El inicio de la temporada 2022 de Fórmula 1 ha planteado varios problemas relacionados con el motor a los pilotos de Alpine. Fernando Alonso ya ha utilizado tres y Esteban Ocon ha montado en Imola el segundo en cuatro carreras.
NotMid 22/04/2022
DEPORTES
Ya lo dijo Laurent Rossi: este año Alpine quiere un motor competitivo, aunque al principio sea frágil. Y eso es justamente lo que ha ocurrido, pues tras haberse completado tres Grandes Premios e iniciarse el cuarto este fin de semana en Imola, Fernando Alonso ha utilizado ya tres motores y Esteban Ocon dos.
Eso, en una temporada en la que el límite de unidades permitidas por el reglamento es de tres, indica que Alpine y Renault tienen problemas de fiabilidad. Pero, a diferencia de lo que pueda pensarse, las averías no han llegado a consecuencia de un diseño deficiente del bloque motor, sino de un efecto inesperado que está planteando problemas a toda la parrilla.
El porpoising daña los motores
Hablamos del porpoising, rebote a alta velocidad que está provocando roturas en numerosas partes de los monoplazas, y en Alpine los problemas se han concentrado principalmente en el motor.
Así lo confirma Bruno Famin, director ejecutivo de la división de motores de Renault, que ha señalado que «la nueva generación de coches, con el nuevo chasis y la nueva aerodinámica, está generando un nivel diferente de presión. Los monoplazas son muy rígidos, son muy bajos y sufren impactos bastante grandes».
«Los problemas que tuvimos no fueron del propio ICE (motor de combustión). Eran de componentes alrededor del ICE, desafortunadamente, con algún impacto a veces en el ICE. El ICE en sí es muy bueno. No tenemos ningún problema con él, pero los impactos están generando nuevos niveles de estrés que estamos resolviendo», reitera el ingeniero francés.
Soluciones ya implementadas
El propio Famin confirma que los problemas derivados de la rotura de la bomba de agua en el coche de Fernando Alonso en Arabia Saudí ya han sido detectados y solucionados incluso en los motores que se están utilizando este fin de semana en Imola.
«Respecto al problema que tuvimos en Jeddah con el motor de Fernando (fallo en la bomba de agua), ya pedimos una modificación a la FIA. Fue aceptada y la modificación ya está en el motor para este fin de semana», confirma el francés.
«Todos los fabricantes están enviando solicitudes de fiabilidad a la FIA, y es público entre los fabricantes. Vemos que no somos los únicos en tener pequeños problemas de fiabilidad», desvela Famin. De hecho, Red Bull también ha admitido haber tenido problemas de fiabilidad en los motores provocados por el porpoising.
El motor de Ocon
Además, Famin ha ofrecido una actualización del estado del motor de Esteban Ocon que debió ser cambiado para este fin de semana. «Todavía lo estamos investigando. El problema que tenemos con el motor de Esteban es que nos gustaría volver a ponerlo en el banco de pruebas para ver si puede seguir utilizándose. Pero, desafortunadamente, no es posible con las regulaciones de la FIA».
«No podemos poner el motor en el dinamómetro sin romper el sello. Y nuestro problema es que no podemos entender completamente el problema sin hacerlo. Por eso estamos haciendo todo lo posible para no tocar el sello de la FIA y tratar de entender el problema», admite.
Y es que Renault, al igual que otros motoristas, ha optado por tomar riesgos con el propulsor de esta temporada, ya que el pasado 1 de marzo entró en vigor la congelación del desarrollo de los motores para los próximos cuatro años.
«Cuando hablas de un período de congelación de cuatro años, creo que no tienes otra opción que elegir el mejor motor posible, sabiendo que la FIA no aceptará ninguna modificación, ninguna mejora en términos de rendimiento, pero sí algunas modificaciones por problemas de fiabilidad», recuerda Famin con respecto a las peculiaridades del reglamento.
Agencias