NotMid 24/02/2022
La Noticia en Mil Idiomas
El expansionismo ruso tiene muchos objetivos, recuerda Die Welt, pero casi nadie está hablando de las dos ex repúblicas yugoslavas que no han entrado en la OTAN: Serbia y Bosnia-Herzegovina, sobre todo si la parte proserbia de Bosnia, la llamada Republika Srpska, se impone como amenaza hacerlo. El análisis del diario alemán indica que el pensamiento político ruso siempre ha considerado a los Estados vecinos como enemigos o como vasallos, y ahora que los otros países cercanos al Mar Negro se han pasado a Occidente, le interesa infiltrar en la zona de los Balcanes a dos países amigos y vasallos, que serían Serbia y Bosnia.