presentes más el presidente del Gobierno.
Puigdemont en un acto de su partido en Francia / EFE
Los afines a Puigdemont instan a “paralizar” el Estado si el PSOE no cede con el referéndum y la amnistía
Dentro de Junts aumentan las voces que reclaman no alcanzar ningún acuerdo de investidura y repetir las elecciones
NotMid 12/08/2023
En Junts Per Catalunya (JxCat) crecen las voces que apuestan por bloquear una posible investidura del candidato socialista Pedro Sánchez, ya que no contemplan ni un hipotético «acercamiento» del PP para apoyar a su líder Alberto Núñez Feijóo, lo que no dejaría más salida que repetir elecciones al Congreso. Afines al ex presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, son los que más presionan al dirigente independentista para dinamitar cualquier tipo de acuerdo que facilitase un gobierno en España en respuesta a lo que consideran una represión por parte del Estado que ven constante. Así se escudan en decisiones como la tomada esta semana por la Sala de Vacaciones del Tribunal Constitucional (TC) que decidió inadmitir, con los votos de los dos magistrados conservadores, los recursos del propio Puigdemont y del ex consejero Toni Comín al procesamiento por desobediencia y malversación agravada y la orden de detención en territorio nacional emitidas por el Tribunal Supremo.
Un grupo más duro dentro de Junts, en el que se posicionan los más vinculados al ex presidente, persiste la idea de «paralizar» el Estado, como explicaron fuentes de la formación a este medio, como respuesta a lo que consideran «represión del independentismo» catalán. En este sentido, la presidenta de JxCat, Laura Borràs ya dejó claro que la última palabra para investir de nuevo a Pedro Sánchez la tendrá alguien «declarado enemigo público número 1 de los defensores de la unidad de España» y recordó que el candidato socialista debe «decir si está dispuesto a hablar de autodeterminación y amnistía. Una amnistía significaría que el Estado detiene las hostilidades y abandona la senda de la represión, paso indispensable para abrir una negociación seria sobre la resolución del conflicto político».
En este sentido, desde Junts son conscientes de que estas dos peticiones principales, referéndum acordado y amnistía, son una línea roja que el PSOE no está dispuesto a traspasar. Por eso planean mantenerse fuertes en ese inmovilismo respecto a estas dos propuestas con el escenario de la repetición electoral de fondo ya que creen que la imagen del partido saldría reforzada de cara a su auténtico objetivo: recuperar la Generalitat en manos de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) en las próximas elecciones autonómicas.
Y es que Junts sabe que su gran competidor por el electorado independentista es ERC y que los malos resultados de los republicanos en los pasados comicios municipales, de mayo, y generales, de julio, han abierto una puerta importante para atraer votantes insatisfechos. Así, desde un sector de JxCat se considera que la apuesta por la moderación y el diálogo con el Gobierno de ERC ha fracasado y por eso es hora de imponer tesis más contundentes, pese a que sean vistas como intransigentes desde otras formaciones políticas.
Dentro de esta estrategia, estaría la voluntad de los afines a Puigdemont de impedir una investidura socialista, aunque intentando dejar al PSOE como los villanos de la situación por no aceptar sus propuestas de amnistía y autodeterminación sabiendo que son inviables dentro del contexto constitucional actual. Así, Junts podría vender al electorado que antepone los intereses de los catalanes soberanistas por encima de la gobernabilidad del Estado, al que acusan cada día de «represor».
La situación también les permitiría afear a sus oponentes de ERC sus acuerdos con los socialistas de la pasada legislatura, como la Mesa de Diálogo para desencallar el «conflicto político» entre España y Cataluña. La estrategia del sector más duro dentro de Junts puede tener una explicación si en los próximos meses siguen con su tarea de desgaste de la Generalitat de ERC y consiguen que se debilite al no alcanzar acuerdos para seguir gobernando, como aprobar los presupuestos. Esa situación podría suponer un adelanto electoral en Cataluña para el próximo año.
Sin embargo, las decisiones de estos afines a Puigdemont tienen descolocado al sector más moderado de Junts que teme que una repetición electoral puede provocar que saquen menos representación en el Congreso. Además, consideran que ERC podría contar con el apoyo de los socialistas catalanes para apuntalar la Generalitat y garantizar que se acabe la legislatura en Cataluña como está previsto en 2025, por lo que los republicanos podrían parar la fuga de votos que han tenido en los comicios de estos años.
Mientras Junts mantiene esta división sobre el posible escenario político a corto espacio en España, siguen con los contactos discretos para acordar una Mesa del Congreso la semana próxima. Son conscientes de que tienen la llave para apoyar un presidente del Congreso socialista y que sería como la antesala antes de abordar la posible investidura de Pedro Sánchez. Por eso, siguen con sus reclamaciones de conseguir un referéndum de autodeterminación sobre Cataluña acordado con el Estado junto con la amnistía de condenados y procesados por causas judiciales relacionadas con el 1-O.
Con esta amnistía sobre la mesa la presidenta de JxCat, Laura Borràs, difundió por las redes sociales que «esta semana es un buen momento para recordar que dos jueces, por ideología política o servilismo patrio, me condenaron a prisión habiendo rechazado las pruebas periciales que demuestran mi inocencia. El nivel de la justicia española es así lamentable». El Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) condenó a Borràs a 4 años y medio de cárcel, a 13 años de inhabilitación y al pago de una multa de 36.000 euros por falsedad en documento oficial y prevaricación administrativa al trocear 13 contratos para un amigo cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC). Sin embargo desde Junts se mantiene que la amnistía debe ser para «el conjunto de represaliados por el Estado» y no para casos individuales.
El PSOE avanza en las primeras cesiones a los nacionalistas para controlar el Congreso
Los socialistas “garantizan” a ERC grupo propio parlamentario pese a no reunir los requisitos, una exigencia compartida por JxCat
NotMid 11/08/2023
Hasta ahora las negociaciones del PSOE con los partidos a los que necesita para poder garantizarse la reelección de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno se habían mantenido en el terreno de la discreción más absoluta. No había trascendido que se hubieran producido varios contactos telefónicos bilaterales desde la noche del 23-J y tampoco la convocatoria ayer en Madrid de las primeras reuniones presenciales para empezar a allanar el terreno de los acuerdos.
Más allá del formato del diálogo, a una semana de la constitución del Congreso se han empezado a conocer también algunos detalles del contenido de esos posibles pactos en ciernes. Y entre las concesiones que está dispuesta a hacer la dirección de Ferraz destaca la de que como mínimo ERC -aunque es una exigencia compartida, a su vez, por Junts per Catalunya (JxCat)- podrá volver a contar con grupo parlamentario propio esta legislatura pese a haber dejado de cumplir los requisitos fijados en el Reglamento de la Cámara Baja para ello.
«Es una de las demandas lógicas y normales para poder trabajar con mejores condiciones», justificó ayer la número dos de la formación independentista de izquierdas, Teresa Jordà, tras entregar ayer sus credenciales en el Congreso. «En las primeras conversaciones que hemos tenido con el PSOE nos lo garantiza», añadía la diputada electa dando prácticamente por hecho su apoyo antes de asistir a la reunión a la que su partido había sido convocado por Rafael Simancas, secretario de Estado de Relaciones con las Cortes y Asuntos Constitucionales en funciones, además de emisario de Sánchez para estos contactos preliminares.
A diferencia de ERC, en JxCat siguen optando por el mutismo sobre cuál sería su posición en una eventual votación de investidura del aspirante a revalidar su mandato al frente de La Moncloa. Los siete representantes de la formación de Carles Puigdemont, con Míriam Nogueras a la cabeza, llegaron ayer juntos al hemiciclo de la carrera de San Jerónimo -donde cumplimentaron los trámites administrativos para adquirir la condición de parlamentarios- proyectando una imagen de unidad de la que careció su grupo en la última legislatura y sin hacer declaraciones a la prensa.
En todo caso, a cambio de las concesiones a los partidos independentistas el PSOE se estaría asegurando en primera instancia los apoyos necesarios para mantener la presidencia del Congreso. Ni siquiera en la cúpula de Sumar, el socio con el que aspira a reeditar el Gobierno de coalición, ponen en duda que le corresponda el puesto más destacado la Mesa por su condición de partido más votado dentro del llamado «bloque progresista».
La duda se centra ahora en si el perfil de la persona elegida en Ferraz para sustituir a Meritxell Batet, que ha renunciado a optar a la reelección, cuadra con las expectativas de los potenciales socios parlamentarios de Sánchez. En las quinielas ha empezado a circular el nombre de Francina Armengol, ex presidenta de Baleares y política con sensibilidad hacia los nacionalismos, que al recoger el miércoles su acta de diputada se refirió a la «España plural» que se había manifestado el 23-J para «progresar, avanzar y no ir para atrás», aunque ella misma se autodescartó al ser preguntada por dicha posibilidad.
En el PSOE volvieron a apelar ayer a la «discreción», «responsabilidad» y «prudencia» sobre las negociaciones. «Por supuesto, cuando haya acuerdos se explicarán públicamente para que la ciudadanía los conozca», zanjó el ministro de la Presidencia en funciones, Félix Bolaños, que junto con Simancas estaría ocupándose de las reuniones bilaterales con los distintos partidos, aunque en las filas socialistas ni siquiera han confirmado este extremo.
Lo que sí se conoce ya a través de los partidos con los que han mantenido contactos es que las negociaciones se van a llevar a cabo en dos fases: esta primera, exclusivamente para la composición de la Mesa del Congreso, que se constituye el jueves de la semana que viene. Será a partir de ese día -17 de agosto- cuando comenzarán los contactos para intentar armar el apoyo a la investidura.
Para el órgano encargado de regular la actividad parlamentaria y fijar el calendario de las sesiones, la aspiración del bloque de la izquierda es hacerse con cinco de sus nueve puestos. Además de la presidencia que se adjudicaría el PSOE, trataría de quedarse también con dos de las cuatro vicepresidencias y dos de las cuatro secretarías. Sumar ha esgrimido su derecho a ocupar alguna de sus posiciones como miembro de una eventual coalición y ha abierto la posibilidad de que se pueda dar cabida también a algún partido nacionalista.
Aun así, a priori, ni ERC, ni PNV ni EH Bildu tienen interés en conseguir asientos en la Mesa: en los dos primeros casos, se conformarían con presidir alguna comisión como en esta legislatura, mientras que la formación vasca ni siquiera reclamó hace cuatro años un cargo de esas características, según informa Europa Press. En el caso de Junts su prioridad es conseguir grupo propio aunque, al igual que la otra formación catalana, tampoco cumple las condiciones previstas en el Reglamento del Congreso.
La mayoría del órgano rector de la Cámara Baja la conseguirá el bloque que consiga hacerse con la presidencia. El PP no renuncia a este objetivo y para ello aspira a 172 votos -los 137 de su grupo, los 33 de Vox, el de UPN y el posible de Coalición Canaria-. Esto obligaría al PSOE a lograr el voto de todos los partidos minoritarios nacionalistas e independentistas para poder retener el cargo de tercera autoridad del Estado por detrás del Rey y del presidente del Gobierno.
El diputado de Vox Juan Luis Steegmann renuncia a su escaño en el Congreso. (Gustavo Valiente / Europa Press)
Juan Luis Steegmann, sustituto de Espinosa de los Monteros, renuncia a su acta de diputado y deja sus cargos en Vox
La crisis en la extrema derecha se agudiza tras la decisión del número seis de la lista por Madrid, que tampoco formará parte del grupo parlamentario en la próxima legislatura
NotMid 10/08/2023
La crisis se agudiza en las filas de Vox. El número seis de la lista por Madrid, Juan Luis Steegmann, ha comunicado estejueves que renuncia a su acta de diputado y no formará parte del grupo parlamentario en la próxima legislatura. El médico, que conseguía su escaño en el Congreso tras la marcha de Iván Espinosa de los Monteros, exportavoz de la formación, también ha avanzado que dejará sus cargos en la dirección nacional del partido.
Juan Luis Steegmann fue una de las figuras más relevantes de la extrema derecha en la última legislatura, aunque también recibió multitud de críticas por mostrarse públicamente a favor de las vacunas cuando el ala más reaccionaria del partido negaba de forma sistemática sus efectos. En las elecciones generales del pasado 23 de julio, Vox obtuvo cinco escaños por la circunscripción de Madrid, por lo que, en un primer momento, el doctor se quedaba fuera del hemiciclo. La salida de Espinosa de los Monteros suponía su entrada automática en la Cámara Baja, aunque el exdiputado ha preferido declinar la “oportunidad”.
En un comunicado, Steegmann reconoce que ha sido un “honor” haber formado parte del Congreso de los Diputados, pero avanza que no repetirá como parlamentario. “Vox inicia una nueva singladura, son otros lo que deben estar a bordo”, reza en la misiva. El médico también agradece “de todo corazón” la confianza que el líder del partido, Santiago Abascal, depositó en su persona. “Aquí está mi ánimo y mi brazo para lo que tú necesites”, añade.
“El día 24 de julio se cerraba la puerta para continuar siendo diputado, esa fue la razón para que presentara mi dimisión en el Comité Ejecutivo Nacional de Vox. Ahora se abre de nuevo la puerta del Congreso, pero no voy a entrar por ella”, continúa. Steegmann también ha aprovechado para calificar de “triste y sorprendente” la renuncia de Espinosa, un diputado por el que, según palabras propias, siente “profunda admiración”.
Carla Toscano firma su vuelta al Congreso
La renuncia de Juan Luis Steegmann supone la vuelta al Congreso de una de las diputadas más polémicas de la extrema derecha: Carla Toscano. La actual concejala del Ayuntamiento de Madrid figuraba como número siete en la lista, por detrás de Espinosa y del propio médico. En la pasada legislatura, Toscano fue una de las voces más criticadas del hemiciclo por haberle reprochado a la ministra de Igualdad, Irene Montero, que su “único mérito” fuese “haber estudiado en profundidad a Pablo Iglesias”. La madrileña ha sido una de las figuras más duras con el movimiento feminista en las filas de Vox.
Rufián (ERC), con Borrás y Nogueras (JxCat)Juan Carlos Hidalgo / EFE
El PSOE busca un candidato a presidente del Congreso del gusto del nacionalismo
Propondrá a una persona que le permita para mantener el puesto más relevante de la Mesa de la Cámara Baja y encarrilar la investidura
NotMid 10/08/2023
Hermetismo total en el PSOE. A una semana exacta de que se constituya la Mesa del Congreso, que será el termómetro del estado en el que se encuentran las negociaciones con vistas a una investidura, en el equipo de Pedro Sánchez se ha impuesto la omertá. Ni siquiera han confirmado quiénes son sus interlocutores en tan delicado proceso.
Entre los asuntos que se están abordando bajo el paraguas de la «discreción» y de la « prudencia» que se esgrime en público está el de la designación de su candidato a la presidencia de la Cámara Baja después de que Meritxell Batet anunciara el martes que no optará a la reelección. Lo único que apuntan fuentes gubernamentales consultadas por este periódico es que en el perfil de su sucesor/a primará que sea una persona del gusto de los nacionalistas.
Para poder mantenerse al frente de La Moncloa, Sánchez no sólo necesita que el PNV vuelva a apoyar su investidura y que ERC y EH Bildu cambien su abstención de 2020 por un voto afirmativo, lo que -contando con los escaños de Sumar y de BNG- supondría un igualar en 171 diputados al bloque asegurado en la derecha. La llave del desempate podría tenerla la representante de Coalición Canaria, que de momento sólo tiene previsto reunirse con el PP, así que la decisión final estará en manos de los siete parlamentarios de Junts per Catalunya (JxCat), que necesariamente tendrían que pasar del no de la última investidura a un sí.
Sobre las conversaciones con los independentistas catalanes para alcanzar ese objetivo, y en contraste con el silencio de los socialistas, desde las filas de Yolanda Díaz sí deslizaron ayer que «avanzan de forma positiva». «Todo el mundo es consciente de que el conjunto de formaciones progresistas queremos que esto salga bien por una razón muy concreta: no creo que nadie esté pensando en estos momentos en darle una segunda oportunidad a PP-Vox en una repetición electoral que nadie entendería y además con un Vox cada vez más radicalizado», apuntó Ernest Urtasun, portavoz de la coalición que ha sustituido a Unidas Podemos en el Congreso, en la Ser.
En el partido de Carles Puigdemont, sin embargo, se apresuraron a enfriar el optimismo moderado desplegado por Sumar en lo relativo a la evolución de las negociaciones. El encargado de desactivarlo fue su propio secretario general, Jordi Turull, a través de un sucinto mensaje de Twitter en el que negaba que se haya producido algún movimiento: «Primera noticia, al menos por lo que respecta a Junts».
El primer examen oficial de esta política de pactos, en todo caso, será el próximo jueves, el día en el que se comprobará si el PSOE ha logrado reunir los apoyos necesarios para retener el puesto más relevante de la Mesa del Congreso, que supone ser la tercera autoridad del Estado. En la dirección que encabeza Díaz han dejado claro que no cuestionan que su socio de Gobierno siga ostentando la presidencia porque es «el que tiene más votos del bloque», lo que zanja la opinión de otras fuerzas integradas en su espacio, como Compromís, donde habían deslizado que no debería designarse para el cargo «sí o sí» a un diputado del PSOE.
«Los partidos nacionalistas tienen que formar parte del acuerdo con la voluntad de ser socios parlamentarios en la próxima legislatura», especificó Urtasun, a su vez, en respuesta a la cuestión de si a estas formaciones debería adjudicárseles alguno de los nueve puestos del órgano que organiza la actividad de la Cámara Baja. «Luego qué sillones ocupan, si uno es vicepresidente primero o segundo, secretario tercero o va estar o no, esto lo estamos viendo estos días y lo acabaremos de anunciar cuando lo tengamos», agregó.
El portavoz de Sumar esbozaba así implícitamente la posibilidad de que ERC y Junts, con siete diputados cada uno, se conformen con tener un grupo propio en el Congreso. Ninguno de ellos cumple con los requisitos establecidos en el reglamento para ello: tener al menos 15 escaños o, en su defecto, cinco y al menos el 15% de los votos correspondientes a todas las circunscripciones en las que hubieran presentado candidaturas o el 5% de los emitidos en el conjunto de España. Así que la posibilidad de que se les aplique una excepción quedará al albur de lo que decida la Mesa, para lo que les interesa que en su composición haya una mayoría que les favorezca.
Mientras la cuenta atrás para la constitución del Congreso avanza, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, advirtió ayer que la legislatura que está a punto de comenzar caminará «al filo de la navaja» debido a un resultado electoral «diabólico». «Que la gobernación de España dependa de un prófugo de la Justicia, de algo que realmente puede decidir en el Estado pero sin renunciar a acabar con el Estado, es triste en términos generales», se lamentó el barón socialista en una entrevista en la televisión pública de su comunidad, en alusión al papel protagonista de la formación de Puigdemont.
En paralelo a las negociaciones de ámbito parlamentario, los socios que aspiran a reeditar el Ejecutivo bicolor también han iniciado los contactos con escasa satisfacción -al menos en público- en el ala de Sumar, que ha pedido al equipo de Sánchez «que se siente a negociar en serio». «En los primeros contactos que estamos manteniendo hemos notado una cierta falta de ambición, las propuestas que nos están trasladando son claramente insuficientes», advirtió ayer Urtasun, que aun así dio por asegurado que «a nadie se le escapa que va a haber Gobierno de coalición».
Le respondió el ministro de Industria en funciones, Héctor Gómez, con un llamamiento a la prudencia para que las declaraciones que se hagan se lleven a cabo en el ámbito de la negociación. En declaraciones a los medios en Adeje (Tenerife) el también diputado del PSOE advirtió que «no es el momento de escenificar y sí de alcanzar acuerdos».
Cuca Gamarra.J.J. GUILLÉN / EFE
El PP anuncia reuniones inmediatas con Coalición Canaria para intentar la investidura de Feijóo con 172 votos
En ese escenario a Pedro Sánchez no le valdría con una abstención de JxCat
NotMid 09/08/2023
En la sede del PP no han dejado de hacer cuentas desde la noche del 23-J. Y la última operación aritmética que tienen en sus cuadernos de notas les lleva a la conclusión de que existe la posibilidad de que su líder pueda acceder a La Moncloa con el voto a favor de 172 diputados, cuatro menos de los que marcan la mayoría absoluta en el Congreso.
“Ha sido un avance importante que Coalición Canaria (CC) haya mostrado su disposición a apoyar la investidura”, ha valorado este miércoles Cuca Gamarra, la secretaria general de Génova, que ha anunciado que en los “próximos días” mantendrán “encuentros y reuniones” con el partido insular para “avanzar en ese posible apoyo” a su candidato. “Nos permitiría incrementarlos 171 escaños que en estos momentos ya han confirmado el respaldo a la investidura de Alberto Núñez Feijóo”, ha recalcado.
En este escenario, a Pedro Sánchez no le valdría con una abstención de Junts per Catalunya (JxCat) para optar a la reelección, sino que tendría que negociar el voto favorable de la formación que lidera Carles Puigdemont. Suponiendo que el PSOE (121 escaños), además de con los diputados de Sumar (31), pudiera contar con los de ERC (siete), EH Bildu (seis), PNV (cinco) y BNG (uno, empataría numéricamente con la adicción de los del PP (137), Vox (33) y UPN (uno).
De ahí la importancia de que CC pueda decantar la balanza hacia la derecha. Aunque en la primera ronda de votaciones el candidato a la presidencia del Gobierno necesita una mayoría absoluta, en la segunda sería suficiente con que obtuviera más síes que noes.
“Al partido que ganó las elecciones le corresponde intentar sacar adelante esa investidura. Por lo tanto, queremos reiterar nuestra disponibilidad: si el jefe del Estado encomienda a Alberto Núñez Feijóo la investidura cumpliremos con nuestra responsabilidad”, ha recalcado Gamarra.
“IMPORTANTES AVANCES”
En el PP consideran que se han producido “importantes avances” en los últimos días, entre los que destacan que Vox “haya expresado su voluntad de facilitar que gobierne la fuerza más votada en solitario”. También subrayan que UPN “haya confirmado y reiterado su disposición” a votar a favor.
“Estos próximos días mantendremos encuentros y reuniones con CC para definir la agenda canaria y avanzar en ese apoyo a la investidura. Esto nos situaría a una distancia de cuatro o cinco escaños de lograr una mayoría absoluta, pero lo que está claro es que nos sitúa cuando menos a 50 escaños de donde se encuentra el segundo candidato más votado, que es Pedro Sánchez”, ha subrayado la secretaria general de los populares.
En Génova insisten en que su objetivo es formar “un Gobierno en minoría” que “se sustentaría en acuerdos constitucionales y de amplias mayorías”: “Estamos convencidos de que es la mejor fórmula posible para dar estabilidad a nuestro país y por eso es en la que estamos trabajando”.
Feijóo, este domingo en Cambados.ROSA GONZÁLEZ
Génova se lanza a por los seis escaños que necesita tras el paso al lado de Vox y promete que “sólo habrá ministros del PP”
Bendodo cifra en 170 los apoyos garantizados y augura que lograrán convencer a UPN y CC en las próximas horas
NotMid 07/08/2023
El Partido Popular sube una marcha y aprieta el acelerador tras el paso a un lado dado por Vox. Los de Alberto Núñez Feijóo tratarán de articular un Gobierno “en solitario, amplio y fuerte” que permita neutralizar el plan de Pedro Sánchez de alcanzar la investidura con el apoyo del independentismo a pesar de no ser el más votado el pasado 23-J.
“Sólo habrá ministros del PP”, aseveró este lunes el coordinador general popular, Elías Bendodo, que acusó a Sánchez de “propiciar” el bloqueo al ni tan siquiera felicitar al vencedor de las elecciones: “Para sentarse a hablar tiene que reconocer la victoria del PP”.
A ojos del PP, la decisión de Vox de facilitar la investidura de Feijóo y no exigir formar parte del Consejo de Ministros “cambia las reglas del juego” y obliga a los partidos que negaban su respaldo al PP, como el PNV, a reconsiderar su posición. “Facilita una posible investidura”, opinó Bendodo en una entrevista en Cope.
“El resto de partidos se ha quedado sin excusas”, reconocen fuentes de la cúpula popular este lunes para celebrar cómo el paso de los de Santiago Abascal supone un empujón para las aspiraciones de Feijóo. Un objetivo que sigue estando muy lejos, pero que avanza a pesar de los intentos de Ferraz por zancadillear, dicen, la investidura del líder popular.
Precisamente en el campo de las negociaciones, el número tres del PP confirmó que Feijóo ya cuenta con 170 respaldos confirmados, y que en las próximas horas podría aumentar a 172 si se confirma el apoyo de los diputados de Coalición Canaria y UPN.
Así, el PP trata de mostrarse mucho más próximo a la compleja opción de formar gobierno que hace unos días. El recuento de Génova da clara ventaja al PP sobre el PSOE: a día de hoy Feijóo sólo necesitaría seis escaños más para ser presidente, mientras que Sánchez, para lograrlo, tendrá que poner de acuerdo y dar cabida en su ejecutivo a 24 formaciones, según especificó Bendodo.
De hecho, con el decisivo comunicado de Vox de este domingo el PP cerró definitivamente la puerta a incluir a cualquier otro partido en la ecuación gubernamental y este lunes Bendodo prometió un Consejo de Ministros que, a pesar de estar únicamente formado por miembros del PP, fuera “amplio” y en él tuvieran cabida “muchas sensibilidades”
Alberto Núñez Feijóo, en Cambados.ROSA GONZÁLEZ
Abascal levanta por primera vez el veto al PNV para que Feijóo frene a Sánchez: “Ya nadie tiene excusa”
Vox renuncia a exigir entrar en el Gobierno del PP a cambio de sus votos
NotMid 07/08/2023
Vox da a un paso a un lado. No quiere ser utilizado como la “excusa” de quienes no facilitarían la constitución de un Gobierno en el que estén incluidas sus siglas. Traducido a aritmética parlamentaria: ahora se ofrece a apoyar la investidura de Alberto Núñez Feijóo sin exigir asientos en el Consejo de Ministros para que el candidato del PP tenga opciones de reunir la mayoría que necesita en el Congreso de los Diputados.
Este nuevo giro estratégico en el tablero postelectoral pone el foco en el PNV, que había vetado cualquier “operación” en la que la formación más situada a la derecha del espectro político entrara en “la ecuación”. Para tratar de convencer a los jeltzales, en Génova estarían dispuestos a darles un puesto en la Mesa del Congreso y Vox, al mismo tiempo, se quedaría fuera por voluntad propia.
Aunque los estatutos del partido de Santiago Abascal prohíben respaldar un Ejecutivo en el que estuvieran presentes los nacionalistas, deslizan que no pedirían explicaciones al aspirante a la Presidencia sobre dónde consigue el resto de los votos para su eventual nombramiento. Por primera vez, Vox levanta su veto al PNV para intentar frenar un Gobierno de Pedro Sánchez con los independentistas y Sumar.
La relación de PP y Vox entra en una nueva fase. Convergen dos semanas después del 23-J, tras un encadenamiento de reuniones, llamadas y equilibrios que empezaron entre reproches. Porque los resultados no fueron los esperados para ninguno de ellos. De hecho, en ambas direcciones se pasaron las primeras horas de la resaca del escrutinio con acusaciones por sus respectivas campañas, mientras desde el PSOE se anticipaba la continuidad en La Moncloa del presidente en funciones con un nuevo pacto de investidura modelo Frankenstein.
Dos días después, el miércoles 26 de julio, los de Abascal hacían un ligero movimiento ofreciendo su ayuda para evitar la formación de “un Gobierno de destrucción nacional”. Lo acompañaron de la propuesta al líder de los populares de que consiguiera reunir el apoyo de “cinco o seis diputados socialistas buenos” que se desmarcaran de su partido para apoyarlo a él y frenar así un nuevo Ejecutivo de izquierdas basado en acuerdos con el independentismo. En ese momento, aún mantenían el no a cualquier arreglo que incluyese al PNV.
Mientras el debate público se quedaba girando en torno al transfuguismo, en la cúpula de Génova ya se apreció que Vox había hecho un gesto saliéndose de forma implícita de una potencial ecuación gubernamental. Y aún faltaba el recuento del voto exterior, que acabó dando un escaño más al PP a costa del PSOE. En el partido ganador del 23-J confiaban en que este nuevo escenario les abriera una puerta poder recabar el apoyo del PNV y Coalición Canaria (CC).
Horas después del lanzamiento de la infructuosa propuesta de los “socialistas buenos”, Feijóo y Abascal -que habían hablado por teléfono al menos en dos ocasiones desde la noche electoral- mantuvieron un encuentro del que no ha trascendido ni el lugar, ni la duración, ni tampoco los temas tratados. De hecho, no fue hasta el lunes 31 de julio cuando se tuvo conocimiento del mismo después de que fuera desvelado por el partido minoritario en dicha conversación.
La víspera, se había publicado una entrevista con el popular Juanma Moreno en la que afirmaba que “la única manera” que tienen los suyos de volver a gobernar en España es “crecer por el centro sin mirar a Vox”. La posición del presidente andaluz contrastaba con la de otra baronesa con mayoría absoluta, la madrileña Isabel Díaz Ayuso, que cuatro días antes había centrado su discurso en alertar sobre que Sánchez “venderá la nación” a los independentistas para poder seguir en La Moncloa.
Al debate interno en el PP sobre cómo afrontar su relación con los de Abascal se sumaba la negativa del presidente en funciones a reunirse con Feijóo tras asumir que obtendría los apoyos suficientes para volver a ser investido a pesar de no ser el líder más votado. El portazo se producía en un intercambio de cartas durante el domingo 30 de julio en respuesta a la abstención de los socialistas que trataba de buscar el ganador de los comicios del 23-J.
Cuatro días más tarde, el 3 de agosto, trascendía que los populares habían cerrado un nuevo pacto con Vox para constituir un gobierno autonómico, en este caso en Aragón, a cambio de dos consejerías, una de ellas con rango de Presidencia, y de un documento con 80 puntos. Ni el futuro presidente regional, Jorge Azcón, estuvo en la foto de la firma ni Feijóo hizo referencia alguna al respecto en su cuenta de Twitter.
No fue el caso de Abascal, que escribió: “Los acuerdos no se deben explicar en términos de vencedores y vencidos, sino como principios de colaboración y respeto mutuo. Nuestro programa estará razonablemente incluido en las políticas de Aragón, según el resultado electoral. Así se levantan diques contra las amenazas de Sánchez y sus cómplices”.
La última pieza de este puzzle de dos semanas, hasta llegar a una oferta que es la vía más factible, y aun así enredada, de que Feijóo llegue a Moncloa, la puso este domingo Vox. Confirmaron que sus 33 diputados apoyarían “una mayoría constitucional” que evite la “amenaza” de que España esté “en manos de sus enemigos”. Lo hicieron a través de un comunicado difundido exactamente media hora antes de las 12, cuando estaba prevista una comparecencia de Feijóo ante la prensa en la que calificó este paso de “un avance”.
“GOBIERNO LIBRE” VS “GOBIERNO DE COALICIÓN”
En la dirección del PP consideran que “el resto de partidos se ha quedado sin excusas”. “España tiene la oportunidad ahora de contar con un Gobierno libre frente a la opción de uno de coalición”, precisan. Además, señalan que en este momento su líder tiene “171 síes garantizados” -contando los de Vox y UPN-, a la espera de lo que decida CC, y el candidato socialista, “50 menos”.
Y agregan: “Todos los que le lleguen a Sánchez serán a través de las cesiones que hagan los 18 partidos que conforman Sumar y los que necesita de otros partidos nacionalista o independentistas. No puede superar esa cifra si no cuenta con todos y cada uno de los partidos nacionalistas, sin excepción”
La investidura de Feijóo sería por tanto factible si PNV modificara su posición inicial para apoyar ahora al bloque de la derecha, en el que CC también se ha mostrado dispuesto a entrar siempre que se atiendan las peticiones de Canarias.
López Miras, presidente en funciones, toma posesión como diputado de la Asamblea de Murcia (14 de junio) EFE
El PP replica en los pactos autonómicos con Vox el modelo de “desgaste” de Ciudadanos
Los pactos dan carteras secundarias a los de Santiago Abascal, alguna de potencial ideológico
NotMid 07/08/2023
Son cinco los acuerdos autonómicos que PP y Vox tienen en este momento y cuatro los gobiernos de coalición que han articulado en Extremadura, Castilla y León, Aragón y la Comunidad Valenciana. En todos ellos se repite el mismo patrón: los populares ostentan las grandes áreas, las fundamentales para la gestión, como Sanidad, Educación, Transportes o Hacienda y sus socios cuentan con las de menores competencias o menor presupuesto, aunque, algunas, de un potencial uso ideológico comprometedor para Génova. Un calco de lo que ya había sucedido en 2019 con Ciudadanos en lugares como la Comunidad de Madrid o Andalucía.
«La gestión tenemos que llevarla nosotros, si no no se sostiene el Gobierno», detalla en conversación con EL MUNDO un cargo del PP sobre los acuerdos sellados recientemente con Vox, que se ha quedado con consejerías de Agricultura, Ganadería, Justicia o Cultura, siendo esta última la que más carga política puede conllevar. «Que ellos se desgasten en lo ideológico, nosotros a la gestión», señala otro dirigente de los populares. Y un tercero advierte: «No soy partidario de dejarles Cultura, te pueden crear un incendio como vemos en algunos ayuntamientos», en referencia a los protestas en Madrid, Cantabria o Castilla y León por obras de teatro que han sido censuradas o canceladas por concejales de Vox.
En lo que sí coinciden todas las fuentes consultadas es en que la estrategia que se está siguiendo en los gobiernos de coalición es la misma que con Ciudadanos. «No tienen experiencia y piden consejerías con pocas competencias», señala un cargo popular. «Somos la fuerza más votada en todos esos gobiernos, tenemos que llevar el peso de la gestión», remarca un segundo. Así lo hicieron los populares, en marzo de 2022, en Castilla y León cuando suscribieron el primer acuerdo con Vox.
Atendiendo al Presupuesto presentado para 2023, el área que maneja la menor cuantía, sin incluir la Presidencia, es Cultura, con 212 millones, y está en manos de Vox. La segunda con menores partidas es Industria, Comercio y Empleo con 445 millones, también para los de Abascal. Y también en la parte baja está la tercera que manejan, Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (566).
El mismo efecto se da en el reparto de competencias, en ninguno de los cuatro acuerdos Vox ha conseguido hacerse con las grandes áreas. Ni Sanidad ni Educación ni Hacienda, sobre las que se asientan todas las administraciones autonómicas. En el caso de las dos primeras por volumen de presupuesto, en la última, por ser quien maneja las cuentas. Pero tampoco con Políticas Sociales, una de las áreas sobre las que la formación de Abascal siempre ha puesto el foco por ser la encargada de cuestiones como Igualdad, Inmigración o Derechos LGTBI, con los que Vox siempre se ha mostrado beligerante.
«Una cosa es abrir debates públicos y otra cosa gestionar esas áreas», indica un diputado del PP. «No las quieren porque entonces se les caería el discurso, porque se chocarían contra la realidad», agrega un cargo del partido. En su lugar, Vox se ha focalizado en áreas centradas en Agricultura, Ganadería, Pesca o Gestión Forestal, con menores competencias, pero con un caladeros de votos donde los de Abascal siempre han pescado. Especialmente en territorios como Extremadura o Castillay León, lugares donde tienen esas consejerías. En el caso extremeño muy menguada en competencias, ya que Agricultura y Ganadería lo mantiene el PP y Vox se ha quedado con la Gestión Forestal, un arma de doble filo en una región con abundantes incendios.
Otro de los departamentos que ha caído en manos de la formación de derecha radical es Justicia, como en Aragón o Comunidad Valenciana. A priori un área fuerte de Gobierno. Sin embargo, las competencias de las autonomías en esta materia son escasas, apenas el pago a las nóminas de los funcionarios o el mantenimiento y reforma de las sedes judiciales, pues el grueso recae en el Estado.
No obstante, en Valencia, Elisa Núñez cuenta con Interior en su poder, que supone una relación directa con la Delegación de Gobierno o en asuntos de seguridad. Pero su influencia política es limitada. Lo mismo sucede en Aragón con la Vicepresidencia de Alejandro Nolasco, en la que se incluyen, al margen de la citada Justicia, Despoblación y Desarrollo Territorial. «Son tres direcciones generales unidas, tienen poco poder», indican desde el PP en la región.
«En política tan importante es entrar en gobiernos como saber negociar para tener áreas con influencia y que no sólo te desgasten», resume cargo popular, que concluye: «Que se lo digan a Ciudadanos».
Pedro Sánchez atiende a los medios en Bruselas / AP
Un bloqueo en Madrid amenaza el ‘semestre de oro’ para la UE
Bruselas calla sobre la incertidumbre que marca la Presidencia europea de España
NotMid 07/08/2023
Para algunos supone la catarsis. Para otros, la irrelevancia. Pero no es ni un escenario, ni el otro. El impacto que dejan los inconcluyentes resultados del 23 de julio sobre la marcha de la Presidencia española de la UE es limitado, y envenenado. El trabajo técnico, que lleva meses de preparación, no se verá alterado por la incertidumbre política. Pero hay una secuela peligrosa: que el huracán electoral y la incertidumbre gubernamental desluzca el semestre y manche la imagen del país.
La dificultad de formar gobierno o en última instancia de repetición electoral a finales de año amenaza con contaminar el clima europeo de humo nacional, de estado continuo de campaña y de descuido. El arranque de la Presidencia española se produjo la cumbre UE-CELAC y dejó ya un apunte preocupante. El presidente Pedro Sánchez se ausentó de la cena para asistir a un mitin y no compareció en la rueda de prensa final para acudir a otro acto electoral.
“El mayor riesgo que tenemos es que España va a estar distraída en un momento crucial para la Unión Europea”, explica Camino Mortera, experta en política europea y miembro del Centro para la Reforma Europea. Los próximos meses son de vital importancia para el bloque comunitario. El cronómetro corre con un agosto casi paralizado, mientras que legislaciones de alto voltaje enfrentan su recta final. España tiene por delante la difícil misión de arbitrar, convencer y generar consensos entre sus socios comunitarios en materias tan divisivas como la reforma de las reglas fiscales o el pacto de asilo.
La reedición de un Gobierno liderado por Sánchez es el escenario que más peso toma. Pero en esta ocasión se ha colado una nueva variante: la llave para formar Ejecutivo pasa por Waterloo. La Comisión Europea esquiva cualquier valoración a los debates de política nacional. Mucho menos a resultados electorales. Pero hay algo que sí llevan tatuado en el Berlaymont, la sede de la Comisión Europea: estabilidad y predectibilidad. Bien lo sabe la italiana Giorgia Meloni, que tras semanas de incertidumbre y algo de recelo por sus postulados ultranacionalistas, fue recibida con honores en la capital comunitaria, tras certificar su “compromiso pro-europeo”.
Por ello, en Bruselas no solo miran con atención a la formación de Gobierno en España, sino qué tipo de Gobierno. Y uno inestable y frágil puede ser muy mala noticia en tiempos en las que sus principales potencias caminan sin un liderazgo fuerte. La Alemania de Olaf Scholz naufraga en una crisis de autoridad, la Polonia de Mateusz Morawiecki continúa su choque con Bruselas y la Francia de Emmanuel Macron impone su visión geopolítica del mundo sorpasando la línea común, como se vio con China.
En Bruselas, las tres instituciones guardan silencio. Fieles a la tradición sacrosanta de mantener la neutralidad, todas ellas evitan valorar los resultados electorales el 23-J, en público y en privado. “Las elecciones son una parte natural de la democracia y corresponde a cada Estado miembro decidir cuándo celebrarlas. No es la primera vez que un país las tiene coincidiendo con la Presidencia. España continuará desarrollando las medidas necesarias para el buen funcionamiento de la Presidencia”, se limitan a analizar fuentes europeas.
VAIVÉN DE SILLAS
Con una media de cambios de gobierno cada dos años y medio, el vaivén de sillas es un habitual en los Estados miembros. Pero la particularidad del caso es que llega en medio de la Presidencia. Y no de una cualquiera: en pleno semestre de oro, es decir, el último completo antes de la renovación de la legislatura comunitaria. “La Presidencia no es tan importante. Es una responsabilidad modesta. Tu papel es limitado a no ser que sea una Presidencia muy buena, que solo la hacen Francia y Alemania, o que sea una muy mala, como la de Rumanía”, explica Mortera.
España tiene por delante la ardua tarea de sacar adelante unos presupuestos que mantengan el déficit a raya y que cumplan con los dictámenes de Bruselas. Un bloqueo por parte de los socios de Gobierno es un escenario que puede sumir al país en una crisis política. “Si te presentas en Europa a intentar ser un país influyente con un Gobierno que depende de un señor que es fugitivo en Bélgica [en alusión a Carles Puigdemont] y que te puede hacer saltar el Gobierno en cualquier momento, en este escenario creo que para Bruselas es mejor que haya una repetición electoral con un resultado más claro y con un Gobierno capaz de gobernar que un Gobierno frágil», zanja Mortero.
OBJETIVO: 100 DOSIERES
El hecho de que los próximos meses se desarrollen con un Gobierno en funciones no debería embarrar el trabajo en torno a las legislaciones pendientes. España se fija poner el broche a unos 100 de los 200 dosieres europeos en nevera. El trabajo técnico está adelantado y, de hecho, las Presidencias de turno están diseñadas para blindarse de turbulencias nacionales.
Bien lo sabe Suecia: sufrió un cambio de Ejecutivo radical en medio de la suya. La llegada de ministros, muchos con nula experiencia en materia europea, no ha deslucido su papel. “Un Gobierno en funciones no debe ser visto como un síntoma de inestabilidad per se: dependerá del tiempo que esté vigente y/o la necesidad de impulsar políticas de mayor calado no contempladas entre sus competencias”, asegura Miguel Ferrer, vicepresidente ejecutivo de Estrategia y Agenda Pública de Adigital.
Bélgica superó la suya en 2010 con un equipo en funciones. Y los belgas, que toman el relevo español el 1 de enero, miran con atención. Pesa la sombra de que queden sin cerrar demasiadas legislaciones, desde su equipo aseguran que, de momento, “la preocupación es limitada”. La próxima estación de la Presidencia espera en Toledo, tras, probablemente, una primera ronda de consultas del Rey una vez constituidas las Cortes. El 29 y 30 de abril se celebrará en la capital castellanomanchega las reuniones de Defensa y Exteriores, cruciales en un contexto de guerra en Ucrania.
El gigantesco contrapoder del PP si Sánchez es presidente: 177.000 millones y hasta 2.000 cargos
De ser investido, deberá convivir con un gigantesco poder autonómico del partido de Alberto Núñez Feijóo
NotMid 05/08/2023
El PSOE, nada más concluir el recuento del 28-M, se aferraba a una extrapolación de resultados para mantener en pie el discurso de que el PP no conseguiría alzarse con la victoria en las generales del 23-J, Argumentaban que su pérdida de votos -400.000 en comparación con 2019- no suponía un obstáculo insalvable para la remontada. Señalaban que en muchos municipios se dejaban la mayoría por sólo un concejal y que en algunas autonomías superaban al PP –Extremadura o Canarias– o aumentaban su cosecha -en Comunidad Valenciana– aunque insuficiente para plantar cara al subidón del bloque de la derecha. Aquel anhelo, para tapar la sangría del 28-M, se cumplió sin embargo el 23-J. Lo que no pueden obviar los socialistas es que su pérdida de poder autonómico fue enorme. Y ese agujero es gigantesco en poder -como oposición a Pedro Sánchez si es investido- y es, también, cuantificable: en dinero -capacidad política- y sillones -sustento orgánico de los partidos-.
Un repaso al vuelco que se produjo en las Comunidades arroja una cifra de 77.700 millones de euros que ahora pasarían a ser gestionados por los populares y más de 2.000 puestos entre altos cargos, personal de confianza y eventuales pendientes de relevo. Un botín compartido ya con Vox, pero en lo menos sustancial, en tres comunidades, tras la firma del acuerdo en Aragón este viernes.
Han cambiado de signo político La Rioja, en la que los populares obtuvieron mayoría absoluta; Extremadura, en la que ganó el PSOE en votos pero empatando en escaños con el PP, que se salvó de la repetición electoral tras ceder a Vox; Cantabria, donde ganó el PP y se benefició de una abstención del PRC; Canarias, donde el PP cerró un pacto para gobernar con Coalición Canaria pese a haber ganado el PSOE; Aragón, donde el PP venció ampliamente; Comunidad Valenciana, en la que los populares ganaron sin discusión y ya han pactado el gobierno con Vox y Baleares, donde el tándem PP-Vox también supera la mayoría absoluta, aunque los de Santiago Abascal no han logrado forzar su entrada en el Gobierno.
En todos estos territorios el poder se traspasa desde el PSOE hacia el PP, trasladándose con él el Presupuesto y organigramas de gobierno. Los populares se hacen de este modo con una presencia preponderante en buena parte del territorio con capacidad para gestionar y repartir empleos y sueldos. Una facultad que viene a sumarse a la que ya disponen en la Comunidad de Madrid, donde han vencido con amplia mayoría absoluta; en Andalucía y Galicia, donde no se celebraron elecciones en 2023 pero en las que cuentan desde los últimos comicios con poder total; y en Castilla y León y Región de Murcia, en la primera gobernando ya en alianza con Vox y, en la segunda, repitiendo victoria y pendiente de la paz con Vox.
La Comunidad Valenciana, objetivo principal de los dos grandes partidos en las elecciones del 28-M, es la que más poder ha traspasado al PP. Más de 30.000 millones de presupuesto y un millar largo de cargos designados por los socialistas repartidos entre presidencia, dos vicepresidencias y y nueve consejerías, todos ellos con multitud de puestos distribuidos en direcciones y subdirecciones generales, secretarías, servicios, asesorías, institutos, entes y organismos públicos. El organigrama con Mazón no se cerró y aunque prometía reducirlo, la dimensión previa es jugosa.
BALEARES, SEGUNDO MÁS ALTO
En Islas Baleares los populares heredaron el segundo presupuesto más alto, con 15.226 millones. El número de cargos de todos los niveles que podían ser relevados ascendía a más de 200. No obstante, la relación de puestos que se incluye en su organigrama era inferior a la de Aragón, donde la incertidumbre se mantuvo hasta la noche del pasado jueves. La comunidad gobernada hasta el 28-M por Javier Lambán entregará a PP-Vox la gestión de un presupuesto de 8.250 millones y casi 300 cargos a relevar.
La segunda autonomía con mayor presupuesto es la de la Comunidad Canaria, con 11.059 millones en el presente ejercicio. Sin embargo, pese a esta cifra, es una de las más austeras en cuanto a puestos ocupados: CC y PP se debían repartir 113 de inicio.
Extremadura, por su parte, cuenta con 7.776 millones y 237 plazas que ocupaba hasta ahora el Ejecutivo de Guillermo Fernández Vara. Cantabria traspasó un presupuesto de 3.507 millones y 133 cargos, en tanto que el Ejecutivo de La Rioja, con el presupuesto más modesto -1.824 millones-, incluía 120 empleos.
No obstante, y pese a esta herencia, los nuevos ejecutivos populares tendrán que acomodarse en lo que queda de ejercicio a las previsiones de gastos e ingresos diseñadas por los respectivos gobiernos socialistas previos. A partir del 2024 eso cambiará y será el PP el que gestione las comunidades conforme a su principio general que apuesta por los bajos impuestos, el incentivo a la iniciativa privada y el fomento de la actividad empresarial. La principal asignatura que deberán afrontar pasa por demostrar que con esta fórmula no se produce un deterioro de los servicios públicos.
Y en el ámbito de la dimensión del aparato político queda por ver si los nuevos gobiernos autonómicos en manos de los populares siguen la máxima de austeridad defendida por Alberto Núñez Feijóo para el Ejecutivo central. El líder del PP acusaba a Sánchez de diseñar un Gobierno elefantiásico disparando así el gasto político y prometía, si ganaba las elecciones del 23-J, suprimir y agrupar ministerios, sin superar la quincena.
Yolanda Díaz (Sumar), Pedro Sánchez (PSOE), Alberto Núñez Feijóo (PP) y Santiago Abascal (Vox)
Tras las elecciones generales del 23-J: que la política no se olvide de lo importante
“El verdadero sentido de nuestra democracia es crear las condiciones para una vida mejor, avanzar en derechos y promover la convivencia”
05/08/2023
Cerca de tres semanas del 23-J y el escenario con el que nos vamos de vacaciones es, aunque sorprenda, incluso más incierto que cuando comenzó la campaña. Tras unas elecciones marcadas por discursos donde los partidos intentaban diferenciarse para asegurar el mayor número de escaños posibles, los resultados no han traído claridad suficiente. Lo preocupante, más allá del ruido mediático -que seguirá presente nos guste o no- es que tanto durante la campaña y los debates, como en esta fase de construcción de pactos, ha habido y sigue habiendo silencios respecto a temas trascendentales que deberá resolver la siguiente legislatura.
Si bien el clima político de las últimas semanas ha hecho difícil introducir relatos en tono propositivo acerca del futuro del país, muchas demandas urgentes tampoco se han abordado en los programas electorales, que son, probablemente, el único sustento con el que cuenta la ciudadanía para ejercer una rendición de cuentas en los próximos cuatro años. Incluso ahora, cuando en teoría se van a negociar las líneas rojas de las diferentes formaciones políticas de cara a construir consensos, siguen sin mencionarse y esos programas corren el riesgo de convertirse en papel mojado.
Plataformas como Polétika han trabajado a lo largo de esta fugaz campaña electoral, analizando en profundidad las propuestas y los discursos de los principales candidatos y partidos en torno a tres temáticas trascendentales: planeta, personas y democracia. Esto ha permitido poner en evidencia esos silencios que dejan en el olvido las demandas urgentes de la ciudadanía.
Los nadies: los olvidados de siempre
Hay colectivos que históricamente han sido dejados de lado por muchas de las políticas públicas. Si bien en los últimos años medidas concretas como el Ingreso Mínimo Vital (IMV) y la mejora del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) han supuesto cambios significativos para los más vulnerables, hay adeudos sociales latentes y que no deberían olvidarse en las negociaciones y pactos para construir un nuevo Gobierno.
Solamente tres partidos llevaron a la campaña medidas de lucha contra el sinhogarismo, pocos si tenemos en cuenta, por un lado, la magnitud de este problema y su impacto en miles de familias y, por otro, que los partidos de la derecha han hecho bandera de la lucha contra la ocupación intentando convertirla en una cuestión trascendental cuando los datos muestran otra realidad muy distinta.
Algo similar sucedió con las trabajadoras del hogar y cuidados. Todos hemos escuchado a los candidatos llenarse la boca hablando sobre la relevancia de la conciliación, el aumento de la natalidad y la necesidad de abordarlo de manera holística. Y, sin embargo, el colectivo que sostiene en gran medida los pilares del sistema productivo ha estado prácticamente ausente a lo largo de toda la campaña, lo cual esperemos que no se repita en esta fase de negociaciones.
Y si de invisibilizados se trata, hay que mencionar a la población migrante, un colectivo que en gran parte ni siquiera cuenta con el derecho al voto y que se queda una vez más sin consensos para su regularización, para la agilización de los procesos de extranjería o para la protección de los derechos de quienes cruzan las fronteras para proteger sus vidas.
Mucho ruido y pocas propuestas reales
Y luego está uno de los temas más recurrentes de estas elecciones: la protección de la democracia. A lo largo de la campaña y desde el 23 de julio, los representantes de los partidos no dejan de mencionar a la democracia y la necesidad de protegerla y defenderla, como si de un ente abstracto e ideal se tratase. ¿Pero hay realmente propuestas concretas para ello?
La mejora de los mecanismos y canales de participación ciudadana es una demanda histórica. En un contexto altamente crispado y con una sociedad que desconfía de la clase política podría parecer lógico que los partidos propongan medidas concretas sobre ello, y sin embargo, EH Bildu no ha hecho ninguna propuesta para mejorar la participación, Vox lo ha dejado todo en manos de los referéndum y partidos como PSOE, Esquerra y PNV incluyeron propuestas que saben a poco.
Mayores aún son los silencios en torno a la Inteligencia Artificial (IA), un tema que preocupa en la calle y que llena titulares en todos los medios de comunicación de España y el mundo, pero que no ha llegado ni a los programas electorales ni a los discursos de campaña, ni muchos menos a los debates y negociaciones de estos últimos días. Ante el riesgo que esta tecnología y su implementación podría implicar para los derechos humanos y laborales de miles de personas, estos silencios nos hacen temer que los partidos no sepan cómo dar respuesta a estas problemáticas o que no les interese que la ciudadanía participe activamente en su regulación.
El inventario de propuestas y consensos que no llegaron en estas últimas semanas es amplio y por lo mismo preocupante. Los partidos han tenido espacio y tiempo casi ilimitado para presentar a la ciudadanía sus proyectos políticos y sus propuestas para los próximos cuatro años, y aún tienen margen para definir cuál es el proyecto de futuro que quieren conseguir en la próxima legislatura. Por eso, debemos exigir a quienes nos representarán que estén a la altura de las circunstancias, que dejen de lado los debates superficiales y no olviden las demandas y necesidades de la ciudadanía. El verdadero sentido de nuestra democracia es crear las condiciones para una vida mejor, avanzar en derechos y promover la convivencia. Ese es nuestro bosque.
*Belén Agüero es responsable de investigación de Political Watch, entidad miembro de Polétika
López Miras apela al “voto útil para echar a Pedro Sánchez y evitar un bloqueo de un Gobierno del PP”.
Tras Aragón, el PP busca cerrar la etapa de los pactos con Vox en Murcia para ir sin ataduras a la investidura de Feijóo
El tiempo apremia y el 7 de septiembre es la fecha límite para cerrar la investidura de Fernando López Miras quien, de momento, rechaza la coalición con Vox
NotMid 05/08/2023
Una de las lecturas de los resultados del PP del 23-J tiene que ver con Vox. Los pactos de coalición autonómicos y municipales han hecho daño a través de las reprobaciones de la izquierda durante la campaña. De hecho, el PP comenzó su andadura electoral a las generales con un plan para retrasar todos los pactos autonómicos, que al final no salió adelante porque no pudo contenerlos. Solo dos gobiernos regionales aguantaron el tira y afloja de las negociaciones para no cerrarse: Aragón y Murcia.
Tras el acuerdo de coalición de Aragón, sellado este mismo viernes, solo queda Murcia por delante. La baronía de Fernando López Miras ha sido de gran utilidad durante la campaña: ha mantenido las distancias con Vox y, de hecho, la escenificación del fracaso de la investidura de Miras ha servido como colchón argumental para el debate cara a cara entre Feijóo y Pedro Sánchez. Pero el contador ya se ha puesto en marcha, y al líder murciano le quedan poco más de 30 días para alcanzar un acuerdo con la extrema derecha, al que se ha negado hasta la saciedad.
Hay varios problemas que enfangan el camino de Feijóo hacia la Moncloa, aunque su relevancia depende del primero, que es tan evidente como determinante: no tiene los apoyos suficientes. Con todo, el PP no puede descuidar la estrategia dado que todos los escenarios son posibles a estas alturas. En el caso de que, finalmente, se presentase a una investidura, cabe la posibilidad de que coincida con la última semana que tiene López Miras para presentarse a la suya. Dos investiduras fallidas en tan poco tiempo y sin descartar una repetición electoral es un precio bastante alto a pagar por un enredo en Murcia con tintes personalistas.
El pasado marca el presente
Y es que, como reconocen ambos partidos, las relaciones en Murcia no se asientan sobre los mismos pilares que en otras comunidades autónomas. Hay que recordar el pasado de ambos, que se remonta al año 2020, cuando Vox expulsó a tres de sus diputados autonómicos por una disputa interna con la dirección nacional. Un año después, López Miras alcanzó un acuerdo con ellos que evitó que saliese mal parado de una moción de censura presentada en marzo de 2021 por PSOE y Ciudadanos. Como parte del pacto, introdujo a uno de ellos en el gobierno, a la diputada Mabel Campuzano, a la que acabó cesando en enero de este año, a pocos meses de las elecciones.
Con estos antecedentes, los pactos son complicados: López Miras se reafirma, y asevera que no meterá a Vox en su eventual gobierno, mientras que la extrema derecha insiste en pedir una vicepresidencia y dos consejerías. Nadie, de momento, rebaja los costes. Además, la aritmética tampoco ayuda. El PP murciano se quedó a solo dos escaños de la mayoría absoluta y suma más que toda la izquierda junta, por lo que no necesitaría del apoyo explícito de Vox en la votación de investidura, sino de su abstención, es decir, de que Vox “no votase lo mismo que la izquierda”, como recalca el partido de López Miras.
Vox, por supuesto, no lo ve así. Para ellos, las urnas han dispuesto un escenario en el que ambos partidos están condenados a entenderse, y eso pasa, a su juicio, por un gobierno de coalición. Ya amenazaron con lo que son capaces de hacer en dos ocasiones, bloqueando ambas investiduras de López Miras. La cuerda se puede tensar hasta el límite de llegar a una repetición electoral.
Esto abriría otro escenario tanto a nivel autonómico como nacional. La primera repetición electoral tras los duros procesos electorales celebrados este año, pero quizás no la última. Si el PP y Vox no se entienden y se repiten elecciones en Murcia, esto se puede traducir de diversas maneras. Por ejemplo, en que la dinámica entre los partidos empeore de cara a la investidura de Feijóo (si esta se produce después). Además, podría juntarse una repetición electoral de las generales con las autonómicas de Murcia o, si el PP al final se queda en la oposición durante esta legislatura, Murcia podría acabar siendo el broche final de unas inestables relaciones entre los dos partidos de la derecha. Todo se descubrirá en los próximos 30 días.
Juan Jesús Vivas saluda a Alberto Núñez Feijóo en presencia de Ayuso y Bendodo, en un acto del PP en 2022.JAVI MARTÍNEZ
El PSOE frustra un acuerdo para gobernar con el PP en Ceuta porque “en la actualidad no puede haber un pacto con Feijóo”
Juan Jesús Vivas buscaba un pacto para integrar a los socialistas y al MDyC en la estructura de un Gobierno que no estará formado antes de octubre
NotMid 03/08/2023
El intento del presidente de la Ceuta, Juan Jesús Vivas, de integrar en un “gran pacto” al PSOE y el partido localista Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC) se ha topado contra un muro. El grupo socialista en la ciudad autónoma ha dado por concluidas este jueves las conversaciones que se habían iniciado al respecto aduciendo que “en la actualidad no hay ni puede haber un pacto de Gobierno con el PP de [Alberto Núñez] Feijóo”.
El portazo se produce en un momento en el que el propio líder de los populares y ganador de las elecciones generales del pasado 23 de julio ha tratado de reunirse con Pedro Sánchez para pedirle que se abstuviera para permitir su investidura “en beneficio de la estabilidad política e institucional de España”. Sin embargo, el presidente en funciones y aspirante a la reelección rechazó la oferta de diálogo emplazando a su interlocutor a reunirse una vez que el Rey haya designado un candidato para solicitar la confianza del Congreso.
“Los socialistas ceutíes hemos demostrado sobradamente nuestra apuesta por el diálogo y nuestro compromiso con la estabilidad de Ceuta, pero ahora no es momento de pactos”, ha señalado el PSOE de la ciudad autónoma, liderado por Juan Gutiérrez, en un comunicado hecho público este jueves, informa Europa Press. Asimismo ha negado “rotundamente” que “exista acuerdo alguno” para integrarse en una coalición presidida por el PP.
Vivas cuenta con nueve de los 25 escaños de una Asamblea autonómica formada por los representantes socialistas (seis), de Vox (cinco), del MDyC (tres) y de Ceuta Ya! (dos). En la última legislatura, el político popular gobernó en minoría aunque con apoyos puntuales de la segunda fuerza mayoritaria para sacar adelante asuntos como el Presupuesto de la ciudad.
Pese al revés, la intención del presidente ceutí es poder alcanzar un acuerdo con sus dos socios preferentes, que podrían integrarse en la estructura de un Gobierno que no estará formado antes de octubre, informa Efe. Sería en el mes de septiembre cuando se retomaran las conversaciones -previsiblemente una vez que se haya celebrado el debate de investidura en el Congreso de los Diputados- y trasladar los acuerdos a la dirección nacional del partido en Madrid antes de cerrarlos.
En la pasada legislatura Vivas llegó a un acuerdo con Vox para pactar los Presupuestos de 2021 que acabó saltando por los aires a los 10 meses. Esta etapa estuvo marcada por las polémicas intervenciones del portavoz de la formación de derecha radical en la Asamblea de Ceuta, Carlos Verdejo, que llegó a decir que el PSOE es un “partido criminal” y dirigió continuos ataques a entidades sociales gestionadas por musulmanes.
El presidente de la ciudad autónoma desde 2001 volvió a ser el candidato más votado de las elecciones del 28 de mayo, pero se quedó a cuatro escaños de la mayoría absoluta. Durante la campaña el líder del PP había dicho que no volvería a pactar con el partido de Santiago Abascal, tercera fuerza política en apoyos, y ha mantenido la promesa tras el escrutinio tratando de buscar una suma alternativa que los socialistas han desbaratado ahora.
Puigdemont en una imagen de archivo KENZO TRIBOUILLARD / AFP
Primera exigencia desde Junts al PSOE: Que se pueda hablar en catalán en el Congreso
Un sector de JxCat pide al partido de Puigdemont, que ponga “un precio muy alto”, como es la amnistía y la autodeterminación, para investir a Pedro Sánchez
NotMid 01/08/2023
El ex presidente catalán Carles Puigdemont pierde apoyos dentro de su partido, Junts Per Catalunya (JxCat) en su defensa cerrada de no hacer presidente del Gobierno al dirigente socialista Pedro Sánchez. Cada vez más hay voces internas que le instan a negociar, con condiciones, posibles acuerdos para garantizar un gobierno de la izquierda frente a PP y Vox y que pasarían por el entendimiento con el PSOE, aunque para eso se debería arrinconar al sector más unilateral e irredento de Junts que rechaza cualquier tipo de pacto con los que consideran los «partidos del 155».
De esta forma, Acció per la República, una organización de independientes de Junts per Catalunya, han reclamado un «frente común» con ERC para la negociación con el PSOE que también pasaría por una «posible reconstrucción del pacto de gobierno en la Generalitat», pese a que hace unos meses defendió la salida de Junts del Ejecutivo catalán. Además, instan a JxCat a «mantener el pulso» con sus dos principales exigencias, como son la autodeterminación y la amnistía, así como con alguna otra medida como «accediendo a votar la presidencia del Congreso a cambio de la aceptación del uso ordinario del catalán, euskera y gallego en las cámaras».
El uso de las lenguas cooficiales del Estado desde la tribuna parlamentaria es una vieja aspiración de las formaciones nacionalistas que han visto como desde la presidencia del Congreso se les llamaban al orden cuando las utilizaban de forma reiterada al defender propuestas en la última legislatura. Acció per la República recuerda que «sólo un precio muy alto y muy fácil de explicar puede justificar el voto favorable al candidato a la presidencia del Gobierno español. Además, aseguran que no se debe ver «una posible repetición electoral como una amenaza» y mantienen que, si se debe volver a las urnas, el presidente Puigdemont debería «recoser el movimiento independentista alrededor de una lista electoral abierta, transversal, integradora y de futuro, capaz de volver a hacer un pulso a un estado español caduco».
Acció per la República reclama que los «nacionalismos periféricos» deben «revalorizar sus escaños» para que no se produzca «la mayoría alternativa de la derecha», aunque añaden que «el apoyo al candidato socialista no puede ser fruto del miedo a la amenaza que supone Vox. Hay que llevar a PSOE y Sumar a una lógica de negociación política».
Sin embargo, dentro de JxCat hay más voces que están a favor del pragmatismo para apoyar a Pedro Sánchez ante cualquier tentación de una oposición frontal que lleve a una nueva repetición electoral. El ex presidente de la Generalitat Artur Mas aconsejó a Carles Puigdemont que sea «más exigente que intransigente» en la negociación para la investidura. En declaraciones a Catalunya Ràdio, Mas apuntó que querer hacer nuevas elecciones a toda costa es una «temeridad» ya que no es «un escenario deseable», puesto que ahora los partidos independentistas tienen «la llave de todo»
En este sentido, Mas defendió también una «estrategia conjunta de negociación» entre Junts y ERC, pese a que no significa que los dos partidos estén de acuerdo en todo, sino que permita abordar «la solución del conflicto político entre Cataluña y el Estado Español». Así, añadió que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, «hace poco tiempo» defendía que «los grandes temas» eran la amnistía y el referéndum, por lo que no ve imposible pactar «una hoja de ruta». De esta forma Mas pidió «cohesión» al independentismo en Madrid ya que “cuando tienes una posición decisiva en la política española, debes jugarla en favor de tu proyecto».
El ex presidente catalán también es consciente de que es «casi imposible» que Sánchez acepte un referéndum, pero pidió «esperar a los primeros movimientos de los socialistas conjuntamente con Sumar» ya que «la responsabilidad última de esta negociación no recae ni en Junts, ni en ERC». «Si el tándem PSOE-Sumar no quiere abordar la solución del conflicto catalán, deberá entender que la negociación con los partidos independentistas no sea fácil», recordó Artur Mas.
María Jesús Montero.G. V.EUROPA PRESS
El PSOE usa la reunión de Feijóo con Vox para justificar su plantón al PP: “Aparenta más postureo que voluntad de diálogo”
Ferraz argumenta que es “incompatible cualquier propuesta conjunta” entre los partidos mayoritarios tras el encuentro “secreto” del líder ‘popular’ con Abascal
NotMid 01/08/2023
El PSOE ha esgrimido este martes la “reunión secreta” entre Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal para atacar al ganador de las elecciones por su intento de acercamiento a Pedro Sánchez y dar un portazo a un posible acuerdo entre los dos partidos mayoritarios que nunca ha llegado a plantearse. En una misiva enviada el domingo al presidente del Gobierno en funciones, el líder del PP le solicitaba una reunión esta semana para que facilite su investidura.
“Llama poderosamente la atención porque esa carta que dirige el señor Feijóo aparenta más un postureo que realmente una voluntad de diálogo como ya adivinábamos, puesto que oculta o por lo menos no cuenta que estaba habiendo contactos, conversaciones con otros entornos que hacen absolutamente incompatible cualquier propuesta conjunta”, ha señalado María Jesús Montero, vicesecretaria general en la cúpula de Ferraz, para justificar el rotundo rechazo de Sánchez a mantener ese encuentro.
En una entrevista en TVE, la también ministra de Hacienda en funciones ha tildado de “paradoja” que el presidente de los populares “airee una carta” y que al mismo tiempo “oculte la reunión secreta que mantuvo con Vox” en la que, según ha inferido, “aproximarían un diagnóstico de la situación electoral y también el marco de alianzas que están desarrollando en el conjunto del territorio, sean comunidades autónomas o sean ayuntamientos”: “Pareció más una posición cara a la galería que una propuesta real”.
“El presidente fue muy claro en su carta de respuesta: primero toca [negociar] la Mesa del Congreso y, una vez que el Rey designe quién tiene que ir a la investidura, a partir de ahí se establecerán contactos con todos los grupos políticos, incluido el PP, para explorar los márgenes de apoyo y los márgenes de confianza que tiene cada candidato. Pero llama la atención que pase a la prensa una de las cartas y todavía no sepamos de qué hablaron en la reunión con Vox y por qué no rindió cuentas a su electorado y a la ciudadanía”, ha apostillado Montero.
NEGOCIACIONES
En el PSOE están “trabajando” con “discreción” para la constitución de esa Mesa en la Cámara Baja el 17 de agosto, que es “el primer hito”, pero no ocultan que su objetivo es “ocupar las posiciones que tienen un rango institucional importante” en alusión a la Presidencia de dicho órgano. Posteriormente se afanarán en lograr los apoyos para “una investidura que ponga de manifiesto la voluntad que los ciudadanos han expresado en las urnas y que, por tanto, se abra paso esa mayoría de progreso, de avances y de derechos” frente a “la alternativa, que es un Gobierno con el tique PP y Vox que ha rechazado la mayoría de los ciudadanos”
Sobre la posibilidad de que Junts pueda ser clave para una posible reelección de Sánchez, Montero ha indicado que, al igual con el resto de fuerzas parlamentarias, van a “dialogar” para tratar de “articular la mayoría necesaria”, pero a la pregunta de si están dispuestos a hablar de la celebración de un referéndum de independencia en Cataluña y de la amnistía de los condenados por el 1-O ha insistido en que cualquier cuestión en la que se pueda avanzar “tiene como límite el marco constitucional”. En ese sentido, también ha advertido al potencial socio para reeditar una coalición, Sumar, que el que tiene que liderar las conversaciones y “hacer todas las gestiones” es el principal partido en el “bloque progresista”.
“El PP no ha hecho una reflexión respecto a lo que ha ocurrido en estas elecciones, respecto a lo que ocurre cuando uno miente al conjunto de los ciudadanos y el señor Feijóo cometió muchos errores durante la campaña, que más que traspiés es la cultura de la mentira que el PP nos viene trayendo en los últimos tiempos, y, por otra parte, no ha dado explicaciones sobre elementos que fueron muy importantes y que es necesario aclarar, como las amistades y sus relaciones con el narcotraficante Marcial Dorado“, ha concluido la número dos del PSOE.
Pere Aragonès exige a Pedro Sánchez que “se mueva” y subraya “el objetivo”: “Un referéndum sobre la independencia”
El ‘president’ insta al líder del PSOE a “resolver el conflicto con Cataluña sin miedo a la derecha y la ultraderecha”
NotMid 01/08/2023
“El primero que tiene que moverse es Pedro Sánchez“. Así ha interpelado Pere Aragonès al candidato a la reelección como presidente del Gobierno en un momento en el que el jefe del Ejecutivo catalán asegura que no ha habido “ninguna negociación formal” para la investidura del aspirante socialista.
Aun así, el president cree que los partidos independentistas deberán atraer hacia sus propuestas de máximos al secretario general del PSOE: “Habrá que mover nuevamente a Sánchez para que cumpla con la agenda catalana”.
En una rueda de prensa en la que ha valorado un curso político que ha calificado de “muy intenso” y que ha tenido una lectura triunfalista de su acción de gobierno, Aragonès ha instado al presidente en funciones a “resolver el conflicto con Cataluña sin miedo a la derecha y la ultraderecha”.
Para el dirigente de Esquerra Republicana, esa resolución pasa ineludiblemente por “el fin de la represión y un referéndum para que la ciudadanía se pronuncie sobre la independencia de Cataluña”. “Ese es nuestro objetivo”, ha reiterado Aragonès, que ha desempolvado su propuesta de acuerdo de claridad, presentada el pasado mes de septiembre en el Parlament, para ejercer la autodeterminación.
Esa iniciativa, que por ahora no cuenta con el respaldo de ningún otro partido catalán y que, a causa de las elecciones municipales y generales, quedó en proceso de hibernación, “tendrá pronto disponibles las conclusiones del comité de expertos” designado por el propio Aragonès para establecer una hoja de ruta inspirada en la experiencia canadiense con los referéndums de secesión en la provincia francófona de Quebec.
Para Aragonès, además, tanto su partido como Junts deben “aprovechar la oportunidad” que les ha brindado el resultado del 23-J para “acabar con el déficit fiscal y de inversión estatal en infraestructuras” que asegura que sufre Cataluña desde hace muchos años.
Precisamente sobre la financiación autonómica, el president ha respondido a la ministra de Hacienda y Función Pública en funciones, María Jesús Montero, quien en una entrevista en TVE ha señalado esta mañana que uno de los ejes en las conversaciones para la investidura girará en torno a la reforma del actual sistema, caducado desde el año 2014. “No iremos a negociar los intereses de otros territorios, sino a defender que se reduzca nuestro déficit fiscal”, ha explicitado.
“No iremos de la mano de Isabel Díaz Ayuso ni de Emiliano García-Page para pensar en un sistema global para todas las comunidades autónomas, sino que trabajaremos para conseguir que los recursos que se generan en Cataluña sirvan para financiar los servicios públicos y se acabe con déficit fiscal”, ha proseguido el mandatario catalán.
La consejera de Economía de la Comunidad de Madrid, Rocío Albert, durante su toma de posesión
El Gobierno de Ayuso “se opondrá con todos los medios” a la condonación de deuda autonómica: “Es una aberración”
NotMid 01/08/2023
La consejera de Economía, Hacienda y Empleo de la Comunidad de Madrid, Rocío Albert, asegura en declaraciones, que combatirá judicialmente eventuales condonaciones de la deuda autonómica tras abrir la puerta la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero. En opìnión de Albert, aceptar la petición de Junts y Esquerra de condonar la deuda catalana con el Fondo de Liquidez Autónomica (FLA) -que supera los 70.000 millones de euros- sería “una aberración” que perjudicaría al resto del Estado. Es crítica con que se use, además, como moneda de cambio para seguir en el poder. En su opinión, sólo que se abra “la posibilidad” es “una muestra más de que Pedro Sánchez está dispuesto a todo para conseguir el apoyo del independentismo para poder mantenerse en la Moncloa”.
“Si se condona la deuda de Cataluña, se lanza una señal gravísima al mercado sobre la solvencia que puede tener una determinada administración española en el cumplimiento de sus obligaciones, especialmente en materia de deuda. Esto puede perjudicar al resto de comunidades a través de una especie de mutualización de deuda al asumirla la Administración General del Estado, que por ello podría ver bajado su rating”, defiende la nueva consejera del Gobierno autonómico de Isabel Díaz Ayuso.
Por tanto, según Albert, “de confirmarse esta aberración económica y financiera desde la Comunidad de Madrid nos opondremos con todos los medios que nos asistan en Derecho, así como en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF)”
El Congreso, Coalición Canaria y Puigdemont
Estatuas de leones en la entrada del Congreso de los Diputados. (Joaquin Corchero/Europa Press)
El resto de periódicos aportan este martes informaciones relevantes o prismas interesantes sobre estos días en la política. El País, por ejemplo, narra la próxima batalla, que es la Presidencia y la Mesa del Congreso de los Diputados, con el PP volcado en su control como ganador que es de las elecciones en número de votos y escaños. Javier Casqueiro y Miguel González firman la pieza de apertura, que explica que Vox confía en los populares para no quedarse fuera del órgano de gobierno de las Cortes, que se constituyen el 17 de agosto.
El Mundo entrevista a Cristina Valido, la única diputada con la que contará Coalición Canaria, que se muestra dispuesta a apoyar la investidura de Pedro Sánchez incluso con el apoyo de Junts: “No vamos a tener en cuenta quiénes apoyan una cosa o apoyan otra”, lleva por titular la entrevista, que realiza Marta Belver.
En El Español, Pepe Luis Vázquez firma ‘El PP no dará “oxígeno” a Pedro Sánchez si llega a la Moncloa “marginando a media España”’. Los populares -concreta- “consideran que si Sánchez se mantiene en el poder lo hará en una posición de debilidad y que ellos tendrán en su mano fagocitar la legislatura”.
En El Confidencial, ‘Puigdemont se va de vacaciones y enfría la negociación para la investidura de Sánchez’. El expresidente de la Generalitat de Cataluña se marcha unos días a Colliure, en el sur de Francia, sin prisa para iniciar las conversaciones, detalla el periodista Marcos Lamela.
Cuca Gamarra, secretaria general del PP, este lunes. (Alejandro Martínez Vélez/Europa Press)
Informa Marta Moreno de que Alberto Núñez Feijóo no se rinde. “No voy a aceptar en ningún caso que se pretenda convertir en minoría a la mitad de los españoles”, sostuvo este lunes el candidato del PP en un tuit. Aunque no salen las cuentas, seguirá insistiendo en una reunión con Pedro Sánchez y en ir a la investidura.
Feijóo con Abascal
“La gran diferencia entre el PP y el PSOE es que con nosotros no hay pactos ocultos ni conversaciones que no puedan contarse”, proclamó este lunes Cuca Gamarra, secretaria general del PP, tres horas antes de que Vox desvelara que Alberto Núñez Feijóo se reunió en secreto con Santiago Abascal a mediados de la semana pasada. El PSOE ha pedido explicaciones y quiere saber los “detalles” del encuentro. Su candidato, Pedro Sánchez, observa desde sus vacaciones en Lanzarote.
Cristina Valido, candidata de Coalición Canaria.E. M.
Cristina Valido, de Coalición Canaria, la diputada 172 que puede desempatar entre PP y PSOE: “No hay nada preconfigurado”
NotMid 31/07/2023
En las manos de Coalición Canaria (CC) puede estar ahora la llave del futuro Gobierno de España. Su única representante en el Congreso, Cristina Valido, tiene la capacidad de inclinar la balanza hacia el bloque de la derecha o el de la izquierda que, tras el recuento del voto exterior, están empatados a 171 escaños en el caso de que Junts optara por abstenerse.
“No hay nada preconfigurado (…). Nosotros hemos sido perfectamente capaces de mantener una relación cordial con ambos partidos”, ha afirmado este lunes la diputada electa en una entrevista en la Cadena Ser en respuesta a la pregunta de si dará su apoyo al PP de Alberto Núñez Feijóo o al PSOE de Pedro Sánchez.
De hecho, en CC se muestran dispuestos a mantener una “negociación bilateral” con cualquiera de las dos formaciones mayoritarias por “una cuestión de responsabilidad de Estado” siempre que sobre la mesa estén “Canarias y sus problemas”. Eso sí, con dos líneas rojas, “la extrema derecha y la extrema izquierda”, lo que de facto elimina de la ecuación a Vox y a Sumar.
“Podríamos alcanzar un acuerdo puntual de investidura con el candidato que tenga más votos”, ha señalado la diputada 172 que puede desempatar los bloques si la formación del ex presidente catalán Carles Puigdemont se apunta a la abstención. “Lo que no apoyaríamos es un Gobierno cerrado”, ha precisado circunscribiendo las conversaciones al PP y/o al PSOE, con quienes su partido ha mantenido ya “contactos” de los que no ha dado más detalles.
Valido será por primera vez la representante de CC en el Congreso tras la renuncia de Ana Oramás, que había ocupado ese escaño desde 2004 y durante siete legislaturas. Su partido ha recuperado además la presidencia del Gobierno de Canarias con acuerdo de coalición con el PP que ha vuelto a situar al frente del archipiélago a su secretario general, Fernando Clavijo.
RESULTADOS
Tras el escrutinio del 23-J, la suma de PP (136), Vox (33) y Unión del Pueblo Navarro (1) era de 170 escaños, a seis de la mayoría absoluta. Enfrente, los probables apoyos de Sánchez, sin añadir los votos de Junts, eran 172: los 122 que se había adjudicado el PSOE más Sumar (31), ERC (7), Bildu (6), PNV (5) y BNG (1)
Ahora, con la pérdida de un diputado socialista en Madrid que ha ido a parar a la nómina de los populares, el bloque de la izquierda con independentistas y nacionalistas (sin el partido de Puigdemont) se quedaría en 171 escaños, los mismos que alcanzaría el bloque de la derecha.
Por ello, Sánchez ya no puede ser investido con la abstención de Junts, sino que ahora necesita su sí, a no ser que la única diputada electa de Coalición Canaria vote a favor de su nombramiento. En este caso seguiría bastando con la abstención de la formación que lidera el promotor del referéndum ilegal del 1-O que ha pedido a cambio de su apoyo autodeterminación para Cataluña y amnistía para los implicados en el procés.
Sánchez anuncia que irá a la investidura, acelerará cuando se constituyan las Cortes sin esperar a Feijóo y busca apoyo para “ampliar” su mayoría
Apela a quienes “se fueron distanciando del Gobierno progresista” en un guiño a Coalición Canaria
NotMid 31/07/2023
Pedro Sánchez da un paso al frente y anuncia que se presentará a la investidura sin esperar a ver qué decide Alberto Núñez Feijóo. El presidente del Ejecutivo en funciones y aspirante a la reelección había emplazado al ganador de las elecciones a reunirse con él a partir del 17 de agosto, que es la fecha en la que se constituyen las Cortes, pero dentro de lar onda con “el resto de portavoces de los grupos parlamentarios con representación en la Cámara”.
“Estoy convencido de que existe una amplia mayoría social para seguir avanzando”, ha señalado este lunes el candidato socialista en un vídeo difundido a través de su cuenta oficial de Twitter. “Es más, estoy persuadido de que esta mayoría puede ampliarse también a personas que se fueron distanciando del Gobierno progresista por la fatiga de estos años tan duros o como consecuencia de la intensa propaganda desplegada por el dúo PP y Vox”, ha añadido en un presumible guiño implícito a Coalición Canaria, que podría ser clave para desempatar al bloque de la izquierda y el de la derecha.
Según Sánchez, “toca ahora traducir esa mayoría social en una mayoría parlamentaria en el Congreso de los Diputados”. A lo que ha apostillado: “Es lo que vamos a hacer en cuanto se constituyan las Cortes, trabajar para lograr una investidura que nos permita seguir avanzando cuatro años más”.
En el vídeo de Twitter, el presidente en funciones ha argumentado que “el mensaje de las urnas ha puesto en evidencia que quienes proponen la derogación y el retroceso no son mayoría y que, por tanto, España puede seguir creciendo y creando empleo”, al mismo tiempo que se sigue “avanzando en derechos sociales” y se convive “en la diversidad”. Este “pronunciamiento tan claro”, ha recalcado, “no hubiera sido posible (…) sin la colaboración de los casi ocho millones de españolas y españoles que han confiado su voto al PSOE”.
“La legislatura pasada estuvo marcada por las adversidades derivadas de la pandemia y de la guerra en Ucrania, así como de otros contratiempos y calamidades. Les hicimos frente y movilizamos cielo y tierra para proteger empleos y empresas, salarios y pensiones. Se abre ahora un horizonte diferente porque es el momento de consolidar el crecimiento económico, de reindustrializar España con el concurso de los fondos europeos. Es el momento de crear más y mejores empleos hasta alcanzar el umbral del pleno empleo. Es el momento de reforzar nuestro Estado del bienestar”, ha desgranado.
También ha afirmado que España podrá “continuar el apasionante camino hacia la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres”, “hacer del acceso a la vivienda la gran causa nacional de los próximos años”, ser “el país de referencia en la respuesta a las dos grandes revoluciones, la digital y la ecológica”, “proteger los derechos conquistados y alcanzar nuevas metas” que la sitúen “en la vanguardia de las naciones libres y avanzadas”. Y ha añadido: “Es el momento de seguir reconstruyendo la cohesión política, social y territorial y dejar atrás el enfrentamiento estéril y la corrupción política”.
Cuca Gamarra, secretaria general del PP, este lunes. (Alejandro Martínez Vélez/Europa Press)
El PP dice que no hablará con Junts, pero insiste en hacerlo con Pedro Sánchez: “Tiene que asumir su derrota”
La Dirección Nacional del partido frena las voces que se abrían a un diálogo con Junts tras los resultados del voto CERA, que complican la investidura de Pedro Sánchez
NotMid 31/07/2023
El Partido Popular ha vuelto a cerrar la puerta a hablar con Junts tras entreabrirla después de conseguir un escaño más del voto de los que residen en el exterior (CERA). Esto subió los ánimos en el partido, y se empezaron a escuchar voces que hablaban de negociar con Junts de cara a la investidura de Alberto Núñez Feijóo. Una de ellas fue el propio vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local del PP, Pedro Rollán, que dijo este sábado que el PP está dispuesto a hablar “con todas y cada una de las formaciones políticas, siempre que estén dentro del marco de la Constitución Española”.
Sin embargo, este lunes, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ha ofrecido una rueda de prensa en la sede de Génova, en la que ha descartado ese posible diálogo. “Esa cuestión no se encuentra sobre la mesa, ni estaba ni está sobre la mesa. Somos un partido serio, predecible y previsible”, ha zanjado.
Sin embargo, ha insistido en el diálogo con el PSOE de Pedro Sánchez, tras un intercambio de cartas con el candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo, que le instaba a una reunión esta semana, que Sánchez terminó rechazando. “Le proponemos que rectifique”, ha lanzado la secretaria general del partido, que ha vuelto a convocar a Sánchez a una reunión, con el objetivo de que “asuma” el resultado electoral y garantice la gobernabilidad. Gamarra ha rechazado la “política del portazo” y ha opinado que si la carta hubiese sido de un dirigente de Bildu, ERC, Junts o PNV, Sánchez no hubiera tardado “ni medio minuto” en ponerse a su disposición.
El voto CERA da alas al PP
Gamarra ha considerado que, una vez finalizado el recuento del voto CERA, los resultados acentúan la mayoría del PP, con un resultado “claro y rotundo” de 137 escaños en el Congreso de los Diputados frente a los 121 de los socialistas. La secretaria general del partido ha insistido en que la “práctica democrática” dice que al partido que gana las elecciones siempre le ha correspondido conformar gobierno, “no hay motivo para cambiar y variar la práctica democrática”, ha argumentado Gamarra.
Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, en el debate ‘cara a cara’ para el 23-J.E. M.
Sánchez ya presume que será investido presidente entre reproches a Feijóo y con apelaciones al Rey
Rechaza la oferta del líder del PP para reunirse esta misma semana y retrasa cualquier encuentro hasta que “el Jefe de Estado designe candidato”
NotMid 31/07/2023
Pedro Sánchez se reunirá con Alberto Núñez Feijóo, pero nunca antes de la constitución de las Cortes (17 de agosto) ni de que, parece apostar, el Rey lo designe como candidato, tras la posterior ronda de contactos en Zarzuela. El líder del PSOE despachó este domingo, entre guiños de ganador, reproches al PP y presiones al jefe del Estado, la oferta del dirigente popular, horas antes y vía carta, para verse esta semana y negociar el desbloqueo de la situación política. Sánchez no solo rechazó la solicitud, sino que esboza que tendrá antes que Feijóo «los apoyos necesarios» para formar gobierno y pospone toda reunión hasta que Felipe VI «haya designado el candidato» a la investidura. Sánchez se ve ya en ese papel. De hecho, remite a su rival a ese momento, cuando lo recibiría como a uno más: «Estaré encantado de reunirme con usted, así como con el resto de portavoces de los grupos parlamentarios con representación en la Cámara».
Feijóo esperó hasta ayer, una vez confirmado el recuento del voto exterior -que otorgó un escaño más al PP en Madrid a costa del PSOE, lo cual igualó la balanza de bloques y obliga a Sánchez a buscar el sí de Junts– para volver a tender la mano al presidente del Gobierno en funciones e instarle a verse esta misma semana para tratar el desbloqueo. «Como ganador de las elecciones» solicitaba al dirigente socialista una reunión urgente para que facilitara su investidura. El PP, como fuerza ganadora, «debe gobernar», exigía Feijóo en el escrito.
Pero la propuesta del PP para «establecer un diálogo responsable, en beneficio de la estabilidad política e institucional de España» fue desoída por el líder socialista, que respondió con dureza, anticipando una futura legislatura de enquistamiento. También vía postal alejó cualquier opción de entendimiento en el corto plazo, achacando la falta de diálogo a que el PP rompió las negociaciones para la renovación del CGPJ (27 de octubre). Sólo aceptará reunirse «tras la constitución formal del Congreso de los Diputados, el próximo 17 de agosto» y remata la carta con una apelación al encargo del jefe del Estado.
Ese último párrafo, al englobar el encuentro con Feijóo junto al resto de partidos, avanza que en Ferraz ven a Sánchez capaz de articular el respaldo suficiente (con Junts o con Coalición Canaria) antes de ir a Zarzuela. Entonces, el Rey que, según los constituyentes, tiene difícil eludir el encargo al líder de la fuerza más votada (Feijóo), podría dar luz verde a quien ya ha probado tener más apoyos (Sánchez). Eso sugiere el líder del PSOE.
ARTÍCULO 99 DE LA CONSTITUCIÓN
El presidente en funciones apela, específicamente, al artículo 99 de la Constitución, que señala: «Después de cada renovación del Congreso de los Diputados, el Rey, previa consulta con los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria, y a través del Presidente del Congreso, propondrá un candidato a la Presidencia del Gobierno».
Escribe Sánchez que «el Congreso es el espacio en que deberán articularse las mayorías que permitan la investidura del candidato o candidata que recabe los apoyos necesarios». Y Sánchez da por hecho que los tendrá, mientras alardea ante Feijóo: la «derogación» del sanchismo «no tuvo respaldo».
El desprecio, entre ironías, rezuma en el intercambio de misivas. El secretario general del PSOE llega a afear al presidente popular su carta: «Aunque hoy dispongamos de medios más ágiles para la interlocución que el diálogo epistolar», bromea.
Si Feijóo escribe: «Como sabes, un factor continuo de gobernabilidad y normalidad en nuestro país a lo largo de toda su trayectoria democrática lo ha constituido el reconocimiento de que la fuerza política ganadora en elecciones generales es la que debe gobernar», Sánchez replica: «Estoy seguro de que comprende y comparte este principio básico de la democracia parlamentaria, porque ha venido siendo aplicado históricamente por su partido, de modo sistemático en todas las latitudes de España, cada vez que le ha permitido alcanzar la presidencia de gobiernos autonómicos y alcaldías pese a no ser la fuerza más votada (…) Ha vuelto a ser aplicado en la constitución de distintos gobiernos autonómicos en los que Partido Popular y Vox han unido fuerzas y votos atendiendo al criterio de la suma aritmética del número de escaños en los parlamentos autonómicos»
El PSOE, por tanto, niega cualquier opción de acercamiento. Feijóo reconocía en su escrito las profundas diferencias que les separan, pero reclamaba sentido de Estado y altura de miras para que las dos principales fuerzas -que han recuperado apoyo- resuelvan la compleja situación política. «Para que España no dependa de eventuales combinaciones negativas que polaricen a la sociedad, dañen gravemente la cohesión territorial y lleven al límite a nuestro sistema constitucional», subraya el líder del PP, ante el posible pacto del PSOE con ERC, Bildu y Junts.
La negativa socialista aboca a una configuración política en bloques. Sólo un encuentro entre los dos principales partidos rompería el bloqueo. Ni se verán de momento.
Pedro Sánchez recibe a Alberto Núñez Feijóo en La Moncloa, en octubre del año pasado.J. BARBANCHO
El 58% de los españoles desea un pacto PP-PSOE pero el 84% lo ve improbable
Las universidades públicas, la Policía y el Ejército son las instituciones mejor valoradas, según una encuesta de la Fundación BBVA
NotMid 31/07/2023
La gran coalición, el deseo para el país de nunca jamás. Aunque la unión de PSOE y PP, para evitar el tironeo de los extremos, es la opción preferida por los españoles, pocos realmente creen que será posible hoy, con los partidos enfrascados en su polarización irreversible desde los días del no es no de Pedro Sánchez.
Un 58% de los ciudadanos valora positivamente que los dos principales partidos llegaran a un acuerdo para formar gobierno. Así lo indica el Estudio de la Fundación BBVA de Cultura Política en España 2023, realizado entre el 12 de abril y el 21 de julio. Ese informe pone de manifiesto el deseo de un pacto de Estado entre las fuerzas del bipartidismo. Las conclusiones de esta investigación, realizada antes de las elecciones generales, pero que se hace público este lunes, resultan especialmente interesantes ante los resultados de las urnas el 23-J.
La apuesta por esa gran coalición es más intensa entre quienes se ubican en el centro político. El 71% estaría a favor de este acuerdo -son los que puntúan con un 5 o más esa opción-, cifra que desciende al 60% entre los que se sitúan en la derecha y al 54% en los que se posicionan en la izquierda. La media es ese revelador 58% a favor de un PP-PSOE.
Otro dato llamativo es que solamente el 23% de los españoles prefiere un gobierno formado por un único partido, frente al 60% que se inclina por un gobierno de coalición -el 17% no opina-. De todas las combinaciones posibles, una coalición de partidos de izquierda es, con el 21%, la opción preferida. Tan sólo un 8% desearía una conformada por partidos de derechas, mientras que un 12% apostaría por una que integrase partidos de izquierda y derecha. Existe, por tanto, una tendencia consolidada por el pluralismo político en los gobiernos frente al bipartidismo y a la alternancia PP-PSOE en la Moncloa que ha caracterizado a la democracia española desde la aprobación de la Constitución en 1978.
Estos datos confrontan con la percepción de las opciones reales de que los partidos de izquierdas y derechas lleguen a acuerdos políticos. Más de la mitad de los encuestados (52%) piensa que es imposible que suceda, y un tercio (32%) lo considera, como mínimo, difícil. De ahí, a la mala imagen de los partidos políticos. Hasta un 87% estima que anida en ellos la corrupción y el 75% que no prestan atención a los intereses reales de los ciudadanos. Asimismo, el 63% no se siente representado por ninguno. Aunque la desafección es contrastable, esta visión crítica de los partidos se compatibiliza con la percepción de que son entidades necesarias para que exista la democracia.
La apreciación de los políticos también es negativa. Una abrumadora mayoría (81%) considera que dedican más atención a sus intereses personales que a los de los ciudadanos, y un 73% piensa que dividen a la sociedad. La confianza en sus capacidades tampoco es alta: un 78% estima que las decisiones importantes deberían ser tomadas por expertos.
La desconfianza sobre la política contrasta con la percepción positiva del resto de las instituciones del Estado. La policía y el ejército son las que presentan un mayor índice de aprobación. Algo por debajo aparecen los tribunales de justicia. Los partidos políticos sólo superan en respaldo a las redes sociales y las entidades bancarias.
Respecto a la estructura del Estado, el 46%, se decanta por la forma actual, y solamente un 10% estaría a favor de eliminar las autonomías, como pide Vox. La mayoría expresa una identificación múltiple, asociada principalmente a sus ciudades de origen (88%), comunidad autónoma (85%) y la propia España (79%).
LA CONSTITUCIÓN
La valoración de los españoles sobre la Carta Magna es otro de los datos significativos que ofrece el estudio. Tan sólo el 10% cree que no necesita realizarse ninguna reforma en la Constitución. En el otro extremo, se repite el registro: sólo el 10% piensa que está totalmente desfasada y que habría que elaborar una nueva. Un 38% considera que necesita retoques parciales y es la opción preferida, por delante de ese 31% que reclama reformas profundas.
En cuanto a las preocupaciones de los ciudadanos, el paro, la crisis económica y la subida de los precios encabezan la lista. También expresan una valoración negativa respecto de la situación mundial y de la del país, calificadas ambas como malas o muy malas, mientras que esta cambia cuando se valora la situación personal, percibida como buena o muy buena por el 61% de los encuestados.
Sánchez desprecia la oferta de diálogo de Feijóo: no se reunirá con el PP hasta que el Rey designe candidato a la investidura
“España no se merece una situación ingobernable”, traslada el líder ‘popular’ al socialista, al que le reclama que deje gobernar a la fuerza más votada
NotMid 30/07/2023
“No podemos permitirnos un bloqueo”. El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, envió este domingo a Pedro Sánchez una carta en la que, “como ganador de las elecciones”, pide al dirigente socialista y presidente del Gobierno en funciones una reunión la próxima semana para que facilite su investidura. El PP, como fuerza ganadora, “debe gobernar”, exige Feijóo en una petición rechazada por el dirigente socialista, que le emplaza a una reunión después de la constitución de las Cortes, cuando el Rey haya designado candidato a la investidura.
El presidente popular, una vez finalizado el recuento del voto exterior que ha entregado un escaño más al PP a costa del PSOE -y que ha intensificado el escenario de bloqueo, ya que tanto la izquierda como la derecha suman en estos momentos 171 diputados y todo depende exclusivamente del voto afirmativo de Junts-, se dirigió como estaba previsto al líder socialista para “establecer un diálogo responsable, en beneficio de la estabilidad política e institucional de España”.
La ansiada abstención socialista que busca Feijóo, inédita hasta la fecha, eliminaría de la ecuación cualquier atisbo de alianza entre el PP y Vox en el plano nacional. Una estrategia que Santiago Abascal y los suyos denuncian desde hace semanas. De hecho, buena parte de la campaña de Vox se basó en advertir a los electores de que el PP prometía derogar el sanchismo pero, paralelamente, tender la mano a Sánchez para arrinconar a Vox. De ahí que Abascal trate de asemejar ambos partidos e insista en que sólo Vox garantiza la alternativa real.
Feijóo, por el contrario, dice en el escrito reconocer las profundas diferencias que separan al PSOE del PP. Exige a Ferraz un encuentro inmediato, en los próximos días, para trasladar a Sánchez que permita gobernar a los populares por ser el partido más votado, siguiendo la tradición política en nuestro país de las últimas décadas, y poniendo fin a la situación de “ingobernabilidad” en plena presidencia de la Unión Europea a la que se asoma España.
El líder del PP justifica su búsqueda de diálogo con el PSOE en el “sentir ampliamente extendido más allá de las preferencias electorales que los votantes acaban de expresar” de que los dos principales partidos establezcan una conversación que permita el desbloqueo político y que España no dependa de “eventuales combinaciones negativas que polaricen a la sociedad, dañen gravemente la cohesión territorial y lleven al límite a nuestro sistema constitucional”.
“NO SE PUEDE MINAR LA CONFIANZA”
El plan de Génova avanza a lenta velocidad, pero según los puntos establecidos desde hace tiempo. En el cara a cara de hace varias semanas Feijóo ya planteó a Sánchez firmar un acuerdo en el que ambos se comprometieran a dejar gobernar a la lista más votada. Un ofrecimiento que el presidente del Gobierno rechazó, acusando a Feijóo de estar abrazado a Vox en numerosas autonomías y alcaldías.
Pero ahora, con los resultados afianzados, los populares retoman su propuesta de encuentro y diálogo con el PSOE como herramienta, dice Feijóo a Sánchez, que devuelva la tranquilidad y la esperanza en la política a los millones de españoles que ven cómo el resultado del proceso electoral en pleno verano por ahora sólo abre la puerta a una repetición en Navidad.
“La complejidad que pueden suscitar los resultados electorales no debe agravar estas incertidumbres ni minar la confianza de los ciudadanos en la capacidad de nuestro sistema político y constitucional para asegurar la mejor gobernabilidad en interés de España, de su cohesión y del marco de convivencia definido por la Constitución”, advierte Feijóo en la carta enviada este domingo a Ferraz.
Alberto Núñez-Feijóo durante un acto de campaña previo al 23.-J. EUROPA PRESS
Feijóo pide a Sánchez una reunión esta semana para evitar el “bloqueo” y la “ingobernabilidad” en España
El líder popular, reforzado tras el voto extranjero, insiste al candidato socialista en la necesidad de un encuentro en el que intercambiar posiciones de cara a la formación del nuevo Gobierno
NotMid 30/07/2023
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido por carta al presidente del Gobierno en funciones y líder del PSOE, Pedro Sánchez, mantener una reunión esta semana para establecer un “diálogo responsable” y evitar el “bloqueo” y la “ingobernabilidad” en España.
“España no se merece una situación ingobernable y tampoco podemos permitirnos un bloqueo en un momento tan relevante para nuestra economía y nuestras instituciones, en plena Presidencia española del Consejo de la Unión Europea”, ha señalado en una misiva enviada a Sánchez este domingo tras concluir el recuento del voto CERA que ha dado un escaño más al PP en Madrid.
Feijóo ha recalcado que el PP ha sido el “ganador” de las elecciones generales del 23 de julio y ha apelado al líder del PSOE a iniciar un diálogo “en beneficio de la estabilidad política e institucional de España”.
Carles Puigdemont, en pantalla, durante el acto de campaña de Junts en Amer (Girona).E. P.
Carles Puigdemont se siente reforzado tras el cambio de escaño y amenaza al PSOE: “Hay que hablar de la Luna, del conflicto político”
El ex presidente catalán subraya que el diputado perdido por los socialistas deja a Pedro Sánchez a merced del ‘sí’ de Junts si quiere evitar la repetición electoral
NotMid 29/07/2023
Aunque el PSOE trate de relativizar las consecuencias del escaño perdido tras el escrutinio del voto exterior, en favor del PP, Carles Puigdemont ha querido dejar claro esta tarde que la nueva aritmética parlamentaria permite que Junts per Catalunya pueda agarrar aún con más fuerza la llave de la gobernabilidad en España.
“Si hace seis días el resultado provisional ya nos situó en el centro de la conversación y de las especulaciones, con los resultados definitivos en las manos la posición aún ha quedado más contrastada: o Junts vota que sí, o el PSOE acaba facilitando la investidura de Alberto Núñez Feijóo (o la del candidato que los populares propongan), o vamos a la repetición de las elecciones”, ha expuesto el ex presidente catalán a través de un comunicado en Twitter.
El eurodiputado posconvergente y guía del partido pese a no ostentar ya ningún cargo orgánico ha advertido a los socialistas que las negociaciones con su formación para una posible investidura de Pedro Sánchez deberán abordar la resolución del conflicto político catalán, lo que para las fuerzas independentistas pasa por un referéndum de autodeterminación y la amnistía para todos los encausados del procés.
“Tener la llave es circunstancial. Un día la tienes y al día siguiente no, y nunca podemos perderlo de vista. Esto no puede hacernos caer ni en las prisas ante el miedo a perderla ni en la sobreactuación ante un poder que es inevitablemente efímero. El dedo y la Luna. Esto es el dedo; la Luna es otra cosa. La Luna es un conflicto político muy serio y profundo, y es aquí donde es necesario poner el foco. No en las personas, sino en el país”, sostiene Puigdemont.
Para el ex jefe del Gobierno catalán, el escaño que el PP ha arrebatado al PSOE, a falta de su ratificación oficial definitiva, es “relevante en la ecuación para cualquier investidura”. Por ello, ha señalado que “el actual presidente del Gobierno y candidato socialista a la reelección sólo podrá ser escogido si obtiene el voto afirmativo de una coalición muy amplia, incluidos los siete votos de Junts per Catalunya”. Una suma que le llevaría a alcanzar la mayoría absoluta.
VOTO CERA
Tras el recuento del sufragio exterior, la configuración final de los dos posibles bloques en una sesión parlamentaria para investir a Sánchez ha trastocado los planes iniciales del secretario general del PSOE, que hasta ahora podía permitirse pedir a los posconvergentes únicamente la abstención para obtener la mayoría simple, tal y como hicieron Esquerra y EH Bildu en enero de 2020, que en esta ocasión estarían dispuestos a optar por el sí.
Con el presumible apoyo de republicanos, abertzales, PNV, BNG y los diputados socialistas y de Sumar, Sánchez aún necesitaría, como mínimo, dos votos de Junts a su favor. Solamente en el caso de que Coalición Canaria diera su plácet al actual jefe del Gobierno en funciones, las siete abstenciones de JxCat bastarían para consumar su reelección. Si el partido de la región insular se abstuviera, el líder socialista requeriría al menos un voto afirmativo de los posconvergentes.
Por ello, ante las advertencias del PSOE de que la oposición de Junts conduciría a una repetición electoral y, en consecuencia, a una segunda oportunidad para el PP de llegar a La Moncloa, Puigdemont se muestra tajante: “Quien crea que ejerciendo presión o practicando directamente el chantaje político obtendrá algún beneficio táctico se puede ahorrar el esfuerzo”
Rollán, este sábado en Collado Villalba (Madrid) SERGIO PÉREZ / EFE
El PP afirma que está dispuesto a hablar con Junts “dentro de la Constitución” para hacer presidente a Feijóo
NotMid 29/07/2023
El vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local del Partido Popular, Pedro Rollán, aseguró este sábado que su formación “no se va a apoyar para nada” en EH Bildu para buscar los respaldos necesarios que hagan presidente a Alberto Núñez Feijóo. Unas declaraciones que abren la puerta a entablar diálogo con Junts para tratar de recabar su voto, en un momento en el que el PSOE también necesita el sí de Carles Puigdemont para revalidar un nuevo mandato.
Rollán, cuestionado específicamente por la relación del PP con Junts, explicó que los populares están dispuestos a hablar “con todas y cada una de las formaciones políticas siempre que estén dentro del marco de la Constitución Española”, aseveró desde Collado Villalba (Madrid), en declaraciones a la prensa recogidas por Europa Press.
El escaño ganado por el PP en Madrid, arrebatado al PSOE gracias al voto exterior, ha levantado los ánimos en el partido ya que el bloque de derechas gracias a este cambio sumaría 172 diputados frente a los 171 que formarían el de izquierdas. Los siete escaños de Junts a día de hoy decantarían definitivamente la balanza, motivo por el que el PP se abre a dialogar con los de Puigdemont, aunque, a diferencia del PSOE, siempre estableciendo como frontera inquebrantable el cumplimiento de la Constitución.
Fuentes de Génova consultadas por este diario respaldan la hoja de ruta plasmada por Rollán, aunque remarcan que Feijóo sí “tiene límites”, fijados por la propia Carta Magna.
“A diferencia del PSOE nosotros sí garantizamos que no impulsaremos en ningún caso un referéndum de autodeterminación”, manifiestan estas mismas voces.
Como se comunicó el pasado otoño, las conversaciones entre el PP y Junts estaban en plena fase de deshielo ante un hipotético cambio en La Moncloa. Para entonces, Feijóo buscaba un “interlocutor” si, llegado el caso, tenía que necesitar el respaldo de Junts en la investidura.
Isabel Díaz Ayuso, durante la Junta Directiva Nacional del PP del pasado lunes.ANTONIO HEREDIA
El escaño que lo cambia todo: de la profecía cumplida de Ayuso a un presidente por la vía rápida si “vende nuestra nación”
Hasta ahora, a Sánchez le bastaba con una abstención del ‘president’ huido para ser investido; ahora necesita negociar el sí de Junts
NotMid 29/07/2023
Dijo Isabel Díaz Ayuso: “Probablemente este viernes tendremos ese escaño número 16 en Madrid”. Y otorgando la credibilidad que merece a quien acertó cuando casi todos descartaban ya esa opción, hay que repasar el resto de pronósticos que hizo la presidenta madrileña en su comparecencia del pasado miércoles. Afirmó que Pedro Sánchez tiene “un pacto para hacer lehendakari a Otegi“. Para examinar esa profecía habrá que esperar un largo año, hasta las próximas elecciones vascas -la legislatura concluye en julio de 2024-. Pero hizo otro vaticinio, más cercano: “Sánchez tiene un pacto [con Puigdemont] para vender nuestra nación en dos semanas”. Importa el plazo, porque, sobre todo, ese diputado que cambió de color este viernes no sólo altera los bloques, más acelera los relojes.
Desde el domingo, se dio por hecho que había dos ententes casi empatadas. En un lado, PSOE (122 diputados), Sumar (31), ERC (7), Bildu (6), PNV (5) y BNG (1). Total: 172 escaños. Tras caer el PSOE a 121, ese bloque, con sus 171, ya no supera a la derecha, donde ahora serían 172 (PP, 137; Vox, 33; UPN, 1; Coalición Canaria, 1). Ana Oramas, líder de los regionalistas canarios, ha descartado apoyar “la investidura fantasma” de Feijóo. Pero también rechaza sumarse al otro bloque. Coalición Canaria, ahora coaligada con el PP en el gobierno regional, pero experimentados en el cambio de acera, bien podrían aferrarse a la abstención en la investidura. Llegados a ese momento, la derecha valdría entonces 171, tanto como la izquierda. Pero eso cambia poco.
Realmente, el líder del PP no tiene ninguna opción de ser investido con el resultado del 23-J. Los 7 de Junts estarían en el no a Feijóo (178) frente a 171 (sin CC). Ese empate a 171, previsible hoy para la investidura, tampoco permitiría a Sánchez ser presidente. No tendría más síes que noes -salvo traición, poco previsible, de CC al PP-.
REPETICIÓN ELECTORAL
El bloqueo, entonces, desembocaría en otras elecciones, que es la deriva a la que se aferra en verdad Génova, desde la convicción de que la imagen clara de que Sánchez depende del fugado Carles Puigdemont daría un extra a la derecha para llegar a la mayoría absoluta. La repetición electoral sería tan a finales de año como que podría caer el 31 de diciembre. Pero con un escenario tan ajustado-convulso posiblemente se alargarán los pasos y acabarían siendo a principios de 2024. El PSOE hará todo lo posible por evitar el riesgo de nuevos comicios y eso nos devuelve al presente inmediato, esas “dos semanas” en las Sánchez “con España de vacaciones, venderá nuestra nación con España de vacaciones”, predijo Ayuso.
Hasta ahora, al presidente en funciones le bastaba con una abstención del president huido para ser investido, una situación más fácil de enmascarar por ambas partes. Ahora, con 171-171, necesita conseguir el sí de Junts. Pero, sobre todo, esa negociación ya no puede posponerse al otoño. Moncloa ve sacudidos sus planes: no puede dejar pasar el tiempo para que la presión genere grietas en Junts, mientras Feijóo se exprime en una investidura sin opciones.
CONSTITUCIÓN DE LAS CORTES, FECHA LÍMITE
El 17 de agosto marca ya una fecha límite para el PSOE. Ese día se constituyen las Cortes y tanto el PSOE como el PP aspiran a la Presidencia del Congreso de los Diputados, tercera institución del Estado y un puesto clave para marcar los ritmos legislativos y políticos en sintonía con Moncloa. En esa elección, prospera quien obtiene una mayoría absoluta en primera votación (nadie la tiene) o mayoría simple en segunda (hay empate). Pero para la elección del presidente/a, a diferencia de para esa “investidura fantasma de Feijóo”, sí parece negociable el sí de Coalición Canaria al candidato del PP que, por cierto, antes debería convencer a Vox, tan dado a votarse a sí mismo.
Si el PSOE pierde el control del Congreso sería un varapalo mayúsculo para Sánchez. “Pacto en dos semanas”. Porque efectivamente ese tiempo tiene el PSOE para convencer a Junts (o a parte de ese grupo) de que apoyen la candidatura de Meritxell Batet, si el PSOE vuelve a apostar por ella, o de cualquier otro candidato socialista a presidir el Congreso.
Si hubiese un pacto de la izquierda con Junts para la constitución de las Cortes, ese 17 de agosto, se vería afectada también la ronda de consultas del Rey, que se inicia justo después. Porque para entonces estaría algo más clarificada la guerra de bloques y Felipe VI debería decidir entre encargar la investidura al líder del partido más votado (PP), que era lo previsible hasta ahora, o a quién (Sánchez), ya entonces sí de manera fehaciente, por el acelerón de las negociaciones tras el cambio de escaño en Madrid, puede tener, por la gracia de Puigdemont, una mayoría para ser investido. Y así habría presidente por la vía rápida, a principios de septiembre.
Pedro Sánchez recibe a Pere Aragonés en Moncloa, en la reunión que mantuvieron a principios de julio del pasado año. JAVIER BARBANCHO
Sánchez teme la reacción de ERC “si parece que Puigdemont tiene la llave”
Encara la negociación para lograr su investidura forzado a un difícil equilibrio entre socios enfrentados
NotMid 29/07/2023
Discreción. Es la orden que impera en el PSOE. No salirse lo más mínimo de ese guión, primero para no sacar los pies del tiesto y dar munición al PP exhibiendo ya una delicada negociación con los independentistas y, segundo, para que su estrategia de desgaste hacia Alberto Núñez Feijóo, que se visibilice que está solo y no tiene apoyos, se trunque. Pero lo cierto es que la dependencia de los nacionalistas obliga a los socialistas a un difícil equilibrio: cortejar a Junts para lograr que facilite la investidura de Pedro Sánchez al tiempo que no se quiere incomodar o enfadar a ERC y Bildu, los socios la pasada legislatura.
El PSOE busca exhibir estos días una posición firme frente a la exigencia de Junts de que cualquier diálogo pasa por tener sobre la mesa «la amnistía y la autodeterminación». Insisten en público en que la negociación se ceñirá al «marco constitucional». «Y ellos lo saben», añaden desde la cúpula socialista en referencia a sus aliados potenciales. Consideran que estamos en un escenario de posiciones de máximos y que «es normal» que esgriman estas condiciones de partida, pero confían y creen posible llevar el diálogo «a buen puerto». Que el paso de las semanas rebajará los puntos de partida y será posible un punto común como, por ejemplo, se logró con ERC, con una concesión como los indultos, que también benefició a cargos de Junts. Los republicanos también pedían de partida la amnistía.
Cabe recordar que el documento que firmaron el PSOE y ERC para la «creación de una mesa entre el Gobierno de España y el Govern de la Generalitat para la resolución del conflicto político» sí contempla, y por tanto es un compromiso de los socialistas, que los acuerdos y medidas que se alcancen y consensuen en ese foro «serán sometidas en su caso a validación democrática a través de consulta a la ciudadanía de Cataluña, de acuerdo con los mecanismos previstos o que puedan preverse en el marco del sistema jurídico-político». Es decir, se abre la opción de cambios legales para permitir esa consulta. Por tanto, esta mesa ya en marcha podría ejercer como vehículo para tramitar las demandas de los independentistas catalanes.
TENSIONES ENTRE INDEPENDENTISTAS
Ocurre que el PSOE no se puede permitir atraer a Junts y distanciar a ERC o Bildu. Necesita todos los apoyos. La relación entre las formaciones independentistas catalanas está cargada de tensión. Además, con horizonte electoral en esa comunidad en 2025, lo que añade un punto más de dificultad al mapa político. Con todo, en el PSOE saben que tienen que avanzar, conseguir apoyos, pero midiedo mucho cada paso. Como admiten fuentes socialistas, «a ERC le puede molestar que el foco esté en Junts». Su propósito es tratar de no desequilibrar la balanza: «Todos van a estar en las mismas condiciones». El lenguaje a usar estas semanas será también clave, para no enfadar a ningún socio.
Porque, aunque en el seno del Gobierno y del PSOE están convencidos de que la negociación con Junts debe llevarse a cabo e, incluso, hay optimismo respecto a que pueda concluir de manera satisfactoria para sus intereses, es decir, con la investidura de Sánchez, los socialistas sí admiten: «No nos viene bien que parezca que Junts tiene la llave». Tratan de descafeinar el mensaje de que la gobernabilidad o que Sánchez está en manos de Carles Puigdemont. Un intento de evitar, además, desgaste y erosión por parte del PP. Aunque ésa sea la realidad que subyace en todo.
La preocupación por que ERC no se sienta desplazada o ninguneada reside también en el hecho de que los republicanos se han confirmado en la legislatura pasada como un socio de gobernabilidad estable para el PSOE. Con altibajos y momentos más o menos buenos, pero un socio con el que negociar y sacar adelante la gran mayoría de las iniciativas. Son siete votos, uno más que Bildu, con los que transitar la debilidad parlamentaria de una hipotética coalición PSOE-Sumar, con sólo 153 diputados, cuando la mayoría es 176. Porque si ERC apuesta por mostrar capacidad de influencia en Madrid, Junts no alberga ese propósito.
«La estabilidad del Gobierno español no es un objetivo estratégico para Junts, y no la apoyaremos. La experiencia nos ha demostrado que tanto el PSOE como el PP no han tenido ninguna voluntad real de respetar nuestros derechos como pueblo», es el mensaje que impera y trasladan desde Junts. Sin embargo, en el PSOE creen que hay margen para convencer a esta formación. Que hagan la digestión de los resultados electorales.
Primero por la presión política que van a recibir de otros partidos. Para empezar, ERC les instó ya desde el mismo domingo a ponerse de acuerdo en sus demandas, a pactar un «precio que tiene que ser alto y consensuado» a su apoyo porque pueden «decantar la balanza» en la formación de un posible Gobierno de PSOE y Sumar. Esta semana también comenzó su presión Bildu, que ya ha anticipado que facilitará la investidura de Sánchez. Confían en que la posición de Junts se «irá moldeando o modulando». «Lo que espero, por el bien de todos, es que las cosas se hagan con responsabilidad y con discreción. Ojalá todo se lleve en silencio y como es debido, hasta que vuelva a su cauce», expuso Mertxe Aizpurua, portavoz en el Congreso.
Segundo, porque en Ferraz están convencidos de que a Junts no le interesa una repetición electoral. El PSOE/PSC sacó en estas generales más diputados (19) en Cataluña que ERC (7) y Junts (7) juntos. Volver a repetir elecciones, una hipótesis que no contemplan en el equipo de Sánchez, ofrecería una nueva oportunidad a la derecha. «No les conviene», dicen desde la cúpula socialista, en el convencimiento de que los resultados podrían ser peores para el secesionismo. Confían en que, si se abre un debate en Junts, los posibilistas puedan imponer sus tesis frente a los más radicales.
El voto CERA da alas a Feijóo: aspira a lograr 172 votos a favor en la investidura, pero sin la abstención del PNV no suma
Continúa este sábado el recuento del voto extranjero. Este viernes el PP arrebató un escaño en Madrid al PSOE, pero las cuentas todavía no salen. La clave estará o en el sí de Junts a Sánchez o la abstención del PNV con Feijóo, algo a lo que ya se ha negado el partido vasco
La esperanza es lo último que se pierde. O si no que se lo digan a Alberto Nuñez Feijóo, al que un solo escaño más le ha hecho verse ya en Moncloa, aunque por mucha fe que tenga, no será fácil. Este viernes todas las miradas estuvieron puestas en el voto de los residentes en el extranjero — conocido como CERA por sus siglas—, un total de 233.688 papeletas, equivalentes al 10% del censo, que podía inclinar la balanza hacía un lado u otro. El recuento es lento, comenzó a las diez de la mañana pero no se conocerá el resultado final hasta este sábado. Estaban en juego hasta nueve escaños y, de momento, el PP ya le ha arrebatado uno al PSOE en la provincia de Madrid.
“Podría aspirar a 172 votos a favor de su investidura”, aseguran fuentes del partido, que recuerdan que para que Sánchez sume más apoyos que los populares necesitaría, sin excepción, los votos de ERC, PNV, Bildu y Junts. Ahora ya no es posible la abstención, una opción que hasta ayer estaba encima de la mesa por si los socialistas no conseguían el sí de Junts. Por el momento, el partido de Carles Puigdemont parece que será el hueso más duro de roer. Los republicanos anunciaron este viernes que consultarán a sus bases un “eventual” acuerdo para apoyar a Sánchez en la investidura; los de Arnaldo Otegi ya han iniciado las conversaciones con los socialistas y el PNV ya ha emplazado al presidente en funciones a negociar tras dar portazo al PP.
Pero por mucho que Feijóo sea optimista, las cuentas no salen. Habrá que ver si los populares suman algún escaño más a última hora. Sin Junts, el bloque de la izquierda se queda en 171 escaños —O 172 si consigue el sí del BNG— la misma cantidad que el de la derecha, que estaría formado por los 136 asientos de los populares, los 33 de Vox, y uno por parte de Coalición Canaria y otro de UPN. La única forma que tiene Feijóo de asegurarse una investidura exitosa ahora mismo es si los de Aitor Esteban se abstienen, algo complicado, ya que el presidente del partido vasco, Andoni Ortuzar, ya se negó este jueves en una entrevista en Radio Euskadi a pactar con Feijóo y aseguró que espera que Sánchez le haga un “planteamiento global sobre qué quiere durante estos cuatro años, especialmente en el ámbito del modelo territorial”, en referencia a las realidades de Euskadi y Cataluña.
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, en la tradicional ofrenda al Apóstol en Santiago de Compostela. (César Arxina /Europa Press)
Y este es el argumento que usan desde Génova, que ya se preparan para cualquier escenario, ya que la repetición electoral no puede descartarse. “Pedro Sánchez quiere unir a todos los partidos nacionalistas e independentistas para que le ayuden a ser presidente pese a quedar a 16 escaños de Feijóo y tener 330.000 votos menos”, apuntaron anoche tras conocer que el PP se hacía con un parlamentario más. “Ha perdido las elecciones, pero también el respeto por su país y por la historia de propio partido. Felipe González no intentó formar Gobierno en 1996 pese a quedarse a menos votos de Aznar que Sánchez de Feijóo. O Bildu u oposición. O independentismo o mudanza”, sentenciaron.
El coordinador general del PP, Elías Bendodo, ve posible “convencer a la mayoría de grupos” del Parlamento para que apoyen la investidura de Feijóo y no se rompa con la “historia democrática” de España, donde en 45 años siempre ha gobernado el vencedor de las elecciones. El dirigente popular, que este viernes participó en la junta directiva del PP de Málaga, ratificó que el líder del PP “va a intentar formar Gobierno” para “dotar de estabilidad” al país, aunque sigue sin tener mayoría parlamentaria.
El mensaje del PSOE a Junts
Mientras los populares celebraron este viernes por la noche este avence, desde Ferraz suenan las alarmas por si pierden más escaños. Nada más conocerse que el PP les había arrebatado uno en la provincia de Madrid, los socialistas quisieron lanzar un mensaje a Junts: “O se está con la ultraderecha y el PP o con el resto de fuerzas”, insistieron fuentes de Ferraz.
La formación catalana se vuelve más fundamental que nunca, y sus exigencias son claras: autodeterminación y amnistía. Los postconvergentes son conscientes de que ahora mismo Sánchez les necesita a ellos más que ellos a él, y jugarán con eso. Sin prisa.
¿Y qué hará Vox?
El presidente de Vox, Santiago Abascal. (A. Pérez Meca/Europa Press)
Otra cuestión clave es saber cuáles serán las condiciones que Vox le ponga al PP para facilitarle un sí en la investidura. El portavoz de la ultraderecha en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, afirmó este viernes que veía “posible” que el líder del PP encontrara apoyos suficientes entre algunos diputados del PSOE y que si conseguía reunir los votos necesarios su partido no bloquearía la investidura. Sin embargo, si Feijóo logra la mayoría parlamentaria, los de Santiago Abascal no pondrán problemas, o no les conviene, puesto que una repetición electoral sólo les haría perder todavía más escaños.
Escaños que estaban en juego
La vista estaba puesta tanto en Madrid como en Girona, donde el PP podía arrebatarle más parlamentarios al PSOE, pero finalmente, tan solo se ha producido un cambio en la capital, mientras que en la provincia catalana no se ha alterado el resultado. Los socialistas tenían una oportunidad en Salamanca, pero tampoco ha habido trasvase, ni han conseguido robarle ningún escaño a Junts en Cataluña. Está por ver qué ocurre este sábado con el baile de escaños.
Agencias